Los tratamientos de desintoxicaci¨®n de la coca¨ªna ya superan a los de la hero¨ªna

"Llev¨¢bamos a?os esperando que la epidemia de coca¨ªna llegara al hospital, parece que ya la tenemos encima", explica Cristina Pinet, psiquiatra de la Unidad de Toxicoman¨ªas del hospital de Sant Pau de Barcelona y testigo de una tendencia que no por prevista deja de preocupar a los expertos. El consumo de coca¨ªna, droga de moda desde hace m¨¢s de un decenio, super¨® al de hero¨ªna hace ya a?os, pero es ahora cuando se est¨¢ colocando en la c¨²spide de las estad¨ªsticas hospitalarias, superando a los tratamientos por hero¨ªna. En Catalu?a son ya m¨¢s de 2.200 las personas que cada a?o inician su desintoxicaci¨®n por esta sustancia, el doble que en 1997.

Los datos disponibles sobre el a?o 2003 indican que, por primera vez, los cerca de 40 centros de desintoxicaci¨®n existentes en Catalu?a trataron m¨¢s casos de adicci¨®n a la coca¨ªna (m¨¢s de 2.200) que a ninguna otra droga ilegal. Tradicionalmente era la hero¨ªna la droga que provocaba el inicio de un mayor n¨²mero de tratamientos. Llegaron a registrarse hasta 5.000 nuevos tratamientos en 1993 y ahora apenas superan los 2.000.

Con ello, la coca¨ªna se convierte en la primera drogodependencia en n¨²mero de curas comenzadas y comparte protagonismo en las unidades de desintoxicaci¨®n con la hero¨ªna y con el alcohol. Casi la mitad de los 12.702 tratamientos hospitalarios iniciados en 2002 tuvieron en el alcohol su principal motivo, con 5.500 casos. Le siguieron la hero¨ªna y la coca¨ªna, con 2.600 y 2.200 casos respectivamente. Esta ¨²ltima relaci¨®n se invirti¨® en 2003, cuando la coca¨ªna super¨® a la hero¨ªna en n¨²mero de casos tratados, y la nueva tendencia seguir¨¢ acentu¨¢ndose. "La hero¨ªna tiene cada vez menos usuarios nuevos, pero el mundo de las drogas es muy din¨¢mico y siempre hay sustancias que sustituyen a otras; ahora es el turno de la coca¨ªna", explica el responsable de Drogodependencias del Departamento de Salud, Joan Colom.

En opini¨®n de Colom, el peligro de la coca¨ªna es que sigue siendo una droga "bien vista" por un sector importante de la sociedad y que apenas genera sensaci¨®n de dependencia. "Como las drogas sint¨¦ticas", precisa, "el consumo se produce sobre todo los fines de semana y sin gran regularidad, as¨ª que la gente tarda mucho en darse cuenta de que no puede pasar sin una dosis".

Cambio de administraci¨®n

Pero este tiempo ya ha pasado para muchos y es ahora cuando acuden al hospital. En el Sant Pau se plantean una reforma de su unidad de tratamiento de toxicoman¨ªas. "Muchos de los medios que hasta ahora utiliz¨¢bamos para tratar a heroin¨®manos son ahora m¨¢s necesarios para personas con problemas con la coca¨ªna", explica Cristina Pinet, quien ha visto grandes cambios en los sistemas de administraci¨®n de la coca¨ªna. "Cada vez se esnifa menos y se fuma m¨¢s", se?ala esta psiquiatra, que advierte que las nuevas formas de tomarla no hacen m¨¢s que aumentar el grado de dependencia de la coca¨ªna. "Cu¨¢nto m¨¢s f¨¢cil y c¨®modo es el sistema de ingesti¨®n, m¨¢s engancha", precisa.

Est¨¢ claro que introducir la coca¨ªna como si se fumara un cigarrillo es m¨¢s f¨¢cil que con la tradicional raya. Lo sabe muy bien Eduardo Hidalgo, de la organizaci¨®n Energy Control, dedicada a informar a los usuarios de drogas sobre sus riesgos y los sistemas de administraci¨®n menos nocivos. Seg¨²n Hidalgo, fumar coca¨ªna es cada vez m¨¢s frecuente. Explica que hay dos tipos de coca¨ªna en el mercado: clorhidrato de coca¨ªna y sulfato de coca¨ªna, tambi¨¦n conocida como crack o base. La primera sustancia es la utilizada para su inhalaci¨®n, mientras que la segunda, menos accesible, es la que se utiliza para fumar.