La Operaci¨®n Pipol se olvid¨® de los explosivos

Treinta meses antes del atentado del pasado 11 de marzo en Madrid, la polic¨ªa de Asturias desarticul¨® una red de traficantes de droga formada por 25 personas entre las que se encontraba el ex minero Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras, la persona que supuestamente facilit¨® la dinamita a los terroristas que perpetraron la matanza en los trenes. En los registros policiales que se desarrollaron a ra¨ªz de las detenciones, los agentes hallaron mucha droga, armas, munici¨®n, 94 detonadores el¨¦ctricos y 16 cartuchos de Goma 2. La causa judicial abierta por aquel caso, y sin cerrar a¨²n, no investig¨® la procedencia del explosivo y no juzg¨® necesario decretar la prisi¨®n provisional para Su¨¢rez Trashorras.

Su¨¢rez Trashorras, encarcelado ahora por el 11-M, volvi¨® a trabajar en la mina dos meses despu¨¦s de ser detenido

El fiscal de Gij¨®n impide que se cierre el sumario al pedir que se interrogue a Rafa Zohuier, en prisi¨®n por la matanza

La causa judicial abierta a una red detenida en julio de 2001 con droga y Goma 2 no ha investigado la procedencia de la dinamita

Los hechos, en detalle, son los que siguen.

En julio de 2001, Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras, y su cu?ado Antonio Toro Castro, hoy en prisi¨®n por tr¨¢fico de drogas, fueron detenidos por agentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa de Gij¨®n en el curso de una operaci¨®n antidroga.

En aquella operaci¨®n policial, denominada Pipol, los agentes descubrieron en un garaje de la calle de Eloy Fern¨¢ndez Caravera, de Avil¨¦s, alquilado por Antonio Toro Castro, 16 cartuchos de Goma 2 marca ECO, 94 detonadores el¨¦ctricos de diferentes calibres (del 1 y del 4), dos pistolas, abundante munici¨®n, 84 kilos de hach¨ªs, tres kilos de coca¨ªna y diversas cantidades de marihuana, pastillas y sustancias para adulterar drogas.

Toro admiti¨® ante la polic¨ªa la propiedad de los estupefacientes, pero neg¨® toda relaci¨®n con los explosivos y los detonadores. El juez orden¨® su ingreso en la c¨¢rcel de Villabona (Asturias) por un delito contra la salud p¨²blica y otro por almacenamiento y tenencia de sustancias y aparatos explosivos.

Por esta causa, a¨²n abierta tras la ¨²ltima petici¨®n de la Fiscal¨ªa para que declare Raf¨¢ Zouhier, confidente de la Guardia Civil y tambi¨¦n encarcelado por ayudar supuestamente a los terroristas del 11-M a conseguir el explosivo, Toro estuvo en prisi¨®n preventiva entre el 21 de julio y el 20 de diciembre de 2001.

Durante su estancia en prisi¨®n, Toro coincidi¨® con Zouhier y este contacto supuestamente permiti¨® las posteriores relaciones entre los islamistas que perpetraron el atentado de Madrid y la red asturiana que les facilit¨® m¨¢s de 200 kilos de Goma 2.

El magistrado Juan Laborda Cobo, titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 1 de Gij¨®n, que lleva las diligencias del caso, confirm¨® al peri¨®dico El Comercio, de Gij¨®n, en marzo de 2004, que "la procedencia de los explosivos no fue investigada porque el hecho delictivo se limita a la tenencia de esos explosivos".

Tampoco entonces se denunci¨® por empresa alguna la desaparici¨®n de explosivos y detonadores de sus polvorines. La Goma 2 incautada en aquella operaci¨®n fue destruida en noviembre de ese a?o.

La mina Conchita contrat¨® a Trashorras s¨®lo dos meses despu¨¦s de que fuera detenido en la operaci¨®n en la que se localiz¨® Goma 2 junto a detonadores el¨¦ctricos.

Uno de los imputados es J. I. F. D., Nayo, a quien se le atribuye una relaci¨®n habitual con Su¨¢rez Trashorras. Nayo es quien, seg¨²n el abogado madrile?o Carlos Alberto Tejeda, era conocedor de la existencia de un supuesto alijo de Goma 2 en un monte de la zona de Avil¨¦s. Seg¨²n Tejeda, dos clientes suyos, condenados por narcotr¨¢fico por la Audiencia Provincial de Oviedo, ofrecieron en aquella fecha (fines de 2002) informaci¨®n a la fiscal¨ªa asturiana sobre la existencia de un almac¨¦n clandestino de 500 kilos de explosivos en la comarca de Avil¨¦s y cuyo supuesto propietario era el ex minero Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras. Seg¨²n Tejeda, fue de Nayo de quien parti¨® la iniciativa de negociar un acuerdo con el fiscal, pero asegura que el abogado de Nayo no lo consider¨® oportuno. Tejeda, conocedor de ello, s¨ª intent¨® entonces, afirma, aprovechar esa informaci¨®n para reducir la pena de sus dos defendidos. Seg¨²n el ex fiscal antidroga de Asturias Jos¨¦ Luis Rebollo, la informaci¨®n facilitada por el procesado era muy difusa y "no se apreciaban demasiados visos de verosimilitud", lo que le llev¨® a rechazar el planteamiento del letrado.

Para la Operaci¨®n Pipol, el juez hab¨ªa autorizado la realizaci¨®n de escuchas telef¨®nicas a los detenidos despu¨¦s de que una prostituta informara al Cuerpo Nacional de Polic¨ªa de que cre¨ªa que su proxeneta y un amigo pod¨ªan estar implicados en un asesinato ocurrido en el parque de los Pericones y que adem¨¢s, la noche de aquel hecho, compraron coca¨ªna en un pub de Gij¨®n.

Las investigaciones arrancaron en ese local, del que la polic¨ªa ya hab¨ªa tenido informaciones sobre el movimiento de droga. Al final, las sospechas sobre la supuesta autor¨ªa del asesinato resultaron infundadas, pero la investigaci¨®n permiti¨® desmantelar las ramificaciones en Asturias de una red de tr¨¢fico de droga a la que prove¨ªa el supuesto narco gallego M. B. M., establecido en una localidad de las R¨ªas Baixas gallegas que est¨¢ pr¨®xima a Cambados, centro neur¨¢lgico del clan de los Charlines. M. B. M., que hoy tiene 28 a?os, fue uno de los detenidos en la Operaci¨®n Pipol.

Uno de los principales contactos en Asturias de M. B. M. era supuestamente el polic¨ªa local de San Mart¨ªn del Rey Aurelio, L. C. G. Las primeras detenciones se realizaron en Navia y se practicaron a dos avilesinos, D. G. D. y F. J. A. S., cuando regresaban a Asturias con dos kilos de coca¨ªna en su veh¨ªculo.

La operaci¨®n fue desarrollada por los grupos de estupefacientes de las comisar¨ªas asturianas de Gij¨®n, Oviedo y Avil¨¦s, con el resultado conocido: la aprehensi¨®n de un volumen importante de estupefacientes, los 94 detonadores y los 16 cartuchos de Goma 2 ECO.

La Uni¨®n Profesional de Guardias Civiles (UPGC), en declaraciones a la agencia Efe el 25 de marzo de 2004, asegur¨® que el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa no hab¨ªa comunicado el hallazgo de la dinamita a la Guardia Civil pese a ser este cuerpo el competente en materia de explosivos.

Seg¨²n la UPGC, los antecedentes de Su¨¢rez Trashorras, detenido en julio de 2001 junto a otras 24 personas en el marco de una operaci¨®n antidroga e imputado en este caso por el juzgado, s¨®lo constaban en la base de datos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa "lo que evidencia una vez m¨¢s la falta de coordinaci¨®n entre ambos cuerpos de seguridad". Seg¨²n la Uni¨®n Profesional de Guardias Civiles, tras realizar estos arrestos, la investigaci¨®n se centr¨® en las drogas incautadas, pero no en la procedencia de los explosivos localizados en el garaje de Avil¨¦s.