Prodi regresa a la pol¨ªtica en un momento ¨®ptimo para sus intereses

Romano Prodi regresa a la pol¨ªtica italiana en un momento que podr¨ªa parecer ¨®ptimo para sus intereses. El nuevo jefe de la oposici¨®n encuentra un Gobierno dividido, impopular y eternamente encallado en una reforma fiscal pendiente desde 2001. La coalici¨®n de centro e izquierda que dirigir¨¢ Prodi no est¨¢, sin embargo, mucho mejor que el Gobierno de Berlusconi. No ha sido capaz de alcanzar un acuerdo para presentar listas conjuntas en las elecciones regionales, lo que le habr¨ªa casi asegurado la victoria. No ha sido capaz ni de ponerse de acuerdo sobre el nombre de la coalici¨®n. Hace dos semanas se eligi¨® la denominaci¨®n Gran Alianza Democr¨¢tica, que, por razones obvias, se abrevi¨® en GAD. El l¨ªder de La Margarita, el centrista Francesco Rutelli, dijo ayer que GAD sonaba "muy feo", y que le gustaba m¨¢s "Alianza". Por desgracia, hab¨ªa ya una Alianza, el partido de los posfascistas.

Prodi sufrir¨¢ el mismo problema estructural que afecta a Silvio Berlusconi: la a?oranza de un gran partido de centro. La di¨¢spora democristiana, con refugiados tanto en la derecha (UDC) como en la izquierda (La Margarita), nunca ha dejado de so?ar con la reconstrucci¨®n de la vieja DC. Y nunca se ha sentido c¨®moda con el actual sistema, abundante en partidos (hay 12 en el Parlamento, m¨¢s un nutrido grupo mixto), pero artificiosamente bipolar. El propio electorado da se?ales de fatiga. Los votos que pierden Forza Italia y los dem¨¢s partidos conservadores, seg¨²n los sondeos que maneja Berlusconi, no van a la oposici¨®n. Se pierden en el vac¨ªo de los "indecisos".

Il Reformista, diario que da voz al neocentrismo, publicaba ayer un editorial titulado Los ¨²ltimos d¨ªas de la Segunda Rep¨²blica y pronosticaba un desplome del sistema, similar al que en 1992 acab¨® con la democracia cristiana y el comunismo. El fracaso de Berlusconi, dec¨ªa, era un fracaso de todos. Il Reformista exageraba, pero no mucho: la Italia a la que vuelve Prodi est¨¢ en crisis profunda.