Espa?a y Egipto apoyan la creaci¨®n de un Estado palestino el pr¨®ximo a?o

El proceso de paz en Oriente Pr¨®ximo es un camino ya trillado cuya culminaci¨®n requiere m¨¢s que nada de un impulso pol¨ªtico decisivo. ?sta es la conclusi¨®n, o la esperanza, en la que el jefe del Ejecutivo, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el presidente egipcio, Hosni Mubarak, coincidieron ayer en Madrid, al t¨¦rmino de un encuentro en el que suscribieron el objetivo de que el Estado palestino sea realidad en 2005.

La fecha, barajada por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, es, sin duda, ilusoria desde el punto de vista de Israel, pero supone una referencia positiva para Europa y para el mundo ¨¢rabe. Sustentan esta confianza en una paz cercana, pese al desarrollo desesperantemente sangriento del conflicto en los ¨²ltimos a?os, la mencionada asunci¨®n por Bush y luego por el primer ministro de Israel, Ariel Sharon, de una paz basada en la existencia de dos Estados; el plan israel¨ª de retirada de Gaza, que incluso la direcci¨®n palestina ha terminado apreciando, pese a su unilateralismo, y la desaparici¨®n de Yasir Arafat, que es considerada como una "ventana de oportunidad" desde todos los ¨¢ngulos.

"Siempre dijimos que Arafat era muy importante, porque era el ¨²nico l¨ªder que pod¨ªa convencer a su pueblo de que hab¨ªa que aceptar un acuerdo de paz. Algunos pusieron a Arafat como excusa para no seguir negociando. Ahora que ha fallecido, esperemos que no encuentren otros pretextos", dijo Mubarak en alusi¨®n al rechazo a negociar con Arafat que Israel y EE UU mantuvieron durante los tres ¨²ltimos a?os.

El rais egipcio pas¨® por Madrid camino del Magreb y se entrevist¨® con Zapatero en La Moncloa. Se trata del primer encuentro entre ambos l¨ªderes, que no se conoc¨ªan personalmente. Mubarak quiso hacer la escala por ese motivo, a la vista de que el presidente espa?ol tendr¨¢ problemas de agenda para visitar Egipto a corto plazo.

Adem¨¢s de las relaciones bilaterales, en las que Zapatero destac¨® un proyecto de Uni¨®n Fenosa ya en marcha y posibles inversiones espa?olas en infraestructuras y saneamientos en Egipto, gir¨® en torno a los grandes temas de la pol¨ªtica internacional, sobre todo Irak y el conflicto israelo-palestino.

El presidente egipcio es un protagonista hist¨®rico e imprescindible de las negociaciones en torno al ¨²ltimo problema citado. Zapatero contin¨²a la pol¨ªtica espa?ola tradicional de volcar en el inestable proceso de paz toda su capacidad de interlocuci¨®n con el mundo ¨¢rabe. Esa capacidad tradicional es hoy a¨²n mayor, debido a que el ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, ha sido durante a?os el enviado especial de la Uni¨®n Europea para el conflicto israelo-palestino.

Elogio a Moratinos

"El papel de Espa?a es contribuir de manera decisiva, en el ¨¢mbito de la UE, pero tambi¨¦n en bilateral, a la unidad de las organizaciones palestinas y para que el di¨¢logo pol¨ªtico de fondo [con Israel] comience cuanto antes", dijo Zapatero, que destac¨® el valor "capital" de Moratinos. El ministro de Exteriores iniciar¨¢ el 1 de diciembre, mi¨¦rcoles, tras su comparecencia en el Congreso para precisar sus declaraciones sobre Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, una visita a Israel y a los territorios palestinos. Por invitaci¨®n de Mubarak, har¨¢ una escala en El Cairo.

El 30 de noviembre, Moratinos asistir¨¢ a la cumbre hispano-italiana en Cuenca. Ya el 1 de diciembre, antes de iniciar la gira por Oriente Pr¨®ximo, ten¨ªa que viajar a Mosc¨² con Zapatero, pero ha renunciado a hacerlo para no postergar su comparecencia en el Parlamento.