"Un Gobierno no debe tener astilleros"

"En t¨¦rminos globales, el planeta va bien. Cerca de 450 millones de personas han salido de la pobreza en los ¨²ltimos 20 a?os y las desigualdades se reducen". Son palabras de Xavier Sala i Mart¨ªn, uno de los economistas aut¨®ctonos cuyos trabajos de investigaci¨®n han sido m¨¢s citados en los ¨²ltimos a?os y que hoy recibir¨¢ el premio de Rey Juan Carlos de Econom¨ªa por sus teor¨ªas sobre el crecimiento econ¨®mico y desarrollo. Ayer, rodeado de una pizarra con f¨®rmulas matem¨¢ticas, de mu?equitos vestidos del Bar?a (preside su comit¨¦ econ¨®mico) y de papeles por el suelo en su despacho de la Universidad Pompeu Fabra, este catedr¨¢tico de Columbia desgranaba as¨ª sus opiniones de corte liberal, a menudo provocadoras.

Pregunta. ?Qu¨¦ va antes, desarrollo o democracia?

Respuesta. La mayor¨ªa de dictaduras son un desastre, pero hay de todo. Miremos Singapur o China. Hay poca relaci¨®n entre democracia y desarrollo.

P. Sostiene que la diferencia reside en si los pa¨ªses han abierto o no sus econom¨ªas al exterior.

R. La apertura comercial es buena. Sin duda. ?frica es un desastre econ¨®mico. No le ha llegado la globalizaci¨®n ni del trabajo, la tecnolog¨ªa, las mercanc¨ªas, la informaci¨®n o el capital. Asia se ha globalizado y ha reducido su pobreza.

P. Baja el n¨²mero global de pobres, pero las desigualdades aumentan entre pa¨ªses. ?Por qu¨¦ hay que medirlo en poblaci¨®n?

R. Si China va bien y crece un 10%, muchos de sus 1.300 millones de habitantes dejan de ser pobres. Me preocupa el bienestar de los ciudadanos, no de los territorios.

P. ?En Espa?a crecen o no las desigualdades?

R. Las regiones pobres crecieron m¨¢s que las ricas hasta los 80. La convergencia se fren¨® con las pol¨ªticas de redistribuci¨®n regional. La pol¨ªtica de invertir en las zonas pobres queda muy bien, pero ha sido un fracaso. En Europa, EE UU o China. Cuando el Gobierno intenta inducir el crecimiento de un pa¨ªs, fracasa. Debe dedicarse a reducir la burocracia y a incentivar la creatividad. No debe tener astilleros, bancos, el¨¦ctricas o aeropuertos. S¨ª crear un entorno para que las empresas hagan negocio. Y s¨ª combatir la evasi¨®n fiscal.

P. ?Ayudar¨ªa a ello simplificar los impuestos?

R. Los pa¨ªses n¨®rdicos tienen impuestos sobre la propiedad y el capital m¨¢s bajos que EE UU. Pero los tienen m¨¢s altos sobre la gasolina o los bienes de lujo, ya que tienen mucho gasto social y necesitan impuestos eficientes. Nosotros queremos un Estado del Bienestar n¨®rdico, pero tenemos unos impuestos ineficientes. Y los ricos siguen yendo a Jersey. Simplificar los impuestos es bueno, sobre todo para perseguir la evasi¨®n fiscal y para que la recaudaci¨®n sea mucho m¨¢s eficiente.

P. Espa?a sale mal parada de los ranking de competitividad.

R. La competitividad viene de los j¨®venes que quieren crear su empresa y de los empresarios con esp¨ªritu cr¨ªtico. Aqu¨ª tenemos bur¨®cratas y j¨®venes que quieren trabajar toda la vida en La Caixa, y a los ni?os no se les ense?a a cuestionar al profesor. En Espa?a, todo va de subsidios a la Nissan de turno para que no se vaya.

P. ?Qu¨¦ puede hacer un Gobierno ante la deslocalizaci¨®n?

R. Si una empresa quiere irse, que se vaya. Seguramente vino aqu¨ª porque Espa?a era m¨¢s barata y antes cerr¨® en otro lugar. El Gobierno no puede aguantar la presencia de empresas con subvenciones. Debe crear un entorno educativo adecuado y para que se creen otras nuevas empresas.

P. ?Qu¨¦ efecto tendr¨¢ la apreciaci¨®n del euro?

R. El euro puede frenar el crecimiento de Europa. El lado bueno es que no hemos vivido tanto el encarecimiento del petr¨®leo. El malo tiene que ver con el d¨¦ficit comercial de EE UU con Asia, sobre todo con China, ya que le vende menos de lo que le compra. Para equilibrarlo, EE UU encarece sus importaciones y vende m¨¢s barato. Una forma de hacerlo es que el d¨®lar baje. El otro lado de la moneda es que esto provoca que los productos europeos sean m¨¢s caros para los americanos, que los compran menos. China tiene un tipo de cambio fijo con el d¨®lar, as¨ª que todo este ajuste del desequilibrio entre China y EE UU se corrige creando otro entre Europa y EE UU. El desequilibrio entre China y EE UU lo pagaremos los europeos. Porque nosotros no intervenimos la moneda. El problema es mayor para Alemania o Italia, pero una crisis en estos pa¨ªses, indirectamente, afecta a Espa?a.