Evaluar el gasto, mejorar la democracia
CUANDO LAS AGENCIAS INTERNACIONALES, p¨²blicas o privadas, eval¨²an la competitividad espa?ola, llegan a la siguiente conclusi¨®n general: bien en lo que se refiere a pol¨ªtica macroecon¨®mica, regular en lo que respecta a la educaci¨®n, mal en la calidad de las instituciones p¨²blicas. La productividad de un pa¨ªs se mide, entre otras cosas, por la cantidad y calidad de los factores de producci¨®n: trabajo y capital principalmente.
Esa calidad de las instituciones se relaciona con la eficacia con la que se gasta el dinero p¨²blico, y, tambi¨¦n, de los organismos reguladores. En una reciente intervenci¨®n en la Fundaci¨®n Alternativas, el catedr¨¢tico de Teor¨ªa Econ¨®mica y consejero del Banco de Espa?a, Julio Segura, explic¨® que la clave del buen funcionamiento de los organismos reguladores depende de su reputaci¨®n. ?C¨®mo se obtiene ¨¦sta?: a trav¨¦s de la competencia t¨¦cnica de las personas que los forman; por la transparencia con la que funcionan (si informan o no de lo que hacen, y lo publican), y por el grado de autonom¨ªa real de los poderes econ¨®micos y de los poderes pol¨ªticos.
En los estudios de la competitividad espa?ola falla, sobre todo, la calidad de las instituciones p¨²blicas. Esa calidad se mide por la eficacia con que se gasta el dinero p¨²blico y por la reputaci¨®n de los ¨®rganos reguladores
Estudiar la eficacia del gasto p¨²blico figuraba en el programa electoral con el que el PSOE gan¨® las elecciones, como parte de los instrumentos para mejorar la calidad de la democracia. En dicho programa se dec¨ªa que "las Administraciones P¨²blicas son instrumentos esenciales para desarrollar la democracia y asegurar el progreso individual y del conjunto de la sociedad", as¨ª como que "los servicios p¨²blicos son indispensables para garantizar la igualdad de oportunidades de todas las personas y para que ¨¦stas puedan ejercer plenamente los derechos y las libertades que la Constituci¨®n les reconoce".
Lo que se dice, se hace. El ministro de Administraciones P¨²blicas, Jordi Sevilla, nada m¨¢s tomar posesi¨®n del departamento, encarg¨® a una comisi¨®n de expertos los estudios para crear una Agencia Estatal de Evaluaci¨®n de la Calidad de los Servicios y de las Pol¨ªticas P¨²blicas. Una agencia de nombre tan horrendo se constituir¨ªa como el elemento articulador b¨¢sico de un Sistema P¨²blico de Evaluaci¨®n. As¨ª lo explic¨® Sevilla en el Congreso el pasado mes de junio.
El ministro dio tres meses a esa comisi¨®n, presidida por el ex director del Instituto de Estudios Fiscales Juan Antonio Garde, para que presentase su estudio. Ya lo ha hecho. Cuando se constituya como ente p¨²blico independiente y sea aprobada por el Consejo de Ministros, servir¨¢ para evaluar la calidad de los servicios p¨²blicos impartidos y si el dinero p¨²blico invertido en ellos ha sido rentable, as¨ª como el dinero que la Administraci¨®n dedica a subvenciones o a la cooperaci¨®n internacional. Garde recordaba recientemente (Cinco D¨ªas, 22 de noviembre) que los gastos fiscales del Presupuesto de 2005 suponen algo m¨¢s de 41.000 millones de euros, de los que alrededor de 14.000 millones son incentivos que deben ser analizados y reconsiderados para ver hasta qu¨¦ punto cumplen las expectativas para las que fueron creados.
La Agencia depender¨¢, en un primer momento, de Administraciones P¨²blicas, con la voluntad de que en el caso de que se logre la reforma del Senado como c¨¢mara de representaci¨®n territorial pase al mismo. No existe en los pa¨ªses que se han estudiado (Alemania, Canad¨¢, Austria, EE UU, Francia...) un modelo ideal o generalizable que sirva en todos los casos para Espa?a.
Del mismo modo que se necesitan filtros p¨²blicos para evaluar la competencia t¨¦cnica de los reguladores y la ausencia de conflicto de intereses en los mismos, el debate ya no es s¨®lo cu¨¢nto dinero debe gastar el sector p¨²blico en sus diferentes administraciones (central, auton¨®micas y municipales), sino c¨®mo se gasta. Con esta filosof¨ªa, tan importante es aumentar el presupuesto p¨²blico de investigaci¨®n y desarrollo como saber por qu¨¦ en Espa?a por cada unidad p¨²blica que se invierte en este concepto s¨®lo se invierte una unidad privada y no dos, como en el resto de Europa.
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