El Consejo de Ministros aprueba el traslado de la sede de la CMT a Barcelona en 2005

El Consejo de Ministros aprob¨® ayer el pol¨¦mico traslado de la sede de la Comisi¨®n del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) de Madrid a Barcelona a lo largo del a?o que viene, pese a la oposici¨®n de su presidente, Carlos Bustelo, del consejo del organismo y de sus trabajadores. El ministro de Industria, Jos¨¦ Montilla, afirm¨® ayer que el traslado no mermar¨¢ "la eficacia" ni la "objetividad e imparcialidad" de la CMT. Mientras, el consejo advirti¨® que la profesionalidad de sus empleados "no permite cambios dr¨¢sticos en la organizaci¨®n".

El traslado de la sede de la CMT a Barcelona forma parte del acuerdo alcanzado en julio pasado entre el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el presidente de la Generalitat catalana, Pasqual Maragall, para iniciar la descentralizaci¨®n de ¨®rganos estatales. Esta iniciativa es una vieja reclamaci¨®n emblem¨¢tica del presidente catal¨¢n, que conf¨ªa en que no ser¨¢ "la primera ni la ¨²ltima".

La vicepresidenta primera del Gobierno, Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega, ahond¨® ayer en el discurso descentralizador del Ejecutivo al subrayar, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que "Espa?a no empieza ni termina en Madrid" y que por ello "es bueno que los centros de decisi¨®n tambi¨¦n est¨¦n en otras ciudades".

Tras conocer la decisi¨®n del Gobierno, el consejo de la CMT mostr¨® su "respeto" por la misma, aunque advirti¨® que la profesionalidad de sus empleados y la complejidad del sector "no permiten cambios dr¨¢ticos en la organizaci¨®n", sobre todo en un momento en que se acomete la implantaci¨®n del nuevo marco regulador comunitario. En opini¨®n de este organismo, "la peculiar actividad de la CMT le ha obligado a desarrollar capacidades ¨²nicas en su personal dif¨ªcilmente sustituible, que le dota de un grado de profesionalidad sin el cual no podr¨ªa realizar sus funciones".

El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Jos¨¦ Montilla, quiso lanzar un mensaje tranquilizador al respecto, al insistir ayer, durante la rueda de prensa, en que "el traslado de un organismo regulador implica un cambio de sede, sin que por esto tenga que haber un menoscabo de las funciones que tiene encomendadas y no supone ninguna merma en la capacidad y eficacia que haya podido seguir ejerciendo desde su creaci¨®n, y no tiene por qu¨¦ afectar nada a su objetividad e imparcialidad".

Montilla a?adi¨®, que "en el caso de la CMT, adem¨¢s, no existe ninguna norma jur¨ªdica que estableza d¨®nde debe residir el organismo regulador, dejando esta potestad al Gobierno, que es el que organiza la administraci¨®n del Estado".

El real decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros establece que ser¨¢ la propia CMT la que organice su traslado a lo largo del a?o que viene. Asimismo, se autoriza al Ministerio de Industria para dictar cuantas disposiciones y medidas sean necesarias para el desarrollo y aplicaci¨®n del real decreto.

Decisi¨®n pol¨¦mica

El traslado de la CMT a Barcelona ha suscitado, desde su anuncio en julio, una pol¨¦mica avivada por el rechazo de la plantilla del organismo -alrededor de 150 personas-, que se ha traducido en actos de protesta y en la marcha de alg¨²n t¨¦cnico.

El consejo de la Comisi¨®n, el m¨¢ximo ¨®rgano de poder del organismo, quiere, no obstante, m¨¢xima autonom¨ªa para llevar a cabo el traslado. Fuentes del consejo informaron en su momento que la oferta que lanz¨® en su d¨ªa Maragall para ubicar la sede de la CMT en un edificio de la zona del F¨®rum rompe con la autonom¨ªa que concede la ley a su consejo para decidir libremente sobre aspectos como la contrataci¨®n de personal o el alquiler e incluso la compra de inmuebles.

La CMT es el m¨¢ximo organismo regulador del sector de las telecomunicaciones en Espa?a. Fue creada hace siete a?os tras la ruptura del monopolio de Telef¨®nica y la aparici¨®n de la competencia. Entre sus funciones est¨¢ el establecimiento y supervisi¨®n de las obligaciones de los operadores de telecomunicaciones, la resoluci¨®n de los conflictos entre ellos y el fomento de la competencia en el mercado audiovisual. Aunque depende org¨¢nicamente del Ministerio de Industria, su funcionamiento es independiente y, de hecho, se ha opuesto a decisiones adoptadas por el Ejecutivo. Tanto su presidente, en la actualidad Carlos Bustelo, como los miembros del consejo son elegidos por seis a?os por el Gobierno.