Palabras
En m¨¢s de una ocasi¨®n he alabado a personas con una oratoria f¨¢cil, clara y bien estructurada; no hay nada que admire m¨¢s que la facilidad de palabra que suelen tener los profesores por eso de estar acostumbrados a ejercitarla. Y otras veces he escrito sobre la necesidad de pensar, tema del que si no he dado muestras de tanta admiraci¨®n no ha sido por restarle importancia sino porque, considerando que yo pensaba un poco, no me parec¨ªa tan dif¨ªcil como el hablar. Lo que no se me hab¨ªa ocurrido es que pensar una cosa es saber expresarla en palabras, que si a veces no sabemos lo que pensamos es porque no sabemos c¨®mo decirlo.
Eso ha sido para m¨ª lo m¨¢s importante de lo que he podido aprender hasta ahora en un cursillo de filosof¨ªa que ha organizado El Ateneo de Sevilla y que imparte el profesor Mariano Pe?alver. Ahora comprendo que si da pereza pensar, m¨¢s que por falta de tiempo es por el esfuerzo que supone encontrar las palabras precisas que alumbren ese pensamiento; y tambi¨¦n s¨¦ por qu¨¦, una vez superada esa pereza y lanzada una a dar vueltas entre los modos de decir, cuando se acaba encontrando la frase adecuada, se obtiene una gran satisfacci¨®n: porque se ha descubierto lo que se piensa.
Dice Pe?alver que si pensamos con rigor (claro y bien dicho) y con libertad (sin coacci¨®n) el sentido y el valor de lo que hay y lo que sucede, estamos pensando filos¨®ficamente. Y tras escuchar sus explicaciones no parece demasiado dif¨ªcil, ni tampoco que haga falta estudiar a los grandes fil¨®sofos; pero s¨ª se necesita pr¨¢ctica para llegar y contestar a los por qu¨¦: por qu¨¦ ocurre, por qu¨¦ lo aceptamos o lo rechazamos.
Todos queremos y podemos conocer la realidad, los acontecimientos de la actualidad y la vida cotidiana. Hay incluso una jerarqu¨ªa de esa necesidad de conocer, pero para conseguirlo hay que pensar. Pe?alver reparti¨® una fotocopia con una historia de Borges sobre un personaje, Funes, que recordaba cada detalle y cada momento de lo que percib¨ªa y que tambi¨¦n hab¨ªa aprendido varios idiomas, pero que no era capaz de pensar. "Pensar es olvidar diferencias, es generalizar, es abstraer". Y adem¨¢s hay que pensar en palabras.
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