Las nubes contaminadas son m¨¢s secas que las limpias y enfr¨ªan menos la Tierra

L as nubes, y las part¨ªculas en suspensi¨®n que contienen por efecto de la contaminaci¨®n, se han desvelado como uno de los escollos m¨¢s dif¨ªciles de afrontar en los modelos que reproducen la evoluci¨®n clim¨¢tica del pasado y permiten hacer proyecciones de futuro. En principio, esas part¨ªculas, llamadas aerosoles, deben aumentar la cantidad de agua retenida en las nubes al actuar como semillas para la formaci¨®n de m¨¢s gotas de agua y m¨¢s peque?as de lo normal que en una nube limpia, por lo que llueve menos. As¨ª, las nubes contaminadas, con m¨¢s agua, reflejan m¨¢s radiaci¨®n solar hacia el espacio que las limpias, de manera que llega a la superficie terrestre menos cantidad de esa energ¨ªa y se produce un efecto de enfriamiento.

Pero un estudio dado a conocer en la revista Nature, indica que la retenci¨®n de agua y el aumento de la reflectividad de las nubes cargadas de aerosoles respecto a las limpias, es muy inferior a lo que se pensaba cuando el aire que est¨¢ por encima es seco, siendo inferior tambi¨¦n su efecto de enfriamiento.

La investigaci¨®n, realizada por Andrew Ackerman (del Centro Ames de la NASA) y colegas de EE UU y de Australia, utiliza datos tomados con espectrorradi¨®metros desde sat¨¦lites y desde aviones, centr¨¢ndose en la comparaci¨®n de nubes limpias con las nubes contaminadas que se forman en las trazas de barcos. A partir de esta informaci¨®n han desarrollado un modelo que simula los movimientos atmosf¨¦ricos y la formaci¨®n de precipitaciones en las nubes. Despu¨¦s han probado si dicho modelo reproduce bien la realidad aplic¨¢ndolo a situaciones reales con datos de campo.

Ackerman afirma que, en contra de lo que se esperaba, las nubes bajas contaminadas normalmente no retienen m¨¢s agua que las pr¨ªstinas. Cuando el aire que est¨¢ sobre una nube contaminada es h¨²medo, el contenido de agua de la nube aumenta, tal y como se esperaba. Pero cuando el aire por encima de un estratoc¨²mulo es seco, el contenido de agua de la nube con aerosoles disminuye y ¨¦sta refleja menos energ¨ªa.

Por ello no se debe contar con que el efecto de los aerosoles en las nubes contrarrestando, al menos temporalmente, parte del calentamiento inducido por los gases de efecto invernadero, sea tan significativo como algunos modelos de predicci¨®n clim¨¢tica indican.

La consecuencia puede ser importante para el cambio clim¨¢tico. Joyce E.Penner, experto de la Universidad de Michigan (EE UU) recuerda en Nature que los modelos indican que el aumento de las temperaturas medias de la Tierra dentro de 100 a?os estar¨¢ entre 1,4 y 5,8 grados cent¨ªgrados y que del efecto de los aerosoles, a¨²n mal comprendidos, depender¨¢ en parte el calentamiento real que se registrar¨¢.

Aclarar el papel que juega la contaminaci¨®n en las nubes, e incluso los diferentes tipos de aerosoles, con sus efectos directos e indirectos, es esencial para ajustar bien los modelos de proyecci¨®n clim¨¢tica.

"Los resultados de este trabajo deben proporcionar un tratamiento m¨¢s realista de las nubes contaminadas en los modelos clim¨¢ticos, mejorando las predicciones del clima futuro", dice Ackerman. "Mientras tanto, es esencial que comprobemos ampliamente estos nuevos resultados te¨®ricos y los sat¨¦lites de observaci¨®n de la Tierra de ¨²ltima generaci¨®n de la NASA proporcionan una poderosa herramienta para hacerlo".