El Sevilla se deshace del Albacete sin esfuerzo

El Sevilla despach¨® al Albacete con el m¨ªnimo esfuerzo y ahorr¨® fuerzas para su aventura copera. Tal es la cara de moribundo que presenta el Albacete que cualquier partido le supone una cuesta arriba. Si adem¨¢s se le lesionan dos jugadores, recibe dos goles en dos jugadas aisladas y no acierta a marcar un tanto ni jugando un d¨ªa entero, poco le queda por decir. El Sevilla no hizo nada del otro mundo. Le bast¨® con un disparo precioso, eso s¨ª, de Renato y un sprint de Anto?ito en la prolongaci¨®n de la primera parte. En el segundo tiempo no tir¨® ni una vez a puerta, se atrincher¨® en su ¨¢rea y confundi¨® al Albacete con su juego aburrido y de pillos. Que si Anto?ito y Alves simulaban una agresi¨®n, que si Aranda fing¨ªa un penalti... El delantero fue silbado en su regreso a Albacete.

Sin Baptista ni Makulula, el Sevilla se entreg¨® a un f¨²tbol tan industrial como pr¨¢ctico. El Albacete acumul¨® jugadores tras el bal¨®n y sali¨® escopetado al recuperarlo. Por la izquierda, Mark Gonz¨¢lez puso en aprietos a Sergio Ramos hasta lesionarse y por la derecha ca¨ªan Rub¨¦n Castro y Olivera. Claro que toda la puesta en escena se desmoronaba a la hora de acertar con el gol. Todo lo contrario que el Sevilla, que, a la primera que tuvo, se adelant¨® con un golazo de Renato, su tercero en la Liga.

Sin casi apostar, al Sevilla le hab¨ªa tocado el gordo. Ten¨ªa el bot¨ªn en el bolsillo y nadie se lo quit¨®, menos todav¨ªa cuando Anto?ito se estren¨® como goleador en una jugada en la que aprovech¨® su rapidez. Luego fue a celebrar el tanto con los 1.000 hinchas del Sevilla que viajaron a Albacete y las vallas casi se vienen abajo.

El c¨²mulo de desgracias aument¨® para el Alba. Se lesion¨® Mark Gonz¨¢lez y luego Rub¨¦n, que acab¨® el partido con el brazo en cabestrillo porque su equipo hab¨ªa hecho ya los tres cambios. David S¨¢nchez sustituy¨® a Jaime al volante del juego y el equipo gir¨® en otra direcci¨®n. Lleg¨® con m¨¢s frencuencia a la meta de Esteban, s¨ª. Exigi¨® del portero m¨¢s de una parada meritoria, tambi¨¦n. Pero el Sevilla mantuvo su porter¨ªa inmaculada. Con lo poco que hab¨ªa hecho el conjunto de Caparr¨®s y a¨²n le sobraba ventaja.