Chirac propone un impuesto global sobre las transacciones financieras para combatir el sida
El Foro de Davos se vuelca en la lucha contra la pobreza en el mundo en desarrollo
Davos se vuelca contra la pobreza y por la solidaridad, pues el ¨¦xito de la globalizaci¨®n depende del desarrollo de los m¨¢s atrasados. Los objetivos del Milenio de la ONU -entre ellos la reducci¨®n a la mitad de los m¨¢s pobres para 2015- parecieron un brindis al sol cuando fueron aprobados en 2000. En 2005, y pasado el trauma del 11-S, se han convertido en una prioridad que ayer asumi¨® el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, quien propuso una tasa global sobre las transacciones financieras y la evasi¨®n fiscal para combatir el sida, as¨ª como la creaci¨®n de un consejo global de gobierno econ¨®mico y social.
Chirac, que no pudo estar en el Foro Econ¨®mico Mundial debido a que el mal tiempo no garantizaba su salida a tiempo para participar en el 60? aniversario de la liberaci¨®n de Auschwitz, llen¨® la sala con su discurso televisado y pas¨® a todos -incluido Porto Alegre y desde luego a Tony Blair, que inaugur¨® esta 35? edici¨®n de Davos- por la izquierda.
Por una cuesti¨®n "de moralidad y de inter¨¦s propio" de los pa¨ªses m¨¢s ricos, Chirac se erigi¨® en el gran impulsor de la ayuda al desarrollo, los objetivos del Milenio y la lucha contra esos "tsunamis silenciosos" que son el hambre, las enfermedades infecciosas u otros males globales. "Es un combate por el porvenir de la globalizaci¨®n", se?al¨®.
Adem¨¢s de defender la "alianza del mercado y de la solidaridad" y de alabar el sistema de filantrop¨ªa personal americano, Chirac desgran¨® una serie de propuestas, entre ellas una tasa para financiar la lucha contra el sida a t¨ªtulo experimental con tres nuevos recursos: 10.000 d¨®lares al a?o podr¨ªan recaudarse por medio de un impuesto, m¨¢ximo de 1/10.000, sobre las transacciones internacionales. La segunda pista fue la de pedir a los pa¨ªses con secreto bancario que compensen una parte de la evasi¨®n fiscal mundial. "?Y eso c¨®mo se articula?", comentaron varios asistentes, pues Chirac no lo explic¨®. Y tercera pista, una contribuci¨®n sobre el carburante usado por las l¨ªneas a¨¦reas, a lo que se podr¨ªa a?adir un d¨®lar por billete, con lo que se recaudar¨ªa para esta ayuda 3.000 millones anuales.
Chirac -primer presidente franc¨¦s que se dirige a este Foro- le rob¨® el escenario a Blair, que como presidente del G-8 y de la UE en el segundo semestre quiere impulsar estas mismas cuestiones. Ambos coincidieron en poner la prioridad en ?frica, y Blair a?adi¨® la lucha contra el cambio clim¨¢tico. Pero no falt¨® patetismo en las palabras de Blair al elogiar como "progresista" el discurso de investidura de Bush y lo que calific¨® de la "misi¨®n de Am¨¦rica" de ampliar las libertades en el mundo. Para el primer ministro brit¨¢nico, "lo que la gente quiere no es que Am¨¦rica ceda, sino que se comprometa", incluso con el Protocolo de Kyoto. En esta agenda situ¨®, por este orden: la vigilancia y cooperaci¨®n contra el terrorismo global; los derechos humanos y las libertades; Oriente Pr¨®ximo, el medio ambiente global, y, como quinto punto, ?frica, apoyando la idea del Nuevo Instrumento Financiero que puede recaudar 50.000 millones de d¨®lares para ayuda global, la mitad para ?frica.
El Foro parece algo perdido. Tanto que este a?o se han multiplicado como ninguno antes los talleres de debate, que no son sino tormentas de ideas para buscar soluciones en un mundo m¨¢s complejo. Junto a los pocos protagonistas pol¨ªticos, las estrellas de esta edici¨®n no son tampoco ni los grandes empresarios, ni las nuevas tecnolog¨ªas. Incluso el debate del unilateralismo de la primera Administraci¨®n Bush frente al multilateralismo europeo ha quedado, de momento, desplazado por un enfoque multidimensional en el que participan ONG y estrellas de la gran pantalla como Richard Gere y Sharon Stone.
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