Los islamistas chi¨ªes se han unido bajo la figura del ayatol¨¢ Sistani
Los principales partidos de esa tendencia se agrupan en la Alianza Unida Iraqu¨ª, la lista 169, apodada por sus rivales pol¨ªticos lista chi¨ª. En ella se presentan los l¨ªderes de la Asamblea Suprema para la Revoluci¨®n Isl¨¢mica en Irak, Abdul Aziz al Hakim; de Al Dawa, Ibrahim Y¨¢fari (actual vicepresidente), e incluso un chi¨ª laico como Ahmad Chalabi. Tambi¨¦n concurre con ellos el prestigioso cient¨ªfico Husein al Shahrastani.
Adem¨¢s, han buscado un alcance m¨¢s amplio incluyendo a peque?os partidos de otras comunidades, incluido uno sun¨ª. Sin embargo, la imagen del gran ayatol¨¢ Al¨ª Sistan¨ª en sus carteles es toda una declaraci¨®n de intenciones. Aunque algunos allegados al reverenciado l¨ªder religioso han negado que respalde una candidatura particular, en la calle la percepci¨®n es diferente.
Ninguna de las grandes figuras de esta lista ha expresado p¨²blicamente ambici¨®n de ser primer ministro, pero todos estar¨ªan encantados de serlo. Todos salvo tal vez Al Hakim, que ya durante su participaci¨®n en el Consejo de Gobierno cedi¨® pr¨¢cticamente la representaci¨®n a Adel Abdel Mahdi, el actual ministro de Econom¨ªa y un hombre con muy buenas relaciones con todos los grupos iraqu¨ªes. Sin duda, EE UU le preferir¨ªa a Chalabi, su antiguo favorito, ca¨ªdo en desgracia el pasado verano despu¨¦s de que se revelara que espiaba para Ir¨¢n.
Diplom¨¢ticos y observadores de la escena iraqu¨ª les dan como favoritos. El terrorista Abu Musab al Zarqaui, tambi¨¦n por lo que se deduce de sus ¨²ltimos mensajes. El soci¨®logo Saad Abdelrazak incluso va m¨¢s lejos y asegura contar con encuestas que les dan entre el 35% y el 40% de los escrutinios (entre 95 y 108 esca?os). Resulta arriesgado avanzar resultados en un pa¨ªs sin experiencia democr¨¢tica y sumido en el caos, pero la fuerza de la Alianza Unida Iraqu¨ª va a depender de que se acerque o supere esa barrera del 40%. Por debajo de ella, una alianza de otros grupos (laicos y kurdos, por ejemplo) contendr¨ªa sus aspiraciones islamistas.
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