Camper pisa su nueva Casa

Camper, la empresa mallorquina que llev¨® el color a los zapatos a base de dise?o e innovaci¨®n, parece decidida a hacer lo mismo en otros sectores. Ya abri¨® hace meses un nuevo concepto de restaurante en Barcelona, y ahora acaba de inaugurar en la misma ciudad un sorprendente hotel en el que ha invertido entre 10 y 11 millones de euros. Ampl¨ªa as¨ª su diversificaci¨®n.

Camper, que ha supeditado el crecimiento al cuidado del concepto de su producto, prev¨¦ facturar este a?o 200 millones de euros

La diversificaci¨®n es la tercera fase en el desarrollo del negocio tras la implantaci¨®n de la marca en Espa?a y su internacionalizaci¨®n

"Camina, no corras". Ese sensato consejo aparece en uno de los escasos p¨®steres que Camper ha colgado de las coloridas paredes de su nuevo hotel. Y eso es justo lo que ha hecho esta firma mallorquina: ir paso a paso por un camino alternativo que abri¨® hace ya casi treinta a?os y del que ahora arranca un nuevo sendero. La empresa de Lorenzo Flux¨¢ acaba de inaugurar en Barcelona un hotel que recoge toda la identidad de la marca y con el que pretende dar continuidad a un grupo familiar que cuenta ya con la cuarta generaci¨®n. El hotel, llamado Casa Camper, dar¨¢ la alternativa en los negocios a los dos hijos de Flux¨¢, Lorenzo y Miguel, y probar¨¢ si el "concepto Camper", como dice su presidente -"el confort unido a la imaginaci¨®n"-, va m¨¢s all¨¢ de los zapatos.

De momento en su dise?o s¨ª lo hace. Y desde el primer momento. Ni la concepci¨®n del hotel ni su gesti¨®n es al uso. Y eso queda claro desde que se entra en una especie de zagu¨¢n donde cuelgan del techo bicicletas para su alquiler, hasta la recepci¨®n, ubicada en un lugar com¨²n, s¨®lo permitido para clientes, dominado por el rojo, el negro y el blanco, donde comparte espacio con un self-service que permite tomar sofisticados canap¨¦s, modernas ensaladas, caf¨¦s o refrescos a cuaquier hora del d¨ªa o de la noche. El personal, muy joven, su indumentaria y la decoraci¨®n transmiten todo el tiempo que este hotel es diferente.

Y ¨¦sa es la preocupaci¨®n de Flux¨¢. Que cumpla con las exigencias de la marca Camper. "Un concepto", dice, "que significa dise?o pero con sentido com¨²n. Crear algo innovador, pero que sea ¨²til y pr¨¢ctico y tenga un toque de humor para rebajar ese punto de sofisticaci¨®n y lejan¨ªa que a veces tiene el dise?o". Ese concepto le ha llevado a vender en el mundo m¨¢s de 3,5 millones de pares de zapatos, a dar trabajo directamente a casi 800 personas e indirectamente a m¨¢s de 3.000, y a facturar este a?o, si se cumplen las expectativas, 200 millones de euros.

Un nuevo paso

El hotel significa para Camper el tercer paso en el desarrollo del negocio. El primero, dice Flux¨¢, fue la creaci¨®n del proyecto. Un proyecto rompedor en una Espa?a, la de los setenta, "en blanco y negro". El segundo lo dio a partir de 1992 con su internacionalizaci¨®n, y hoy factura el 70% en el mercado exterior, y el tercero es la diversificaci¨®n, que arranc¨® hace un a?o con el restaurante Food Ball y contin¨²a con Casa Camper.

La empresa, admite Flux¨¢, no ha tenido un crecimiento espectacular, "seguramente menor al que se pod¨ªa", ya que se ha supeditado al cuidado del producto y, m¨¢s que a ello, del concepto de producto. Hasta el punto de que, en su momento, Camper rompi¨® los esquemas de las empresas del calzado. "Cuando empezamos", afirma el presidente, "el dise?o del producto y su comercializaci¨®n giraban alrededor del sistema de producci¨®n, y nosotros hicimos todo lo contrario. El centro fue el producto y en torno a ¨¦l gir¨® el sistema de producci¨®n".

Camper nunca ha fabricado directamente, cuenta para ello con una red de talleres que trabajan en su mayor parte en exclusiva para la firma, "algunos desde hace 30 a?os". El 60% de la producci¨®n se realiza en Espa?a, y el resto, en Marruecos y Hungr¨ªa. Son esos talleres los que ejecutan los dise?os Camper, salidos de su f¨¢brica de ideas de Son Forteza, el centro de I+D+i de Camper, que se lleva entre el 5% y el 8% de la facturaci¨®n para su financiaci¨®n. Y de all¨ª ha salido tambi¨¦n la idea del restaurante y del hotel, que se ha impuesto sobre todas las proposiciones que Camper ha tenido para dise?ar y comercializar desde perfumes a gafas, relojes y otro tipo de complementos. "Pero no aportaban nada a nuestro concepto", dice Flux¨¢. Un concepto, por cierto, muy dif¨ªcil de manejar, porque Camper no quiere ser ni elitista ni popular, ni muy joven ni muy maduro, ni caro ni barato, y apuesta por un ambiguo lujo austero, muy evidente en el hotel.

Con esos par¨¢metros, Flux¨¢ cree que entrar en una carrera por el crecimiento entra?a un riesgo considerable para la marca, que podr¨ªa perder parte de su identidad. Con todo, Camper, que ya cuenta con 130 tiendas propias, plantea abrir este a?o entre 15 y 20 m¨¢s para mostrar los casi 500 nuevos modelos que cada a?o saca a la luz con sus dos colecciones, mientras prueba la diversificaci¨®n.

En definitiva, sigue su consejo. No para de caminar, pero no corre.