Y el ni?o Jes¨²s naci¨® en abril hace 2000 a?os (y II)

"CENE CON UN POBRE" es el eslogan de la campa?a navide?a "de maravillosa hermandad, de magn¨ªfica caridad, de hondo significado" promovida por unas caritativas damas en una ciudad espa?ola de provincias. Para Pl¨¢cido Alonso (Cassen), de transportes Alonso, contratado para la operaci¨®n, todo son problemas: en Nochebuena le vence la primera letra de su motocarro. Un retrato corrosivo de una Espa?a gris y triste que algunos parecen empe?ados en resucitar. Una visi¨®n mordaz de la hipocres¨ªa reinante -curiosa esta religi¨®n que te permite ser un cr¨¢pula todo el a?o y redimirte con una buena acci¨®n por Navidad-. Es, como habr¨¢n adivinado, Pl¨¢cido (1961), la obra maestra de Luis G. Berlanga.

La ant¨ªtesis de los empalagosos filmes con el esp¨ªritu navide?o de tel¨®n de fondo. Se han acabado las fiestas y el pobre ha vuelto a lo suyo. En el cartel del filme, un chiste gr¨¢fico de Summers, la socorrida estrella de Navidad aparece ejerciendo de humilde punto de la letra i. Y como remate de los adornos del motocarro es el testigo mudo de las surrealistas peripecias de Pl¨¢cido. Coronando el ¨¢rbol navide?o, se?alando el establo en el bel¨¦n o iluminando cualquier calle comercial, la estrella de Navidad no falta nunca como elemento ornamental navide?o.

El Evangelio explica que una estrella gui¨® a los Reyes Magos hasta donde acababa de nacer el Ni?o Jes¨²s. De eso hace unos 2.000 a?os. Si realmente existi¨®, ?qu¨¦ pudo ser? M¨¢s de 1.000 a?os de debate no han zanjado la cuesti¨®n. Y eso que se han interesado famosos astr¨®nomos como Kepler (siglo XVII) mientras que pintores de la talla de Giotto (siglo XIV) plasmaban el evento en sus lienzos.

Mark Kidger, del Instituto de Astrof¨ªsica de Canarias, se ha ocupado ampliamente del tema en su libro Star of Bethlehem (1999). Para investigar un acontecimiento astron¨®mico es preciso conocer en qu¨¦ lugar y cu¨¢ndo ocurri¨®. Y aqu¨ª es donde empiezan los problemas. Aunque el sitio est¨¢ claro (alrededores de Bel¨¦n), la fecha del nacimiento de Jes¨²s, establecida oficialmente en el a?o 525 por el escritor cristiano Dionisio el Exiguo, es objeto de controversia.

Los c¨¢lculos modernos han determinado que la Navidad caer¨ªa, probablemente, hacia el a?o 5 a.C. (antes de Cristo, o sea, que ¨¦ste naci¨® unos a?os antes del a?o 1 que se toma como referencia, Dionisio se olvid¨® del a?o 0). El d¨ªa concreto no ser¨ªa el 25 de diciembre, sino uno de la segunda quincena de abril (no hay que ser un lince para caer en la cuenta de que si los pastores estaban en el campo, como explica el Evangelio, no deb¨ªan de ser fechas invernales). O, sea que nada de 25 de diciembre del a?o 1, sino abril del a?o 5 a.C. (o 6 a.C. a lo sumo).

Fijada la fecha, ?qu¨¦ acontecimiento astron¨®mico fue lo suficientemente espectacular como para llamar la atenci¨®n de los Magos de Oriente? Son hip¨®tesis descartadas las siguientes. Planetas brillantes como Venus (demasiado bien conocido para sorprender); conjunciones planetarias (Venus eclips¨® parcialmente el disco de J¨²piter, pero en el a?o 2 a.C.); cometas peri¨®dicos como el Halley (considerado durante tiempo como un s¨®lido candidato a estrella navide?a, aunque los c¨¢lculos modernos sit¨²an su paso en a?o 12 a.C.); lluvias de estrellas o b¨®lidos (fen¨®menos espectaculares, pero de corta duraci¨®n); explosi¨®n de una supernova (suceso repentino y muy brillante pero que deja un residuo o remanente en la regi¨®n del cielo donde acontece que no ha sido hallado).

?Qu¨¦ fue, entonces, la Estrella de Navidad? Las hip¨®tesis que m¨¢s fiabilidad ofrecen, aun sin ser concluyentes, son una conjunci¨®n planetaria triple, un cometa o una ocultaci¨®n lunar. Marte, J¨²piter y Saturno coincidieron en la constelaci¨®n de Piscis hacia febrero del a?o 6 a.C. A pesar de ser algo bastante com¨²n, para Kidger ser¨ªa la explicaci¨®n m¨¢s veros¨ªmil por venir seguida de la aparici¨®n bien de un cometa sin cola (como el reciente cometa Machholz) o de una nova (estrella que aumenta su brillo s¨²bitamente), detectado por astr¨®nomos chinos en abril del a?o 5 a.C.

Otras hip¨®tesis, como la del astr¨®nomo norteamericano Michael Molnar, apuntan hacia una ocultaci¨®n de J¨²piter por la Luna en Aries, de simbolismo relevante como Piscis. Piensen en ello cuando recojan a su pobre respectivo para la pr¨®xima cena de Navidad.