Casas para ahorrar la plata

La oferta es tentadora: una casa de 130 metros cuadrados, a orillas del mar y en una zona exclusiva de Santa Marta, en pleno coraz¨®n del Caribe colombiano, por 40.967 euros. ?sta es s¨®lo una de las propuestas que ayer daban a conocer las 80 inmobiliarias presentes en la Primera Feria del Migrante Colombiano, que se celebra en el Recinto Ferial de la Casa de Campo hasta el martes.

La iniciativa, nacida en la embajada de aquel pa¨ªs, busca propiciar entre sus ciudadanos la compra de viviendas en Colombia. Tan s¨®lo en 2004 los colombianos que viven en el exterior enviaron m¨¢s de 750 millones de euros a ese pa¨ªs. Las remesas se han convertido ya en un porcentaje significativo del PIB de Colombia.

Una casa que vale 300.000 euros en Espa?a, cuesta 60.000 en Bogot¨¢

Bancos y cajas, y hasta Defensa, interesados en captar a los visitantes

Pero la mayor parte de ese dinero, seg¨²n explic¨® la embajadora Noem¨ª San¨ªn, se convierte "en plata de bolsillo", un dinero que se evapora a fin de mes y que en la mayor¨ªa de los casos s¨®lo sirve para paliar las dificultades econ¨®micas de las familias que se quedan al otro lado del Atl¨¢ntico.

Por eso, esta feria busca "teledirigir la plata", seg¨²n explicaba ayer un miembro del comit¨¦ organizador. Que los colombianos inviertan en su pa¨ªs y que apuesten por la construcci¨®n, uno de los sectores pilares de la econom¨ªa. Este segmento ha despertado de su letargo desde hace unos cuatro a?os y las promociones de vivienda abundan en las grandes ciudades como Bogot¨¢, Medell¨ªn, Barranquilla y la zona del eje cafetero.

Durante las primeras cuatro horas de la feria acudieron unos 800 visitantes. El entusiasmo era notorio entre los colombianos que se acercaron a la Casa de Campo. "Yo, por el momento, no puedo comprar, pero esta idea me parece espectacular. M¨¢s adelante mi apuesta ser¨¢ por una casa en Pereira o Cali", dec¨ªa Adiela Cardona Castillo, del Valle del Cauca.

La casa de los sue?os de Karen, una joven bogotana, cuesta en Espa?a cerca de 300.000 euros. La misma casa le costar¨ªa en Bogot¨¢ 60.000. "Yo tengo a mi familia all¨ª y me gustar¨ªa tener una vivienda para cuando quiera ir. Adem¨¢s, no me termino de acostumbrar a este pa¨ªs", asegura.

Luis Enrique, de Bogot¨¢, tambi¨¦n deambulaba de un lado para otro en busca de informaci¨®n. "Es que la tierra y la familia tiran mucho. Yo no creo que vaya a estar aqu¨ª eternamente. Estoy seguro de que voy a volver a Colombia, porque aqu¨ª, para m¨ª, todo es muy dif¨ªcil, incluido el trato. Adem¨¢s, ya tengo 42 a?os y en un futuro me gustar¨ªa irme a envejecer a mi pa¨ªs", afirm¨®.

Camuflado entre tanto colombiano, un visitante espa?ol no daba cr¨¦dito a los precios de las viviendas en Colombia: "Llevo un rato paseando por aqu¨ª y me parece que estoy en otro mundo. Son precios incre¨ªbles. La verdad es que me parece que se tiene que vivir muy bien ah¨ª. En el fondo los espa?oles estamos equivocados con Colombia, pero es porque s¨®lo nos venden lo malo. Yo tengo mucha curiosidad por ir", dijo.

La oferta inmobiliaria de la feria incluye pisos de 70 metros cuadrados en una urbanizaci¨®n cerrada con aparcamiento, tres habitaciones y dos ba?os a un precio de 16.000 euros. Hay para todos los gustos y en la mayor¨ªa de ciudades importantes. Lo que en Espa?a se conoce como un adosado, en Colombia se puede conseguir por 13.000 euros. Y pisos de lujo en Cartagena de Indias s¨®lo cuestan entre 30.000 y 40.000 euros. Algunas empresas ofrecen asesor¨ªa para solicitar pr¨¦stamos con bancos y cajas colombianas, pero tambi¨¦n hay quien tramita cr¨¦ditos personales con entidades espa?olas. "Yo creo que es mejor prestar dinero aqu¨ª, pues los intereses en Colombia son muy altos", dec¨ªa un visitante.

Pero la feria no inclu¨ªa s¨®lo el aspecto inmobiliario. El consulado instal¨® una oficina para atender a las personas que buscaban cita para tramitar los documentos de antecedentes penales, requisito fundamental para la regularizaci¨®n que se inicia el pr¨®ximo martes.

El Ministerio de Defensa tambi¨¦n abri¨® un punto de informaci¨®n para los interesados en pertenecer a las Fuerzas Armadas. No eran los ¨²nicos interesados en captar a los visitantes. Bancos y cajas espa?olas, inmersas en la lucha por acaparar el env¨ªo de remesas, tambi¨¦n estaban presentes. Lo mismo que las compa?¨ªas aseguradoras, que no s¨®lo ofrecen seguros m¨¦dicos y dentales, sino tambi¨¦n de repatriaci¨®n en caso de muerte.

Algunas empresas colombianas iban m¨¢s all¨¢: seguros m¨¦dicos para operaciones est¨¦ticas en Colombia, compra de electrodom¨¦sticos desde Espa?a, viajes a zonas poco conocidas y distribuci¨®n de patac¨®n (pl¨¢tano verde frito), papita criolla (una variedad de patata) y ajiaco (una sopa) congelados.