El tripartito acepta la propuesta del PP de celebrar un debate monogr¨¢fico en el Parlament

Los tres grupos parlamentarios que apoyan al Gobierno catal¨¢n aceptaron ayer celebrar un debate monogr¨¢fico en el Parlament para investigar lo sucedido en el Carmel. La propuesta, que lanz¨® el l¨ªder del Partido Popular catal¨¢n, Josep Piqu¨¦, fue aplaudida por el Ejecutivo de Pasqual Maragall porque aleja en el tiempo la eventual creaci¨®n de una comisi¨®n de investigaci¨®n parlamentaria y le concede un mayor margen de maniobra para solucionar la crisis sobre el terreno. Unas palabras ayer del ministro Jordi Sevilla, confirmando una comisi¨®n investigadora, disgustaron a Maragall.

El Gobierno catal¨¢n no se esperaba ayer que el bal¨®n de ox¨ªgeno en esta crisis le llegara desde la oposici¨®n, en concreto del Partido Popular. La propuesta de Josep Piqu¨¦ de celebrar un pleno espec¨ªfico frena, de momento, un frente com¨²n de populares y Converg¨¨ncia i Uni¨® para reclamar el cese del consejero de Pol¨ªtica Territorial y Obras P¨²blicas, el socialista Joaquim Nadal, y crear una inc¨®moda comisi¨®n de investigaci¨®n por la v¨ªa de urgencia.

La celebraci¨®n del pleno extraordinario tambi¨¦n permite al Gobierno tripartito y al PP evidenciar a¨²n m¨¢s el aislamiento de Converg¨¨ncia i Uni¨® en la C¨¢mara, pues ninguno de los grupos apoya sus demandas. Incluso, en el hipot¨¦tico caso de que se gestara esta comisi¨®n de investigaci¨®n, los nacionalistas tampoco tienen ante s¨ª un camino f¨¢cil, puesto que el PP exigir¨¢ que se investigue "de principio a fin qu¨¦ ocurri¨® en el Carmel", lo que tambi¨¦n implicar¨ªa fiscalizar c¨®mo se gest¨® el proyecto de la obra, que coincidi¨® con la ¨²ltima etapa de CiU al frente del Gobierno catal¨¢n.

Los partidos del tripartito y el propio Ejecutivo tienen claro que la ciudadan¨ªa necesita conocer todo lo que sucedi¨® realmente en el Carmel. Pero apuestan por esclarecer los hechos, salvo circunstancias imprevistas, en un pleno monogr¨¢fico en el Parlament, tal como propuso el PP.

La iniciativa de Piqu¨¦ le fue como anillo al dedo al Gobierno de Maragall. Por una parte, permite al consejero de Obras P¨²blicas cumplir su compromiso de comparecen en la C¨¢mara antes de tres semanas una vez haya compilado toda la documentaci¨®n. Por otra, el Gobierno de Pasqual Maragall gana un poco m¨¢s de tiempo para resolver la crisis abierta sobre el terreno.

Una vez se celebre este pleno -previsiblemente antes de tres semanas-, los tres grupos de izquierda analizar¨¢n si las investigaciones deben continuar en una comisi¨®n, que CiU viene reclamando insistentemente. Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya Verds no se han cansado de repetir en los ¨²ltimos d¨ªas que el Gobierno ha afrontado bien la crisis, pero que se necesita llegar al fondo de la cuesti¨®n.

Marcha atr¨¢s del ministro

Pasqual Maragall quiso contentar ayer a todos los grupos y fue contundente al proclamar en el hemiciclo que habr¨¢ "transparecencia, luz y taqu¨ªgrafos, incluso a nivel parlamentario". No obstante, el presidente solicit¨® tres semanas para acabar de reunir todos los expedientes, ya que los primeros estudios de este proyecto datan de 1999, cuatro a?os antes de la llegada del tripartito al Gobierno catal¨¢n.

La necesidad o no de crear una comisi¨®n de investigaci¨®n, sin embargo, abri¨® ayer un nuevo conflicto entre el Ejecutivo de Pasqual Maragall y el Gobierno central. El ministro de Administraciones P¨²blicas, Jordi Sevilla, que el pasado martes se pase¨® por el Carmel con Maragall, defendi¨®, en declaraciones a Antena 3 Televisi¨®n, la necesidad de crear una comisi¨®n parlamentaria para dilucidar lo sucedido tanto desde el punto de vista t¨¦cnico como pol¨ªtico. Sevilla, sin embargo, rectific¨® horas despu¨¦s sus declaraciones y afirm¨® que con sus palabras no hab¨ªa querido referirse a la necesidad de crear una comisi¨®n parlamentaria, sino a terminar las investigaciones ya anunciadas por el consejero Nadal.

Las primeras declaraciones del ministro, sin embargo, no gustaron en absoluto al presidente catal¨¢n, que, como el conjunto del Gobierno tripartito quiere manejar esta crisis sin interferencias ni injerencias de otras instancias pol¨ªticas. Sin que nadie se lo preguntara expl¨ªcitamente, Maragall cerr¨® su intervenci¨®n en la sesi¨®n de control del Ejecutivo con un seco: "El ministro tiene menos informaci¨®n de la que tenemos nosotros". La rectificaci¨®n posterior de Sevillla ayud¨® a calmar los ¨¢nimos.