El juez enmarca los ataques de Madrid, Riad y Casablanca en la "estrategia global" de Al Qaeda

El juez Juan del Olmo, que dirige desde hace 11 meses la investigaci¨®n de los atentados que costaron la vida a 191 personas en Madrid, detalla en su ¨²ltimo escrito, donde decreta la prisi¨®n para dos supuestos colaboradores de los terroristas del 11-M, la g¨¦nesis de la matanza de los trenes. Del Olmo afirma que el atentado es obra de terroristas de la ¨®rbita de Al Qaeda y afirma que esta matanza es pr¨¢cticamente id¨¦ntica a las de Riad (Arabia Saud¨ª) y Casablanca (Marruecos), aunque en el 11-M fue obra de grupos semi aut¨®ctonos, "unidos por su odio a Espa?a y a Occidente" y jaleados por la postura espa?ola sobre Irak.

?stos son los aspectos principales del auto del juez Del Olmo:

"El an¨¢lisis de los atentados del 16 de mayo de 2003 en Casablanca (Marruecos), en combinaci¨®n con otros ejecutados d¨ªas antes, el 12 de mayo en Riad (Arabia Saud¨ª), permite esclarecer un conjunto de caracter¨ªsticas coincidentes en operaciones inspiradas por Al Qaeda: uso de artefactos explosivos, c¨¦lulas islamistas integradas por nacionales del pa¨ªs con conexiones en el exterior, ataques simult¨¢neos y coordinados, acciones suicidas y objetivos fundamentales.

En los atentados de Madrid se ha producido una adaptaci¨®n a la realidad espa?ola, aun siendo la t¨¢ctica esencialmente la misma: empleo de artefactos explosivos; acci¨®n simult¨¢nea y coordinada; utilizaci¨®n b¨¢sica de elementos personales "aut¨®ctonos", en este caso, no espa?oles de origen, sino personas "integradas" en Espa?a (...); conexiones con el extranjero (existencia de elementos personales que estaban integrados en una red m¨¢s compleja y amplia, radicada en distintos pa¨ªses y con una relevante movilidad); utilizaci¨®n de redimidos del mundo marginal de la delincuencia (aprovechamiento de la existencia de un factor de desarraigo y de no asunci¨®n de valores de la sociedad en la que se est¨¢ inmerso por algunas personas, cuya captaci¨®n, adoctrinamiento, fijaci¨®n de un sentido de vida y transferencia de un peculiar sentimiento religioso, determina la adscripci¨®n incondicional al movimiento que les transforma); y uso de los medios que les proporciona a las antedichas personas sus contactos y relaciones previas con el mundo delictivo (...). Es manifiesto que el objetivo de la acci¨®n terrorista era occidental (se act¨²a en territorio espa?ol) y que los atentados son contra la poblaci¨®n espa?ola de modo indiscriminado (...).

- El factor suicida. Lo que no concurre en los atentados del 11-M es el factor suicida (...). No obstante, ese elemento hab¨ªa sido interiorizado por una parte relevante de la c¨¦lula islamista (lo que determin¨® el suicidio el 3 de abril en Legan¨¦s...). Todo ello implica una inspiraci¨®n en la estrategia de Al Qaeda, que atiende a la mayor repercusi¨®n psicol¨®gica y social en la poblaci¨®n que sufre la ejecuci¨®n de atentados simult¨¢neos, coordinados, indiscriminados y letales (...).

- Influencia doctrinal de Al Qaeda.La investigaci¨®n del atentado ha puesto de relieve, en todo caso, la existencia de un grupo de personas, marroqu¨ªes en su mayor¨ªa, de ideolog¨ªa integrista religiosa isl¨¢mica, identificada como "salafista yihadista", parte de los cuales se reun¨ªan en establecimientos del barrio madrile?o de Lavapi¨¦s, como eran la peluquer¨ªa Abdou, propiedad de A. Berrak Sousane (detenido e implicado en los atentados), el restaurante Alhambra o el locutorio Jawal Telecom, propiedad de Jamal Zougam (tambi¨¦n detenido por haber sido reconocido, testificalmente, como uno de los autores materiales de los atentados), todos ellos en la calle de Tribulete del citado barrio, as¨ª como por su asistencia a la desaparecida mezquita Al Huda, del mismo barrio.

Los grupos hasta ahora conocidos en el 11-M presentan dos caracter¨ªsticas generales comunes:

a) El deseo de atentar contra todo lo que representa un obst¨¢culo en su visi¨®n internacional del islamismo global (Yihad Mundial), es decir, el mundo debe separar lo maligno, identificado con la cultura occidental, del verdadero islam, golpeando a todo aquello que se interponga en su camino. ?ste es el concepto de base de Al Qaeda y de todos los grupos y organizaciones ligados a ella.

b) Doctrina radical basada en el salafismo combatiente (...), legitimando mediante actos de justificaci¨®n todos aquellos actos impuros que deban llevarse a cabo para lograr su objetivo. ?sta es la base en la que se sustentan los movimientos terroristas salafistas del norte de ?frica, inspirados en el movimiento Takfir Wal Hijra, en la doctrina salafista yihadista y cuyo m¨¢ximo exponente es el Grupo Isl¨¢mico Combatiente Marroqu¨ª (GICM).

- Grupos participantes en el 11-M. En la investigaci¨®n aparecen implicados tres grupos de individuos: el liderado por Jamal Zougam, denominado de Lavapi¨¦s, el de Jamal Ahmidan, formado en Villaverde, el identificado en torno a Serhane El Tunecino, formado a su vez por dos grupos, el constituido por Mustaf¨¢ Maymouni y el liderado por Mohamed El Egipcio, y finalmente, algunos individuos vinculados con la c¨¦lula de Al Qaeda de Abu Dahdah desarticulada en noviembre de 2001. La mayor¨ªa de sus miembros son marroqu¨ªes.

El ¨²nico nexo de uni¨®n de los grupos mencionados es Sarhane El Tunecino, cu?ado de Maymouni y miembro de su grupo, con relaciones con miembros de la c¨¦lula de Abu Dahdah, amigo de Jamal Ahmidan, contacto de Mohamed El Egipcio (...). Sarhane busca medios y gente para (...) atentar en Espa?a como reacci¨®n a la posici¨®n al conflicto de Irak. Se junta con el grupo de Jamal Ahmidan, consigue los explosivos y re¨²ne un grupo con gente de varios de los grupos participantes.

A la c¨¦lula se unen algunos elementos que hab¨ªan quedado de la desarticulaci¨®n de otras c¨¦lulas en Espa?a (Allekema Lamari) unidos por su odio a Espa?a y al mundo occidental, quienes contactaron gracias a sus relaciones en grupos semejantes de la red norteafricana.

Probablemente sea a trav¨¦s de estos grupos (GICM) c¨®mo se planifican los atentados y se decide c¨®mo hacerlos, aunque este punto est¨¢ a¨²n falto de mayor concreci¨®n. Posiblemente tuvieran participaci¨®n sujetos como Amer el Azizi, experimentados y con preparaci¨®n t¨¦cnica (...) Dos personas hacen alarde de conocer los atentados y se atribuyen su comisi¨®n. Mohamed el Egipcio, que, evidentemente, lo conoc¨ªa y que seguramente fue apartado del grupo en el momento definitivo, y Hassan el Haski, un l¨ªder del GICM, envuelto en una sucesi¨®n a la jefatura del grupo marroqu¨ª (...). El dato de reivindicaci¨®n de los atentados vuelve a situarnos en la esfera del GICM. Existen indicios, a¨²n bajo investigaci¨®n, que indican que miembros del GICM en B¨¦lgica pudieran estar implicados".