Inmigraci¨®n arrojadiza

Ninguna de las regularizaciones extraordinarias de inmigrantes llevadas a cabo por los anteriores Gobiernos sufri¨® una acometida tan desaforada como la que est¨¢ recibiendo por parte del PP la iniciada el d¨ªa 7. Entonces, a lo m¨¢s que se lleg¨® fue a ridiculizar iniciativas tan disparatadas como el pretendido viaje de ida y vuelta gratis a sus pa¨ªs de 25.000 inmigrantes ecuatorianos para retornar a Espa?a con los papeles en regla. Se part¨ªa del supuesto de que la regularizaci¨®n extraordinaria es la ¨²nica arma que a veces queda a los gobiernos para encauzar trances humana y socialmente insostenibles surgidos bajo la presi¨®n de la inmigraci¨®n.

La situaci¨®n actual es b¨¢sicamente una herencia del Gobierno anterior. La llegada de m¨¢s de un mill¨®n de inmigrantes irregulares en los ¨²ltimos cuatro a?os se produjo estando vigente la ley de Extranjer¨ªa de 2001, que sigue siendo una de las m¨¢s rigurosas de Europa y con la que se pretendi¨® acabar con el llamado efecto llamada. La realidad sigui¨® otros derroteros -hoy la poblaci¨®n extranjera, comunitaria incluida, representa el 8% de la espa?ola -y ello deber¨ªa hacer reflexionar al PP para no utilizar la inmigraci¨®n como arma arrojadiza y soporte de mensajes negativos o confusos. Mientras Ruiz-Gallard¨®n reconoce que Madrid se encuentra a la cabeza del desarrollo econ¨®mico gracias a los inmigrantes, algunos de sus correligionarios insisten en la idea de que son una ruina, resaltando s¨®lo lo que gastan y no lo que ingresan en las arcas p¨²blicas con su trabajo.

La regularizaci¨®n actual, a diferencia de las anteriores, busca expresamente hacer aflorar la econom¨ªa sustentada en el trabajo clandestino del inmigrante irregular. Ello explica que tenga el apoyo del mundo empresarial, del sindical y de la propia Iglesia Cat¨®lica. Incluso la Comisi¨®n Europea ha avalado el proceso, aunque propone un sistema de alerta e informaci¨®n mutua en el seno de la UE antes de que sus Estados miembros adopten iniciativas de este tipo. Este paso hacia una deseable pol¨ªtica com¨²n sobre inmigraci¨®n deber¨ªa ser complementado con un deseable consenso interno entre el PSOE y el PP. Ser¨ªa lamentable que la regularizaci¨®n en marcha no consiguiera sus objetivos y se mantuviera una situaci¨®n que las propios empresarios no desean y que este Gobierno, como el anterior, tiene la obligaci¨®n de perseguir.