Conmoci¨®n en Berl¨ªn tras el asesinato de una joven turca 'por honor'

Algunos alumnos de la escuela Tomas Moro, en el barrio berlin¨¦s de Neuk?lln no se recatan en expresar su opini¨®n: "La muy puta andaba por ah¨ª comport¨¢ndose como una alemana". Tan dr¨¢sticas opiniones se refieren a Hatun Surucu, la joven turca de 23 a?os asesinada a la puerta de su casa en Berl¨ªn el pasado 7 de febrero. La polic¨ªa ha detenido a tres hermanos de la joven, de 25, 24 y 18 a?os, como sospechosos de haber cometido de forma conjunta el asesinato para lavar lo que consideran honor familiar mancillado.

La direcci¨®n de la escuela de Berl¨ªn, a la que asisten 470 alumnos, un 80% de ellos emigrantes de 44 pa¨ªses, ha dirigido una carta a los alumnos, padres y profesores en la que amenaza con tomar medidas contra los alumnos intolerantes.

La historia de Hatun Surucu convierte en un cuento de ni?os la pel¨ªcula Contra la pared premiada en la Berlinale del a?o pasado y que trata los problemas de una joven turca que desea emanciparse de su familia en Alemania. A los 16 a?os Hatun, criada en Berl¨ªn en el seno de una familia turca musulmana conservadora, tuvo que ir a Turqu¨ªa para casarse en Estambul con un primo elegido por sus padres. All¨ª no pudo soportar la presi¨®n familiar, se divorci¨® y regres¨® con su hijo a Berl¨ªn, donde inici¨® cursos de formaci¨®n de electricista y empez¨® a vivir por su cuenta. A Hatun le gustaba salir y vestir con vaqueros y camiseta. Incluso se cas¨® de nuevo con un turco, aunque parece que este matrimonio ten¨ªa por objeto facilitar a su nuevo marido la residencia en Alemania. Hatun viv¨ªa como una alemana m¨¢s de su edad, liberada y sin prejuicios. Esto le cost¨® la vida.

El pasado 7 de febrero alguien llam¨® a la puerta de su casa y consigui¨® que Hatun saliera a la calle. Junto a la parada del autob¨²s, le pegaron varios tiros desde corta distancia en la cabeza. La polic¨ªa sospech¨® de inmediato que se trataba de un drama familiar o un crimen motivado por los celos. Hatun ya hab¨ªa denunciado a uno de sus hermanos por amenazas de muerte. La reconstrucci¨®n de los hechos apunta a que uno de los hermanos llam¨® a la puerta y la atrajo a la calle. All¨ª, el de 18 a?os le dispar¨®.

El caso de Hatun no es un hecho criminal aislado. Seg¨²n la organizaci¨®n Papatya, entre 1996 y 2004 murieron asesinadas "por motivos de honor" en Alemania 46 personas. A s¨®lo 200 metros del lugar donde Hatun cay¨® abatida se encuentra la escuela Tomas Moro. Varios peri¨®dicos la visitaron para recoger opiniones de los alumnos. Las respuestas han desencadenado un esc¨¢ndalo. Varios han justificado el crimen. Las explicaciones de otros resultan aterradoras. "La mataron porque ten¨ªa amigos alemanes", declara una chica. "Rompi¨® las reglas", afirma un chico. Una profesora plante¨® en una clase como tema de discusi¨®n la muerte de Hatun y tres alumnos pronunciaron frases como "Ella tuvo la culpa" o "La muy puta andaba por ah¨ª como una alemana".