Ola naranja en Asia central

La cruzada contra la tiran¨ªa del presidente norteamericano George W. Bush y el cambio democr¨¢tico en Georgia (revoluci¨®n de las rosas en 2003) y Ucrania (revoluci¨®n naranja en 2004) planearon ayer sobre las elecciones parlamentarias que se celebraban en Kirguizist¨¢n y Tayikist¨¢n, dos Estados centroasi¨¢ticos surgidos de la desintegraci¨®n de la URSS.

Los pa¨ªses postsovi¨¦ticos se diferencian entre s¨ª, pero en muchos de ellos se ha producido un enquistamiento de los l¨ªderes en sus cargos. Algunos dirigentes de la ¨¦poca comunista volvieron al poder, como el georgiano Eduard Shevardnadze o el azerbaiyano Gueidar Al¨ªev; otros jam¨¢s lo dejaron, como el turkmeno Saparmurat Niy¨¢zov, y algunos mandatarios de nueva hornada quieren eternizarse en ¨¦l, como el bielorruso Alexandr Lukashenko, encumbrado en nombre de la lucha contra la corrupci¨®n.

Askar Ak¨¢yev, el presidente de Kirguizist¨¢n, era considerado un dem¨®crata modelo cuando fue elegido por sufragio universal en 1991. Con los a?os, su historial se fue empa?ando por esc¨¢ndalos de corrupci¨®n, nepotismo, persecuci¨®n de la oposici¨®n. En 2002, seis personas murieron cuando la polic¨ªa reprimi¨® una manifestaci¨®n.

En v¨ªsperas de las elecciones, miles de kirguizos en diferentes regiones salieron a la calle, acamparon en las carreteras y cortaron el tr¨¢fico en protesta por las decisiones judiciales que excluyeron a diferentes candidatos, en algunos casos en distritos donde se presentaban miembros de la familia de Ak¨¢yev. La Federaci¨®n Internacional de Derechos Humanos de Helsinki (FIDH) se ha manifestado preocupada por la presi¨®n sobre la prensa independiente, el soborno de electores y el obstruccionismo a los candidatos cr¨ªticos.

Las parlamentarias de Kirguizist¨¢n son consideradas como una preparaci¨®n para las presidenciales en octubre, a las que Ak¨¢yev no puede presentarse. El presidente, sin embargo, trata de dejar el poder atado. Entre los miembros de su familia que se presentaban ayer a los comicios estaban su hija, Bermet, que estudi¨® en Suiza y trabaj¨® para la ONU en Ginebra; su hijo Aidar, y dos cu?adas. Bermet es vista hoy como la candidata a sucederle, aunque tampoco se descarta una promoci¨®n de Aidar, jefe del comit¨¦ ol¨ªmpico de Kirguizist¨¢n, siguiendo un modelo parecido al que se dio en Azerbaiy¨¢n para sustituir a Gueidar Al¨ªev por su hijo Ilj¨¢n. Los comicios de ayer se celebran ya con un nuevo esquema de poder que dar¨¢ m¨¢s poder al Parlamento, que tendr¨¢ 75 esca?os, por los que compet¨ªan ayer 380 candidatos. Los principales movimientos de oposici¨®n se han agrupado en una amplia coalici¨®n y, siguiendo el ejemplo de Ucrania, ha elegido un color para asociarse, en este caso, el amarillo, como s¨ªmbolo de la luz de transici¨®n de los sem¨¢foros entre el rojo y el verde. Anoche, representantes de la oposici¨®n dijeron en Bishkek que se hab¨ªan registrado graves irregularidades en "pr¨¢cticamente todos los colegios", seg¨²n la agencia Interfax.

En los comicios de Tayikist¨¢n, por otra parte, se registraba una alta participaci¨®pn, seg¨²n los observadores de la Comunidad de Estados Independientes. El principal partido, con mayor¨ªa absoluta en el Parlamento, es el Partido Nacional Democr¨¢tico, que dirige el presidente, Emomal¨ª Rajm¨®nov, un antiguo director de una explotaci¨®n agr¨ªcola de algod¨®n que est¨¢ en su actual cargo desde 1994. "Todav¨ªa soy joven y tengo energ¨ªa y no tengo intenci¨®n de abandonar la pol¨ªtica", dijo ayer Rajm¨®nov. Un refer¨¦ndum constitucional celebrado en 2003 prolong¨® el mandato presidencial de cinco a siete a?os. Rajm¨®nov puede competir a dos nuevos turnos de siete a?os cuando acabe su mandato actual en 2006. El presidente advirti¨® ayer a los observadores internacionales de que "forzar el cambio es muy peligroso". "Hay que tener en cuenta la mentalidad de Tayikist¨¢n, sus tradiciones, su historia y su cultura", dijo. Representantes de la oposici¨®n declararon en Dushanb¨¦ que se hab¨ªan producido muchas irregularidades.