"Creo que hay que reivindicar la narrativa breve porque es el futuro"

Diego Mart¨ªnez Torr¨®n (C¨®rdoba, 1950) acaba de publicar Los dioses de la Noche (Sial Narrativa), una colecci¨®n de relatos impregnados del Romanticismo del siglo XIX. No en vano, Mart¨ªnez Torr¨®n ha centrado mucha de su faceta docente -ahora es profesor titular de Literatura Espa?ola en la Universidad de C¨®rdoba- en el estudio de los autores de la ¨¦poca rom¨¢ntica. En Los dioses de la Noche, el autor, quien tambi¨¦n ha publicado varios libros de poes¨ªa, se mete en la piel de personajes de leyenda, hist¨®ricos y literarios para transmitir c¨®mo vive cada uno el amor.

Pregunta. ?En la colecci¨®n de relatos hay algo de carga autobiogr¨¢fica?

Respuesta. Todo escritor escribe de cosas autobiogr¨¢ficas. De hecho, puede llegar un momento en el que si el escritor ha trasmitido todo lo que ha vivido en una obra se encuentre vac¨ªo y en un per¨ªodo des¨¦rtico. Todos los escritores tenemos algo autobiogr¨¢fico en las obras que realizamos pero en este libro la carga est¨¢ bastante objetivada pese a la aparente subjetividad. El Romanticismo parte de un concepto muy subjetivo de la vida, el del yo superlativo. La objetividad en el libro viene dada por la labor de investigaci¨®n y lo subjetivo lo ponen los personajes que defienden su propio derecho a la pasi¨®n, porque este libro lo que hace es defender el derecho de todo ser humano a la pasi¨®n amorosa.

"Mi mayor inspiraci¨®n la he encontrado al viajar por el Pa¨ªs Vasco y por Galicia"

P. ?Es un homenaje al amor con may¨²sculas?

R. S¨ª, creo que el amor es un sentimiento muy poderoso y aqu¨ª aparece con una enorme rebeld¨ªa. Yo no puedo olvidar nunca la influencia que tuvo para m¨ª la literatura rom¨¢ntica en mi juventud en Valencia. Eso me marc¨® y descubr¨ª la importancia y la profundidad del Romanticismo. Y para m¨ª fundamentalmente es derecho a la libertad amorosa y derecho a la libertad pol¨ªtica. Adem¨¢s, el aspecto pante¨ªsta tambi¨¦n me interesa much¨ªsimo.

P. La pr¨¢ctica totalidad de los relatos est¨¢n ambientadas en el norte de Espa?a, ?es un reflejo de la propia narrativa rom¨¢ntica?

R. El paisaje que yo llevo en el alma es el de la sierra de C¨®rdoba, que es una maravilla, pero mi mayor inspiraci¨®n la he encontrado cuando he viajado por el Pa¨ªs Vasco, por Galicia... Porque es una naturaleza m¨¢s exuberante. En este libro hay metida toda una vida, porque son relatos que se llevan escribiendo desde el a?o 1983, d¨¢ndole mil vueltas, mil repasos.

P. ?Hay que reivindicar el Romanticismo?

R. Claro, es una asignatura pendiente. Y nos ir¨ªa much¨ªsimo mejor. El Romanticismo tuvo el aspecto negativo de ser poco pr¨¢ctico, pero hoy, en una sociedad tan pragm¨¢tica como la que tenemos, lo m¨¢s l¨®gico ser¨ªa que la compatibiliz¨¢ramos con una visi¨®n idealista. Porque si no, llegamos a una situaci¨®n en la que poseemos muchos objetos pero hay un vac¨ªo enorme desde el punto de vista cultural. Pero creo que no debemos entenderlo de una manera meliflua, porque hay gente que cree que el Romanticismo es una canci¨®n pegajosa y no es verdad. Es una pulsi¨®n muy rebelde y muy juvenil. Es una manera de entender la vida de una manera muy peculiar y que se puede encontrar todav¨ªa en determinados movimientos alternativos en la cultura, en el arte e incluso en la pol¨ªtica. Del Romanticismo hay todav¨ªa mucho que aprender e investigar. Debemos aprender en nuestra ¨¦poca actual a saber c¨®mo podemos aplicar lo que se dec¨ªa en aquella ¨¦poca. Muchas de las cosas malas que est¨¢n pasando hoy ocurren por no tener una visi¨®n rom¨¢ntica de la vida.

P. ?Y hay que reivindicar tambi¨¦n el relato como g¨¦nero literario mayor?

R. S¨ª, creo que hay que reivindicar la narrativa breve porque es el futuro. Porque la gente cada vez tiene menos tiempo para leer grandes novelones como los escritos por Benito P¨¦rez Galdos. Por ejemplo, cuando yo les doy a leer a mis alumnos obras como Fortunata y Jacinta les cuesta mucho meterse en la obra porque son novelas excesivamente largas. Hoy en d¨ªa no tenemos tiempo para leer, no tenemos tiempo para los grandes an¨¢lisis l¨®gicos. El futuro est¨¢ en la novela como la defend¨ªa Azor¨ªn, que es una novela de atisbos, de sugerencias, de aspectos sint¨¦ticos, de destellos, de apuntes muy sugerentes y de lirismo.