Lo posible y lo necesario

"Si nos quedamos en la pol¨ªtica de lo posible y no vamos a lo necesario, estamos condenados". Sa'ed Erakat, negociador palestino, se refer¨ªa al proceso con Israel y a la necesidad de avanzar hacia la soluci¨®n permanente basada en dos Estados. No s¨®lo para este conflicto, hay que ir m¨¢s all¨¢ de lo posible. El dicho de Max Weber de "hay que intentar lo posible para lograr lo imposible" no basta ya frente a los retos de nuestros tiempos, incluido el terrorismo.

El genio del terrorismo global, como se ha observado en la Cumbre Internacional sobre Democracia, Terrorismo y Seguridad, se ha salido de la botella y ser¨¢ muy dif¨ªcil volver a encerrarlo.

Aunque muchos de los participantes creen que arreglar el conflicto entre Israel y Palestina es una precondici¨®n para mejorar el conjunto de la regi¨®n, pues lo contamina todo, otros no est¨¢n tan seguros. En cualquier caso, Israel a¨²n parece estar en la pol¨ªtica de lo posible -la que le permite su opini¨®n p¨²blica y las mayor¨ªas en su sistema democr¨¢tico- y a¨²n no de lo necesario. Y si puede resultar necesario impulsar la democratizaci¨®n del mundo ¨¢rabe, como se?al¨® Robert Malley, ex negociador de la Administraci¨®n de Clinton, EE UU debe antes convencer a los ¨¢rabes de que impulsa esta pol¨ªtica por convencimiento, por inter¨¦s, y no por af¨¢n de ocupaci¨®n y dominaci¨®n. Pero lleva tambi¨¦n raz¨®n Efraim Halevy, ex jefe del Mosad israel¨ª, cuando considera que terrorismo se ha convertido tambi¨¦n en un problema "en el interior del mundo ¨¢rabe".

A la luz de nuevos estudios, es necesario revisar algunos prejuicios. Seg¨²n las conclusiones de Robert Leiken, tras examinar los casos de cerca de 400 detenidos en Europa y en EE UU por terrorismo, un 87% de los muyaidines son inmigrados. Pero s¨®lo un 6% de estos yihadistas han entrado ilegalmente, lo que puede llevar a pensar que, en la lucha contra el terrorismo, la inmigraci¨®n ilegal no tiene por qu¨¦ ser una prioridad, y si es necesaria, aunque a¨²n no posible, una pol¨ªtica de integraci¨®n europea y no simplemente una suma de pol¨ªticas nacionales. Muchos de los activistas son conversos. Al Qaeda, o sus franquicias, los recluta a trav¨¦s de "procesos de adscripci¨®n" en c¨ªrculos estrechos de amistades, familias y clanes, lo que los hace menos penetrables y muy diferentes de las organizaciones terroristas tradicionales.

Pocos dudan de que la democracia sea deseable y necesaria en el mundo ¨¢rabe. ?Y posible? O ?c¨®mo? Una nigeriana pregunt¨® qu¨¦ les est¨¢n preparando para su pa¨ªs los americanos y europeos. Aunque a la larga la respuesta tiene que ser la extensi¨®n de la democracia, objeto de esta cumbre, queda difuminada, entre otras razones, porque el terrorismo tambi¨¦n se da en dictaduras. La relaci¨®n no es tan simple, y para algunos expertos los momentos de transici¨®n a la democracia o de regresi¨®n hacia dictaduras favorecen el surgimiento de movimientos terroristas. Hoy por hoy, hay una clara divisi¨®n, bushistas y blairistas frente a los dem¨¢s, sobre un excesivo recorte de derechos y libertades civiles a cambio de una supuesta mayor seguridad. Supuesta porque, como cr¨ªticamente afirm¨® Madeleine Albright, la manera en que la Administraci¨®n de Bush lleva la lucha contra el terrorismo "est¨¢ de hecho generando m¨¢s terrorismo". Hay pol¨ªticas posibles, pero innecesarias o contraproductivas.

La pol¨ªtica de lo posible no basta para ganar la lucha contra la pobreza o la integraci¨®n de los "d¨¦biles de la globalizaci¨®n". Y es necesario ganarla.