Sedaci¨®n en un servicio de urgencias

En estos d¨ªas se ha producido una denuncia an¨®nima por el supuesto mal uso de la sedaci¨®n, en pacientes con c¨¢ncer avanzado, en el servicio de urgencias del hospital Severo Ochoa de Legan¨¦s. Sin entrar a opinar sobre el fondo del asunto -a¨²n faltan muchos datos y hay que ser prudentes- s¨ª quer¨ªa resaltar otra cuesti¨®n que me parece importante.

Es una pena que en Madrid todav¨ªa haya enfermos oncol¨®gi-cos en situaci¨®n avanzada e incurable que, cuando surge alguna complicaci¨®n, tengan que acudir a un servicio de urgencias de un gran hospital. Estos servicios est¨¢n pensados para otra funci¨®n y no son, ni mucho menos, el lugar m¨¢s adecuado para atender a esos pacientes.

Por eso es importante contar con el suficiente n¨²mero de unidades de cuidados paliativos, domiciliarias y hospitalarias, dise?adas espec¨ªficamente para prestar a esos enfermos la atenci¨®n que necesitan, con una alta calidad profesional y sin apartarlos de sus familias en esos momentos tan dif¨ªciles.

Como ya est¨¢n comprobando en otras comunidades auton¨®micas de nuestro pa¨ªs, una red adecuada de cuidados paliativos no s¨®lo beneficia a los enfermos y a sus familias, sino que supone un ahorro notable para la sanidad p¨²blica y una descongesti¨®n de los servicios de urgencias.

Las autoridades sanitarias est¨¢n dise?ando un plan regional de cuidados paliativos: ojal¨¢ est¨¦ operativo cuanto antes.