Lamela afirma que 25 fallecidos en Legan¨¦s recibieron "sedaci¨®n irregular"

Al menos 25 enfermos terminales que murieron en las urgencias del hospital Severo Ochoa de Legan¨¦s (Madrid) entre 2004 y 2005 lo hicieron tras recibir "sedaci¨®n irregular, no indicada, indebida o en exceso" por parte de los m¨¦dicos del servicio, seg¨²n afirm¨® ayer el consejero de Sanidad de Madrid, Manuel Lamela. ?ste a?adi¨® que "en los 25 casos en los que se detectaron incidencias, [los enfermos] fallecieron en urgencias antes de que trascurrieran 24 horas" desde que se les administraran los f¨¢rmacos.

Pese a esta denuncia, Lamela recogi¨® las conclusiones del informe de expertos en los que se admite que "el an¨¢lisis del contenido de las historias cl¨ªnicas no permite obtener evidencia suficiente, pertinente y v¨¢lida" tanto para "poder afirmar o descartar la existencia de mala praxis en los facultativos" que trataron a los pacientes sometidos a sedaci¨®n terminal.

El consejero decidi¨® ayer la destituci¨®n fulminante de la c¨²pula del hospital -el gerente, Adolfo Berm¨²dez de Castro; el director m¨¦dico, Juan Carlos Mattos Antelo; y el coordinador de Urgencias, Luis Montes; ¨¦ste ¨²ltimo relevado del cargo cautelarmente el pasado 11 de marzo- por permitir "un caos organizativo en el centro que ha generado una p¨¦rdida de confianza en la direcci¨®n".

"Si el gerente no nos dice que hay problemas en el hospital, habr¨¢ que cesarlo", manifest¨® Lamela para justificar que su departamento no actuara hasta recibir las denuncias an¨®nimas. Sin embargo, el consejero se apoy¨® ¨²nicamente en "irregularidades administrativas" para justificar el cese de los tres profesionales. Entre estas irregularidades, destac¨® "el incumplimiento del protocolo de actuaci¨®n ante enfermos terminales y la normativa interna del hospital que impide que se les sede en las urgencias, salvo en casos especiales".

Lamela anunci¨® la creaci¨®n de una comisi¨®n de expertos -formada por miembros de la comisi¨®n de mortalidad del Severo Ochoa y tres m¨¦dicos externos al centro especialistas en anestesia, oncolog¨ªa y cuidados paliativos-, cuyas conclusiones ser¨¢n remitidas a la Fiscal¨ªa de Madrid que investiga el caso.

El consejero destac¨® que "de las 339 historias cl¨ªnicas investigadas desde septiembre de 2003 hasta el mismo d¨ªa de la recepci¨®n de la denuncia, en 151 casos se utiliz¨® sedaci¨®n paliativa. En 57 ocasiones no aparece consentimiento de los familiares, ni en la historia cl¨ªnica ni en un documento de consentimiento informado" como establece la gu¨ªa del centro.

Otras irregularidades se?aladas por el consejero fueron que s¨®lo en el 5,3% de los casos los m¨¦dicos dejaron expresamente constatada la motivaci¨®n de cada medida adoptada y que "70 documentos de consentimiento informado estaban en un caj¨®n y no archivados junto a sus correspondientes historias cl¨ªnicas", lo que seg¨²n el consejero podr¨ªa vulnerar, adem¨¢s, la ley 41/2002, de 14 de noviembre, Reguladora de la Autonom¨ªa del Paciente y la Ley de Protecci¨®n de Datos. El consejero dijo "no saber cu¨¢ntas de las 25 historias cl¨ªnicas con sedaci¨®n irregular hab¨ªan obtenido el consentimiento informado de los familiares".

Espacios reservados

Lamela a?adi¨® que "el procedimiento a seguir no se ha seguido con car¨¢cter general, a d¨ªa de hoy no se ha cumplido en absoluto". Seg¨²n Lamela, desde hace m¨¢s de un a?o existe una normativa interna que establece que "no se sedar¨¢ a pacientes en las urgencias", "en caso de ser inevitable [por falta de camas en planta, por ejemplo], el paciente no permanecer¨¢ m¨¢s de 24 horas en el servicio" y "estos enfermos tendr¨¢n prioridad para ser ingresados en planta".

Esta afirmaci¨®n, sin embargo, contrasta con la organizaci¨®n y estructura del propio servicio de Urgencias, en el que hay dos espacios reservados para la atenci¨®n de enfermos terminales, seg¨²n puede verse en los carteles que cuelgan de las paredes del hospital. Asimismo, todos los informes internos del centro hacen referencia a la existencia de este espacio, en el que los enfermos reciben los tratamientos adecuados, entre ellos la sedaci¨®n si es necesario.