Los agentes de Homicidios investigaron a Tony King

El crimen de Mar¨ªa Natividad Garayo se ha convertido en uno de los m¨¢s estudiados por los responsables de Homicidios de toda Espa?a. Cada vez que hay una reuni¨®n de la Polic¨ªa Judicial sale a colaci¨®n este caso en un af¨¢n de que nuevas ideas permitan su resoluci¨®n. Hasta ahora, con resultado negativo.

Seg¨²n reconoce un mando policial de Santander, se ha seguido todo el protocolo de los homicidios. Y varias veces. Fueron investigados todos los presos de Espa?a que estaban de permiso, que gozaban de tercer grado o que hab¨ªan quedado en libertad en el ¨²ltimo a?o. En especial se estudi¨® a los agresores sexuales de todo el territorio espa?ol.

Tambi¨¦n les apretaron las clavijas a los maleantes de la zona, a los que presionaron por si alguno hab¨ªa o¨ªdo alguna cosa o si hab¨ªan participado en el crimen. Ninguno se declar¨® culpable o dio alguna pista que facilitara la detenci¨®n del culpable. Otro detalle que la polic¨ªa estudi¨® con mucho detenimiento, seg¨²n el mando policial de Santander, fue los inmigrantes que hab¨ªan desembarcado en Santander en las ¨²ltimas fechas o que se dedicaban a delinquir en la regi¨®n c¨¢ntabra.

Dos antecedentes

Un rayo de esperanza surgi¨® con la detenci¨®n de Tony Alexander King. ?ste se encuentra acusado del asesinato de la joven mije?a Roc¨ªo Wanninkhof, ocurrido en 1999, y del homicidio de Sonia Carabantes, la joven de 17 a?os asesinada en 2003 en la localidad malague?a de Co¨ªn. La polic¨ªa de Santander empez¨® a juntar hilos: desde esta ciudad del norte de Espa?a salen los transbordadores que unen la pen¨ªnsula con Gran Breta?a, donde vivi¨® King hasta que se traslad¨® a M¨¢laga.

Los investigadores de Santander pidieron los listados de pasajeros que utilizaron los transbordadores 15 d¨ªas antes y despu¨¦s del homicidio de Garayo. Miraron todos los nombres de King e incluso las posibles filiaciones que ilegalmente pudo utilizar en su huida tras el eventual crimen. De nuevo, los agentes de Homicidios entraron en un v¨ªa muerta que no les permiti¨® arrojar luz sobre el caso de marras.

"Ya nos ha dado por pensar que alguien le intent¨® robar las joyas y los pocos objetos de valor que llevaba y que, al resistirse la mujer, el agresor empez¨® a apu?alarla con sa?a.

Dio la casualidad de que en ese momento no pasaba nadie, por lo que lo hizo por casualidad, sin testigos", resume con cierta desesperaci¨®n un responsable de Polic¨ªa Judicial de Santander.

Mientras, el caso sigue abierto y con pocos visos de ser resuelto, salvo que el homicida decida entregarse con el paso del tiempo.