Kezman recupera la punter¨ªa

Durante los partidos de Liga que el Partiz¨¢n disputa en su estadio todav¨ªa se corea el nombre de Kezman. Los aficionados rinden as¨ª tributo al ¨²nico jugador en la historia del club que marc¨® cinco goles en otros tantos partidos al eterno rival, el Estrella Roja, gan¨¢ndose un privilegiado lugar en la galer¨ªa de protagonistas que ilustra la enconada rivalidad hist¨®rica entre los dos clubes. Kezman (Zemun, 1979) milit¨® dos temporadas en el Partiz¨¢n, donde los ojeadores del PSV le descubrieron para llev¨¢rselo a Eindhoven en 2000.

En Holanda fue tres veces m¨¢ximo goleador de la Liga, marcando 105 goles en 123 partidos repartidos en cuatro a?os. Un registro lo suficientemente llamativo como para que el Chelsea le contratara el pasado verano tras abonar cinco millones de libras (7,2 millones de euros) al club holand¨¦s. Algunos problemas de adaptaci¨®n, ciertos contratiempos f¨ªsicos y la dura competencia de otros delanteros como Drogba o Gudjohnsen ralentizaron la integraci¨®n de Kezman. R¨¢pido, potente, de una gran determinaci¨®n y verticalidad cuando el juego adquiere velocidad, posee el punto de ego¨ªsmo que caracteriza a esos goleadores que gustan de rematar todo bal¨®n que les llegue. Y pese a que su primer gol con el Chelsea se hizo esperar hasta diciembre, Mourinho afirma que jam¨¢s ha perdido la fe en esas virtudes. Ahora, Kezman ya parece haber recobrado su car¨ªsimo instinto en el Chelsea y en su selecci¨®n, con la que marc¨® un gol ante B¨¦lgica. Desde que debutara con la camiseta de Yugoslavia en 2000, la afici¨®n serbia le otorg¨® rango de nuevo ¨ªdolo. Mantuvo serias diferencias con el anterior seleccionador Dejan Savicevic en 2003, abandonando el equipo hasta la llegada del nuevo t¨¦cnico Ilija Petkovic, que adora sus cualidades para el contragolpe. En su pa¨ªs, Kezman es un h¨¦roe m¨¢s all¨¢ de sus ¨¦xitos deportivos. Suele recordar c¨®mo celebr¨® su 20? cumplea?os en 1999, en una Belgrado que, como toda la antigua Yugoslavia, padec¨ªa los horrores de la guerra de los Balcanes. Kezman sopl¨® las velas de su tarta escondido con su familia y amigos en un refugio para guarecerse de los bombardeos de la aviaci¨®n de la OTAN, subiendo el volumen de la m¨²sica para olvidar por un rato el estruendo de las explosiones. Una experiencia de la que sac¨® aspectos positivos: "Todas las cosas que ocurrieron en mi pa¨ªs me ayudan a ser m¨¢s fuerte. Estoy feliz de haber crecido en Serbia, porque ahora estoy preparado para cualquier situaci¨®n y tengo una mentalidad m¨¢s fuerte. No importa lo que pase. Soy un guerrero, el chico que nunca se rinde".

"Ahora soy m¨¢s fuerte. No importa lo que pase. Soy un guerrero, el chico que nunca se rinde"

Es tan relevante en su pa¨ªs que por iniciativa del Ministro de Exteriores, Vuk Draskovic, Kezman integr¨® en febrero la n¨®mina de invitados que representaban a Serbia y Montenegro en el Desayuno Nacional de la Oraci¨®n, una ceremonia de tintes religiosos en la que el presidente estadounidense, George Bush, re¨²ne anualmente en Washington a pol¨ªticos, militares y delegaciones diplom¨¢ticas de todo el mundo. Kezman, ferviente ortodoxo, declin¨® la invitaci¨®n: estaba revitalizando su olfato goleador. Consigui¨® el tanto decisivo ante el Liverpool en la final de la Carling Cup, un gol que le liber¨® de mucha presi¨®n. Y en la Liga ha marcado tres goles en las ¨²ltimas tres jornadas disputadas, siempre en las segundas partes, ya que s¨®lo ha jugado cuatro partidos como titular: "Ahora estoy encendido".