Inmigrantes "climaticos"

En los ¨²ltimos 15 a?os en la Costa del Sol hemos venido asistiendo a una l¨®gica del crecimiento ilimitado que ha pervertido no s¨®lo los usos del suelo, sino tambi¨¦n el propio lenguaje.

Dentro de lo que se ha dado en llamar las nuevas mutaciones tur¨ªsticas, la clase pol¨ªtica ha venido utilizando la desacertada expresi¨®n de "inmigrantes clim¨¢ticos", para referirse aquellos residentes que compran propiedades, inmigrantes que en muchos casos las acaban poniendo a la venta, indic¨¢ndonos con ello que su intenci¨®n no es convertirse en residentes, sino m¨¢s bien en inversionistas. El 40% de las viviendas en Marbella est¨¢ vac¨ªo la mayor parte del a?o.

Estas enormes inversiones inmobiliarias en Marbella y en la Costa del Sol en general, han generado una multiplicaci¨®n de las densidades de ocupaci¨®n del suelo en el municipio, a lo que se ha unido una modificaci¨®n de los patrones de rentabilidad de todo el territorio. Sin embargo, el aumento del suelo para edificar no ha significado un abaratamiento de los precios de las viviendas, sino todo lo contrario.

El desfase de acompa?amiento de las infraestructuras necesarias que deber¨ªan tener estos aumentos de densidades urban¨ªsticas, supone en la practica acabar con la calidad de la oferta tur¨ªstica tradicional de nuestro municipio, una crisis no s¨®lo del sistema de infraestructuras sino del modelo de desarrollo de la comarca.

La utilizaci¨®n perversa del lenguaje por nuestra clase pol¨ªtica, que nos habla de inmigrantes clim¨¢ticos, desarrollos sostenibles, respeto ambiental, aumento de valor paisaj¨ªstico, se estrella con la evidencia de una costa del sol colmatada, con un presi¨®n del paisaje serrano, litoral y urbano brutal y sobre todo con la evidencia de que cada a?o tenemos que aumentar las aportaciones de arena en nuestras playas para que puedan seguir siendo eso, playas.