Despido improcedente

Acabo de leer en la secci¨®n de "Cartas al director", una firmada por Manuel Avi, de Ja¨¦n,

["Juzgados de lo Social y Santa Inquisici¨®n", publicado el 22 de marzo], con la que me siento totalmente identificado, pues eso, lamentablemente, no ocurre s¨®lo en Ja¨¦n; tambi¨¦n aqu¨ª, en la provincia de Huelva, concretamente en el Juzgado n¨²mero 1 de lo Social, se conden¨® a una hija m¨ªa a un despido procedente, seg¨²n ellos, en base a unos informes emitidos por el director de Banesto Encinasola, donde prestaba sus servicios; fue recurrida la sentencia, porque no fue probada ninguna culpabilidad, ante el Juzgado n¨²mero 2 de lo Penal, de Huelva, y en fallo de fecha 04/05/04 es declarada inocente.

Yo tambi¨¦n he sido directivo de Banesto y conozco el pa?o. Pero, ?qu¨¦ se puede hacer ante esto? Han destrozado a un ser inocente que no cometi¨® m¨¢s delito que el de querer volar sin percatarse del da?o que su sombra pod¨ªa causar. He enviado documentaci¨®n al ministro de Justicia y a todos los estamentos que imaginarse puedan. Tiene el respaldo de los sindicatos, pero ese Juzgado de lo Social hace o¨ªdos sordos a la sentencia del de lo Penal. Ante esto no cabe m¨¢s remedio que sufrir la humillaci¨®n de la influencia de los poderosos. Hay da?os irreparables y ¨¦ste es de los que dejan secuelas de por vida, que prefiero silenciar.