"Hacer del amor lo central subordina a la mujer al hombre"
Ana T¨¢vora tiene 49 a?os, es doctora en psiquiatr¨ªa y coordinadora del Equipo de Salud Mental de Santa F¨¦, en Granada. Adem¨¢s, trabaja con grupos terape¨²ticos de mujeres desde hace 15 a?os y en terapias individuales con mujeres incluyendo la perspectiva de g¨¦nero. Recientemente ha estado en al Pa¨ªs Vasco para impartir una conferencia.
Pregunta. Usted ha hablado en Bilbao sobre La importancia del amor en la construcci¨®n de nuestros deseos. ?Podr¨ªa explicar en qu¨¦ consiste?
Respuesta. El sistema social coloca a las mujeres en un lugar subordinado frente al hombre al valorizar lo importante que debe ser el amor en la vida de las mujeres.
P. Tambi¨¦n debe ser importante para los hombres.
"Hay muchas mujeres que se est¨¢n planteando por qu¨¦ son ellas las que tienen que cuidar a mayores y a peque?os"
"El problema est¨¢ en sentir que construirte como persona depende de lo que el otro te da y no tanto de lo que t¨² quieres hacer"
R. Pero en las mujeres se convierte en el objetivo central para que nos construyamos como sujetos. La diferencia est¨¢ en que los hombres se construyen fundamentalmente desde el desarrollo de sus capacidades, de sus potencialidades. Sin embargo, una mujer siente que es mujer, sobre todo, en la medida en que se siente querida, que tiene muchas personas a su alrededor, que se siente imprescindible en las relaciones, y en la medida que est¨¢ ocupada en el bienestar y la felicidad de los otros.
P. ?Eso es algo natural o aprendido?
R. Totalmente cultural. Consecuencia del sistema dominante.
P. Las mujeres son dependientes en todas las culturas y desde hace mucho tiempo.
R. El problema no es ser dependiente o no, sino sentir que construirte como persona depende de lo que el otro te da. De lo que te da queri¨¦ndote, mir¨¢ndote, reconoci¨¦ndote, valor¨¢ndote, y no tanto de lo que t¨² quieres hacer.
P. A las mujeres se nos ense?a que estamos especialmente hechas para dedicarnos a los dem¨¢s.
R. Se nos carga con una serie de tareas, y la principal es la relacionada con los afectos, con la afectividad. Y eso muchas mujeres lo hacen totalmente suyo; es decir, que no son conscientes de que es un valor que te mete el sistema y que tu incorporas como propio.
P. Ten¨ªa que ver con el cuidado de los hijos, que ha estado en manos de las mujeres.
R. Cuidar a los hijos no es ning¨²n problema, siempre que eso no sea lo ¨²nico que te constituye, que no creas que lo que te da tu identidad, tu bienestar y tu satisfaci¨®n como persona es cuidar a los hijos y tener hijos. Muchas mujeres de mediana edad que acuden a mi consulta han puesto todo su deseo y su desarrollo como personas en la relaci¨®n con los hijos. Y en el momento en que los hijos desaparecen son mujeres que no tienen inter¨¦s por otras cosas, porque no les han dado valor.
P. Tambi¨¦n pasa en las separaciones.
R. Cuanto m¨¢s central sea la importancia que se le de al amor en la construcci¨®n de tu identidad, m¨¢s dif¨ªcil va a ser tu propio desarrollo personal. Porque si para ti el amor del otro es tan importante, nunca vas a hacer algo que produzca el malestar del otro.
P. ?Porqu¨¦ para las mujeres es importante no causar malestar a su pareja y no lo es para los hombres?
R. Porque esa es la mejor manera de mantener la subordinaci¨®n.
P. ?Y qu¨¦ interer¨¦s tiene el hombre el mantener esa subordinaci¨®n?
R. Que los hombres no tengan que cuidar. Mientras haya mujeres dispuestas a cuidar y, adem¨¢s, a desarrollarse como personas a trav¨¦s de ese cuidado, para qu¨¦ van a tener que cuidar los hombres. Y porque, adem¨¢s, hay una cosa important¨ªsima, y es que los hombres pueden ser hombres p¨²blicos en la medida que tienen a una mujer que est¨¢ dispuesta a ocuparse de sus necesidades afectivas. Los hombres cuentan con que hay una mujer que va a estar dispuesta a darle parte de la afectividad que ¨¦l necesita para ser un hombre p¨²blico en toda su potencialidad.
P. Pero eso no es siempre as¨ª.
R. Hay muchas mujeres que se est¨¢n planteando el tema de no cuidar, por ejemplo, a sus familiares enfermos; que se preguntan por qu¨¦ son ellas las que tienen que cuidar, las que se tienen que quedar con los mayores y los peque?os.
P. Ser¨ªa un cataclismo si las mujeres se negaran a cuidar.
R. El Estado, la familia, los hombres y las mujeres tendr¨ªan que desaprender todo lo que tiene que ver con la historia de los afectos, de los cuidados y de c¨®mo se construyen las relaciones amorosas de todo tipo. Eso llevar¨ªa a un cuestionamiento tan importante de c¨®mo est¨¢ estructurada la sociedad, que hay sectores a los que no les interesa ese cuestionamiento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.