Jes¨²s Ponce debuta con una historia de amor sin techo

Fue un reportaje fotogr¨¢fico en 1992 lo que acerc¨® a Jes¨²s Ponce a la realidad de los sin techo que sobreviven en las calles de Sevilla, y lo inspir¨® su primer largometraje, 15 d¨ªas contigo, que hoy se estrena. Aquel trabajo que encar¨® "sin teleobjetivo" le abri¨® los ojos a unas vidas "que no nos gusta mirar porque est¨¢n demasiado cerca". "En 1992 parec¨ªa que no hab¨ªa mendigos en Sevilla. Lo m¨¢s complicado fue dar con ellos. En el 93 s¨ª los hubo otra vez", explica con media sonrisa este joven director que cuenta con una amplia experiencia televisiva y varios cortometrajes: La vida en Super-8 y Seis minutos sin Virginia.

C¨¢mara en mano en la flamante Sevilla de la Expo, Ponce recuerda que comprob¨® que "las diferencias no son tan grandes; ellos tambi¨¦n se re¨²nen, tienen pareja, se levantan y van a trabajar". Esta vida sin paredes ni techo bajo los que guarecerse, pero vida y rutina al fin y al cabo, ha calado en su pel¨ªcula. La historia de Isabel, una ex presidiaria, y Rufo, un heroin¨®mano enfermo de sida, apela al "morbo de ver qu¨¦ hacen despu¨¦s de pedir estas personas, su d¨ªa a d¨ªa", seg¨²n el actor principal, Sebasti¨¢n Haro.

Haro, que ha participado en Solas, El Lute II o Al sur de Granada, no opt¨® por una inmersi¨®n en la vida callejera para preparar el papel: "Suelo trabajar a partir del gui¨®n. Todos hemos visto personas as¨ª en la calle, lo tienes archivado y de pronto salen los matices. El espejo en personas tan desvalidas se magnifica. Parto de una intimidad para transmitir". El caso de Isabel Ampudia, que le da la r¨¦plica, fue distinto: "Mi personaje no es adicto y yo no ten¨ªa el acento. Mi aproximaci¨®n ha sido muy lenta".

En el reparto participan tambi¨¦n Joan Dalmau (secundario en Mar adentro ), Pepa D¨ªaz Meco o Mercedes Hoyos. "La selecci¨®n no fue dif¨ªcil; en mi tierra das una patada y salen actores. Todo el mundo se sorprende y siente que ha descubierto una generaci¨®n de actores en Andaluc¨ªa, pero esta gente lleva 30 a?os haciendo cortos gratis", advierte Ponce. Adem¨¢s de los profesionales, para determinadas escenas contrataron in situ a algunos mendigos. "Les contratamos en la puerta del centro religioso donde grabamos la escena. Uno de ellos me cont¨® luego que ha participado en varias pel¨ªculas. Me llevaba dos largometrajes de ventaja".

Contrario a la idea de que se etiquete al "cine andaluz" -"?por qu¨¦ no se habla de un cine madrile?o?"-, Jes¨²s Ponce s¨ª encuentra algunos puntos de aproximaci¨®n con sus colegas: "Supongo que todos somos gente de clase media que vivimos la transici¨®n. Somos compa?eros de estudio y casi de barrio". Su pel¨ªcula -"con desconchados que dan textura al fondo"- muestra, seg¨²n Ponce, que "en el sur no se hacen pel¨ªculas con pladur".