Un vecino de San Lorenzo mata a su vecina y hiere de un disparo a la sobrina de ¨¦sta

Tarde tr¨¢gica en San Lorenzo de El Escorial. Una mujer de esta localidad, Marlene de Block Gounu, de 60 a?os, muri¨® ayer tras recibir un disparo de escopeta en el pecho, descerrajado por un vecino suyo, C¨¦sar Fernando Ramos Alonso, de 66 a?os. ?ste roci¨® despu¨¦s a la v¨ªctima con gasolina y la prendi¨® fuego. Tambi¨¦n peg¨® un tiro en el brazo izquierdo a la sobrina de Marlene, una ni?a de 14 a?os. Los vecinos avisaron al tel¨¦fono de emergencias 112, lo que permiti¨® que el presunto homicida fuera detenido por guardias civiles. Los investigadores creen que Ramos sufri¨® un rapto de locura.

Los hechos de produjeron sobre las 17.50, cuando la mujer, de origen holand¨¦s, caminaba con su sobrina de regreso a su casa, por la confluencia de las calles del Pozo de la Nieve y Fray Luis de Le¨®n, en la parte alta de San Lorenzo de El Escorial. De repente, C¨¦sar Fernando Ramos sali¨® de su casa empu?ando una escopeta de caza para la que ten¨ªa licencia de armas en vigor. Sin mediar palabra, se dirigi¨® hacia la mujer y le descerraj¨® un tiro que le alcanz¨® de lleno en el pecho.

La mujer cay¨® malherida en medio de un gran charco de sangre. Acto seguido, el hombre enca?on¨® a la sobrina de la v¨ªctima y volvi¨® a hacer fuego, presa de su furia homicida. El disparo le alcanz¨® en el antebrazo izquierdo, lo que le produjo a la ni?a un enorme boquete. La adolescente sali¨® corriendo, mientras sangraba abundantemente. Gritaba para pedir auxilio y presa del p¨¢nico, seg¨²n los vecinos. "Llevaba en el brazo un boquete en el que cab¨ªa una pelota de golf", se?al¨® Guillermo, un vecino del lugar.

El agresor entr¨® en su vivienda y cogi¨® una garrafa de gasolina con la que roci¨® a la mujer que permanec¨ªa malherida en el suelo. Acto seguido la prendi¨® fuego. Marlene de Block intent¨® protegerse del ataque, pero fue in¨²til. Mientras estaba ardiendo, su asesino la roci¨® con m¨¢s gasolina, por lo que fue imposible que se zafara de las llamas. "Ha sido impresionante. Las llamas han alcanzado por lo menos 15 metros de alto. Al principio, no hemos sabido qu¨¦ pasaba. Parec¨ªa una explosi¨®n", explic¨® una vecina de la calle del Pozo de la Nieve.

En ese momento lleg¨® el hermano del homicida, que empez¨® a preguntar qu¨¦ ocurr¨ªa y por qu¨¦ estaba haciendo eso. "Le ha mirado con miedo y sin saber lo que ten¨ªa que hacer porque no sab¨ªa cu¨¢l iba a ser la reacci¨®n del hermano", a?adi¨® otra vecina.

Las llamas y los chillidos de la ni?a alertaron al vecindario, que se asom¨® a las ventanas a ver qu¨¦ ocurr¨ªa. "Si llega a haber m¨¢s gente en la calle, seguro que habr¨ªa habido m¨¢s v¨ªctimas. Nos pod¨ªa haber tocado a cualquiera de nosotros", comentaban anoche los residentes de este barrio de San Lorenzo de El Escorial.

El tel¨¦fono de emergencias 112 recibi¨® tres llamadas alertando de lo sucedido. Al lugar se desplazaron dos unidades de los bomberos de la Comunidad de Madrid, que hallaron a la mujer todav¨ªa envuelta en llamas. Cuando extinguieron el fuego, la mujer hab¨ªa fallecido como consecuencia del humo inhalado y de las graves quemaduras sufridas. Los facultativos de una UVI m¨®vil del Summa s¨®lo pudieron certificar la muerte de la mujer, seg¨²n un portavoz de Emergencias 112.

Despu¨¦s atendieron a la ni?a, que sufr¨ªa fuertes desgarros musculares y posible afecci¨®n en el hueso del antebrazo izquierdo. Tras estabilizar a la herida, fue trasladada en la UVI a la explanada junto al monasterio del Escorial , donde la recogi¨® un helic¨®ptero medicalizado y la llev¨® al servicio de urgencias del hospital Doce de Octubre, en la capital. Los m¨¦dicos temen que la peque?a pueda perder parte del brazo izquierdo, dada la gravedad de las heridas sufridas.

Al lugar tambi¨¦n acudieron guardias civiles que detuvieron a C¨¦sar Fernando. ?ste no opuso resistencia. Permanec¨ªa en el lugar de los hechos. Pr¨¢cticamente no habl¨®. Tan s¨®lo dijo: "Es que con estas amas de casa..." Despu¨¦s, permaneci¨® serio, muy fr¨ªo y ajeno a lo que acaba de hacer.