El Mazda 3 gana por precio y equipamiento

La l¨ªnea del Mazda 3 prima el estilo deportivo y presenta una imagen con m¨¢s car¨¢cter que el Volvo. Destaca el dise?o del frontal, con la parrilla en forma de V y un fald¨®n inferior m¨¢s llamativo. Los trazos suaves del techo forman un arco descendente y se unen por detr¨¢s con una zaga elevada para integrar el maletero y evitar el aspecto demasiado cl¨¢sico que caracteriza a las berlinas.

Conducci¨®n: 47 puntos (2?)

El estilo deportivo del Mazda se refleja tambi¨¦n en la conducci¨®n. Aunque los dos coches de la prueba comparten el mismo motor 1.6 turbodi¨¦sel procedente de la alianza entre Ford y PSA (Peugeot-Citro?n), adem¨¢s de gran parte del chasis, el modelo japon¨¦s pesa 100 kilos menos e incluye una configuraci¨®n mec¨¢nica que realza m¨¢s su car¨¢cter.

La direcci¨®n es m¨¢s directa, el motor responde de forma m¨¢s inmediata al acelerador y monta unas suspensiones m¨¢s en¨¦rgicas. Estos matices provocan una conducci¨®n m¨¢s ¨¢gil y deportiva en todos los trazados y hacen que acuse algo menos los balanceos laterales en las curvas. Sin embargo, las diferencias son m¨ªnimas, aunque siempre ligeramente favorables al Mazda 3.

Por lo dem¨¢s, el motor se muestra el¨¢stico desde muy bajo r¨¦gimen, sube de vueltas con mucha alegr¨ªa y se estira con rapidez hasta las 4.500 revoluciones. Tiene un cambio manual de cinco marchas muy bien escalonado y r¨¢pido de accionar, y unos buenos frenos. El conjunto ofrece un comportamiento din¨¢mico muy conseguido que permite disfrutar al volante casi como en un GTi. S¨®lo el tacto de los mandos, m¨¢s duro y algo menos refinado que el del Volvo, exige m¨¢s esfuerzo y lo sit¨²a por detr¨¢s de su rival en calidad de conducci¨®n.

Vida a bordo: 40 puntos (2?)

El interior del Mazda ofrece una habitabilidad similar a la del S40, con unas buenas plazas delanteras, un espacio correcto en las traseras y un maletero generoso teniendo en cuenta sus medidas externas. El ambiente es m¨¢s deportivo y alegre, con el volante y el cambio en cuero, una consola central muy original, instrumentaci¨®n m¨¢s llamativa y tapicer¨ªas coloristas. Pero los pl¨¢sticos y algunos mandos, como los elevalunas, no transmiten la sensaci¨®n de calidad y consistencia del Volvo, y aunque el ambiente general es atractivo, no logra ofrecer un aspecto igual de elegante y refinado.

El Mazda tiene tambi¨¦n unas suspensiones un poco m¨¢s en¨¦rgicas para viajar, y como no est¨¢ tan bien aislado, deja sentir m¨¢s los ruidos mec¨¢nicos y de rodadura en el interior. No es rumoroso ni inc¨®modo en los viajes, pero tampoco transmite la sensaci¨®n de solidez y el confort de su rival n¨®rdico. En contrapartida, resulta m¨¢s pr¨¢ctico en el uso diario porque tiene m¨¢s espacios y accesorios para dejar objetos, con una guantera y un apoyabrazos central enormes, bolsas laterales en las cuatro puertas, y dos posavasos y una repisa junto al freno de mano.

Seguridad: 16 puntos (1?)

La versi¨®n 1.6 CRDT Sportive incluye de serie seis airbags, ABS y control de estabilidad ESP. Y aunque se muestra un poco m¨¢s ¨¢gil, el comportamiento din¨¢mico es muy similar en eficacia y seguridad al del Volvo.

Econom¨ªa: 29 puntos (1?)

El punto fuerte del Mazda y la clave de su victoria. La versi¨®n de la prueba cuesta 20.725 euros, 3.250 menos que el Volvo, pero adem¨¢s incluye un equipo de serie superior en los detalles. Aparte de los elementos de seguridad, viene con climatizador, radio-CD, elevalunas el¨¦ctricos en las cuatro puertas, cierre centralizado con mando a distancia y otros detalles. A?ade ordenador de viaje y llantas de aleaci¨®n, opcionales en el Volvo, y un a?o m¨¢s de garant¨ªa (tres).

Los consumos son muy bajos y similares en los dos modelos, aunque el Mazda ha gastado un poco menos en la prueba. En conducci¨®n normal apenas pasa de cinco litros, y sube a siete en ciudad y estirando las marchas.

La imagen y el estilo s¨®lido e inconfundible de Volvo, con un aire m¨¢s joven y desenfadado que sus hermanos mayores. El S40 es el modelo peque?o de la marca sueca y mantiene su ADN: frontal prominente y poderoso, cintura lateral muy marcada con un escal¨®n bajo las ventanillas, y una zaga corta y robusta que transmite sensaci¨®n de protecci¨®n. Una berlina moderna con personalidad propia.

Conducci¨®n: 48 puntos (1?)

El S40 tiene un planteamiento m¨¢s burgu¨¦s y familiar, pero no sacrifica el disfrute al volante y cuesta notar las diferencias con el Mazda 3, salvo cuando se conduce uno despu¨¦s del otro.

El motor 1.6 D responde con una contundencia sorprendente, y, con el apoyo de un cambio de cinco marchas bien escalonado y muy r¨¢pido de manejar, ofrece unas prestaciones brillantes, sobre todo para su cilindrada. Responde con mucha elasticidad, pero como pesa m¨¢s que el Mazda, es algo menos r¨¢pido al acelerar, aunque despu¨¦s alcanza una velocidad oficial superior que refleja su cuidada aerodin¨¢mica.

En la estabilidad tambi¨¦n acusa algo m¨¢s las inercias en las curvas, pero la diferencia es m¨ªnima y circula con agilidad en todos los trazados. Adem¨¢s tiene un tacto muy suave que permite conducirlo con la punta de los dedos, transmite mucha seguridad y cuenta con unos frenos que paran con equilibrio. Tiene unos mandos y un tacto general m¨¢s suaves que lo sit¨²an por delante en calidad de conducci¨®n y hacen que sea m¨¢s agradable de conducir, aunque siempre con diferencias de matiz.

Vida a bordo: 44 puntos (1?)

El punto fuerte del Volvo. El espacio interior es muy similar al del Mazda, tanto en las plazas delanteras como en las traseras, y tambi¨¦n en la capacidad del maletero. Pero el S40 aporta un dise?o m¨¢s original y cuidado que le proporciona un aspecto m¨¢s ordenado. Utiliza unos pl¨¢sticos de calidad superior y est¨¢ mejor acabado, con una consola central flotante muy original y unos asientos confortables que admiten muchos reglajes. Las suspensiones filtran mejor los baches, est¨¢ mejor insonorizado, y es m¨¢s c¨®modo y silencioso en los viajes que su rival.

En cambio, la dotaci¨®n de huecos para objetos es m¨ªnima y limita su sentido pr¨¢ctico en el uso diario. El apoyabrazos central delantero, la guantera y las bolsas de las puertas (s¨®lo las lleva delante) son mucho m¨¢s peque?os. Atr¨¢s apenas tiene dos posavasos integrados en el apoyabrazos. Pero no hay donde dejar una agenda, aunque a cambio aporta detalles originales y pr¨¢cticos. As¨ª, destacan las bolsas situadas en el frontal de la base de los asientos, que sirven para llevar a mano los objetos personales (tel¨¦fono, cartera...), o una bandeja opcional que se integra en el piso del maletero y se levanta en vertical para compartimentar el espacio y permite sujetar las bolsas con una cinta el¨¢stica (86 euros).

Seguridad: 16 puntos (1?)

Incluye un equipo de serie similar, con seis airbags, ABS y ESP. Y a?ade los reposacabezas activos y el minucioso estudio de la resistencia de la carrocer¨ªa que distingue a todos los Volvo. Pero el comportamiento din¨¢mico es algo menos ¨¢gil en zonas viradas e iguala el resultado.

Econom¨ªa: 23 puntos (2?)

El principal inconveniente del Volvo es el precio, porque cuesta 23.970 euros, 3.250 m¨¢s que el Mazda. Y no lo justifica con el equipo de serie, porque no incluye algunos detalles como las llantas de aleaci¨®n (925 euros) o el ordenador de viaje (336 euros), que son opcionales. Aparte del equipo de seguridad, viene con climatizador, cuatro elevalunas el¨¦ctricos, cierre con mando, radio-CD y dos a?os de garant¨ªa. Los consumos son similares: unos cinco litros en conducci¨®n suave y alrededor de siete en ciudad y estirando las marchas.

DOS ESTILOS DIFERENTES y un ganador por la m¨ªnima: el Mazda 3, que se impone por un punto gracias a un precio muy competitivo, que equilibra la calidad de conjunto del Volvo S40.

El modelo japon¨¦s supera a su rival porque cuesta 3.250 euros menos, una diferencia importante que se completa con un equipo de serie m¨¢s generoso: incluye lo mismo y a?ade detalles como el ordenador de viaje o las llantas de aleaci¨®n, que en la berlina n¨®rdica se pagan aparte. El Mazda tiene tambi¨¦n un planteamiento m¨¢s deportivo que se refleja en una l¨ªnea m¨¢s estilizada y un interior m¨¢s colorista. Este matiz se aprecia tambi¨¦n en un comportamiento din¨¢mico con m¨¢s car¨¢cter que le proporciona m¨¢s agilidad en trazados virados y en el tr¨¢fico urbano. Pero, por lo dem¨¢s, las prestaciones son muy similares porque los dos montan el mismo motor, un 1.6 turbodi¨¦sel a la ¨²ltima que ofrece un rendimiento sorprendente porque corre mucho y gasta muy poco.

El Volvo S40 tiene toda la clase de Volvo, tanto por fuera como por dentro. La l¨ªnea refleja la habitual robustez de la marca y le proporciona m¨¢s presencia. El interior, en un espacio similar, est¨¢ mejor acabado y da m¨¢s sensaci¨®n de calidad. Tambi¨¦n es algo m¨¢s c¨®modo, tanto por suspensiones como por insonorizaci¨®n. Pero el precio -m¨¢s elevado- y tambi¨¦n en parte el equipo de serie -algo menos completo- inclinan la balanza en su contra.