El ex presidente de Ecuador burla el cerco de los manifestantes para exiliarse en Brasil

El ex presidente ecuatoriano Lucio Guti¨¦rrez logr¨® eludir en la madrugada de ayer el cerco de manifestantes que lo reten¨ªa en la Embajada brasile?a en Quito y escapar al exilio. Sali¨® encapuchado y disfrazado de polic¨ªa. El ex mandatario huy¨® de la sede diplom¨¢tica hasta el aeropuerto de la capital en medio de un fuerte dispositivo de seguridad. De ah¨ª viaj¨® en helic¨®ptero hasta un aer¨®dromo m¨¢s peque?o 90 kil¨®metros al sur, donde logr¨® abordar un avi¨®n militar brasile?o que lo traslad¨® a Brasilia. All¨ª permanecer¨¢ alojado con su familia en unas instalaciones militares.

El nuevo ministro de Gobierno ecuatoriano, Mauricio G¨¢ndara, asegur¨® que el ex mandatario sali¨® a las cuatro de la ma?ana (11.00 hora peninsular espa?ola) de la residencia del embajador brasile?o, Sergio Florencio, donde hab¨ªa sido acogido desde que, forzado por la revuelta callejera, abandonara el Palacio de Carondelet el pasado mi¨¦rcoles. Guti¨¦rrez fue inmediatamente trasladado al aeropuerto de Quito, para luego ser conducido, a bordo de un helic¨®ptero, a la ciudad andina de Latacunga, 90 kil¨®metros al sur de la capital. Desde all¨ª abandon¨® el pa¨ªs junto con su esposa, la ex diputada Ximena Boh¨®rquez, y una de sus hijas, Viviana. Boh¨®rquez renunci¨® a su cargo de diputada tras haber constatado la "degeneraci¨®n de la pol¨ªtica en la actividad del Congreso", seg¨²n ha hecho saber en su carta de dimisi¨®n.

La rocambolesca operaci¨®n, llevada a cabo en la madrugada por polic¨ªas y militares, se inici¨® con un autom¨®vil que sali¨® por la puerta principal de la vivienda del diplom¨¢tico y que volvi¨® poco despu¨¦s. Fue s¨®lo un juego de despiste, una h¨¢bil maniobra para distraer a los periodistas que esperaban la salida del ex presidente y confundir a las decenas de exaltados manifestantes que se opon¨ªan a que Guti¨¦rrez abandone el pa¨ªs.

Mientras esto suced¨ªa, dos veh¨ªculos del Grupo de Operaciones y Rescate de la Polic¨ªa aparcaron en la puerta trasera de la Embajada brasile?a. Recogieron a dos hombres con uniforme de la Polic¨ªa, cubiertos con pasamonta?as negro y casco, y partieron en direcci¨®n al aeropuerto. La televisi¨®n local mostr¨® im¨¢genes de esta jugada y asegur¨® que uno de los dos encapuchados, al que s¨®lo se le ve¨ªan un poco los ojos y la nariz, era Guti¨¦rrez.

En efecto, los agentes que custodiaban la fachada de la sede diplom¨¢tica no tardaron en informar a los medios de que el ex gobernante hab¨ªa ya abandonado la sede diplom¨¢tica por la puerta trasera. Pero ya era tarde. Los manifestantes, que reclamaban que Guti¨¦rrez fuera juzgado en el pa¨ªs por abuso de poder, corrupci¨®n y represi¨®n, gritaron enardecidos: "?No lo dejaremos irse!", "?Queremos justicia!". Mientras gritaban, los veh¨ªculos ya se hab¨ªan alejado a toda velocidad. Guti¨¦rrez hab¨ªa intentado abandonar Ecuador la misma noche del derrocamiento, pero una turba de gente le impidi¨® abordar un avi¨®n el aeropuerto de Quito y tuvo que ir en el mismo helic¨®ptero que lo sac¨® de la sede de Gobierno a la Embajada brasile?a.

La salida del pa¨ªs de Guti¨¦rrez, destituido por el Congreso el 20 de abril pasado y reemplazado en la jefatura del Estado por su vicepresidente, Alfredo Palacio; se ha prolongado por cuatro d¨ªas debido a que, hasta el s¨¢bado por la noche, las autoridades ecuatorianas no entregaron a las brasile?as el salvoconducto que permit¨ªa al ex presidente dejar el pa¨ªs. "Guti¨¦rrez abandon¨® la Embajada de Brasil en Quito, porque el Gobierno le concedi¨® el correspondiente salvoconducto", precis¨® G¨¢ndara. El ministro se?al¨® que por "cuestiones de seguridad" se mantuvo en absoluta reserva la entrega del mismo al ex gobernante. Adicionalmente, el nuevo ministro de Exteriores, Antonio Parra Gil, declar¨® que el salvoconducto hab¨ªa sido otorgado cumpliendo estrictamente las reglas internacionales para el asilo pol¨ªtico.

La larga espera del permiso de las autoridades ecuatorianas y el asedio a la residencia del embajador brasile?o enturbiaron temporalmente las relaciones entre Brasil y Ecuador. A trav¨¦s de un comunicado, el ministro de Exteriores brasile?o, Celso Amorim, aclar¨® ayer que el hecho de que Brasil haya concedido el asilo a Guti¨¦rrez, no significa que su pa¨ªs sienta simpat¨ªa o apoye la gesti¨®n del ex Gobierno ecuatoriano. Amorin manifest¨® adem¨¢s que deseaba que se solucionase pronto la crisis.

La destituci¨®n del ex presidente no ha terminado con el descontento popular. El nuevo Ejecutivo de Alfredo Palacio debe empezar a perfilar la reforma org¨¢nica de la Justicia y arrancar con la negociaci¨®n de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia. Tambi¨¦n est¨¢ pendiente la reestructuraci¨®n de los tribunales Constitucional y Electoral.

Por otra parte, el ex presidente ecuatoriano Abdal¨¢ Bucaram, cuyo regreso a Ecuador desde Panam¨¢ fue uno de los detonantes de la crisis, declar¨® ayer mediante conversaci¨®n telef¨®nica que se mantiene en la clandestinidad y que han intentado matarlo, informa Efe. "Estamos intentando preservar mi vida y me mantengo clandestino en mi pa¨ªs", se?al¨® Bucaram.