Faltan letras

Al art¨ªculo del profesor Bernab¨¦ L¨®pez Garc¨ªa sobre la "entidad saharaui" le faltan cinco letras. Un trabajo esclarecedor que, por momentos, parece apuntar hacia el reconocimiento del derecho de los saharauis a decidir su destino, pero que por desgracia se queda en la in¨²til soluci¨®n auton¨®mica.

No s¨®lo la inmensa mayor¨ªa de los saharauis (y de los espa?oles, dicho sea de paso), sino tambi¨¦n la ONU en incontables resoluciones (v¨¦ase el ¨²ltimo documento del propio Kofi Annan), reclaman el refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n. Que el profesor no mencione una sola vez el derecho internacional ni las resoluciones de la ONU es preocupante, pero es tambi¨¦n in¨²til. Como ¨¦l mismo reconoce, los saharauis no se han rendido en 30 a?os, y la "apertura" marroqu¨ª est¨¢ permitiendo que en el S¨¢hara ocupado arranque una prostesta cada vez m¨¢s amplia, y que la verdad escondida aparezca cada vez m¨¢s en los medios de comunicaci¨®n marroqu¨ª. Prohibir y reprimir, como el caso de Lmrabet, no conduce sino a una ampliaci¨®n de la onda expansiva. No atender a la tenacidad, la paciencia y la ausencia de violencia de los saharauis en la lucha por su derecho a decidir es abocar el conflicto a la Intifada, a Marruecos a la par¨¢lisis y la pobreza, y a Espa?a a la verg¨¹enza de su incapacidad para resolver un conflicto que ella misma cre¨®. Al trabajo de L¨®pez le faltan cinco letras: las que van de "entidad" a "identidad", y las que van de cero a ONU.