Los misterios de una vida
S¨¢ndor M¨¢rai no es la ¨²nica sorpresa agradable que las letras h¨²ngaras han reservado a los lectores espa?oles en los ¨²ltimos tiempos. Adem¨¢s de los autores consagrados, como P¨¦ter Esterh¨¢zy, uno de los grandes novelistas europeos, o de los que todav¨ªa no han llegado al gran p¨²blico, como Attila Bartis (traducido por Acantilado), pero cuyas propuestas literarias surgen llenas de fuerza, est¨¢ Magda Szab¨®, escritora de 87 a?os que el a?o pasado gan¨® en Francia el Premio Femina a la mejor obra extranjera con La puerta, que acaba de editar Mondadori en una traducci¨®n de Marta Koml¨®si.
Szab¨®, la decana de la literatura magiar, es una escritora muy conocida y respetada en Hungr¨ªa, que comenz¨® su carrera literaria poco despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial, pero que interrumpi¨® la publicaci¨®n de sus obras hasta los sesenta, despu¨¦s de los a?os m¨¢s duros del comunismo h¨²ngaro. Nacida en 1917 en Debrecen, en el este del pa¨ªs, en una familia protestante, burguesa e ilustrada, su vida parece sacada de una novela de M¨¢rai o de una pel¨ªcula de Istv¨¢n Szab¨®: naci¨® cuando se derrumbaba un imperio, y todo un mundo centroeuropeo, y sufri¨® los totalitarismos del siglo XX en un pa¨ªs especialmente marcado por la tragedia, que s¨®lo comenz¨® a recuperar una cierta normalidad con el llamado socialismo gullash, la t¨ªmida apertura que sigui¨® a la salvaje represi¨®n por los tanques sovi¨¦ticos de la revoluci¨®n de 1956.
LA PUERTA
Magda Szab¨®
Traducci¨®n de Marta Koml¨®si
Mondadori. Barcelona, 2005
317 p¨¢ginas. 19 euros
En su obra se siente constantemente como tel¨®n de fondo ese terrible peso de la historia en la vida cotidiana. La puerta, una novela autobiogr¨¢fica tan extra?a como fascinante, no es una excepci¨®n. Publicada en 1987, dos a?os antes de la ca¨ªda del comunismo en Europa, fue primero traducida al alem¨¢n y al ingl¨¦s, aunque alcanz¨® su gran ¨¦xito internacional hace dos a?os en Francia. Comienza desvelando lo que parece su final -"es necesario que declare de una vez por todas que yo mat¨¦ a Emerenc. Yo quer¨ªa salvarla, no destruirla, pero eso no cambia nada", escribe la autora en el pr¨®logo- y que narra la amistad, durante 20 a?os desde los sesenta, entre la propia Szab¨® y su criada Emerenc, un personaje misterioso que no deja que nadie cruce el umbral de la puerta de su casa.
La relaci¨®n entre las dos mu
jeres se hace cada m¨¢s densa, muchas veces dif¨ªcil, y profunda hasta que la escritora va poco a poco conociendo los secretos que Emerenc, una mujer en apariencia ruda, casi salvaje, oculta. Como ocurre con todas las grandes novelas, intentar resumir su contenido en su trama es un esfuerzo in¨²til: La puerta es un libro sobre la amistad por encima de las barreras sociales, es una obra que oculta una reflexi¨®n sobre el dolor del siglo XX y sobre el misterio que encierra cualquier vida. Es una novela publicada cuando su autora ten¨ªa casi 70 a?os y esta veteran¨ªa se nota en el enorme oficio y sabidur¨ªa que encierra su escritura: en su capacidad para hacer avanzar la narraci¨®n sin que se noten sus necesarias paradas, ni sus costuras, en su habilidad para ir desvelando poco a poco, sin trucos, sin abrumar al lector, los muchos secretos que oculta el libro.
Estar¨ªa muy bien que,
al igual que ocurri¨® con El ¨²ltimo encuentro, de S¨¢ndor M¨¢rai, este libro fuese el principio de una gran amistad entre los lectores espa?oles y la veterana novelista. La ampliaci¨®n de la Uni¨®n Europea del 1 de mayo de 2004, con la entrada de diez pa¨ªses, entre ellos Hungr¨ªa, desvel¨® hasta qu¨¦ punto la sociedad espa?ola ha estado desvinculada de los pa¨ªses del este y del centro de Europa. La proliferaci¨®n y ¨¦xito en los ¨²ltimos a?os de institutos Cervantes en ese viejo rinc¨®n del continente demuestra que el desinter¨¦s no es, en absoluto, compartido. Los avances pol¨ªticos en una UE de 25 pa¨ªses, que muy pronto ser¨¢n 27, requieren no s¨®lo intensificar los contactos econ¨®micos, sino tambi¨¦n los intercambios culturales. Llenar vac¨ªos, como la ausencia de traducciones de una novelista tan importante como Magda Szab¨®, es siempre un paso adelante.
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