Mortal, sin tratamiento y de origen desconocido

El virus Marburg recibe su nombre por la ciudad alemana en que se detect¨® por primera vez en 1967, pero su origen est¨¢ en ?frica. Pertenece a la misma familia que el ?bola (los filovirus, llamados as¨ª por su forma alargada) y tiene un proceso de evoluci¨®n muy r¨¢pido que hace dif¨ªcil su extensi¨®n (la persona infectada se encuentra tan mal que no puede viajar, y hasta un 90% fallece en menos de una semana).

Las principales caracter¨ªsticas de la infecci¨®n se exponen a continuaci¨®n.

- Origen. Los expertos creen que el virus se transmite a las personas a partir de alg¨²n animal que todav¨ªa no ha sido identificado. ?ste debe ser un animal inmune al virus o en el que sus efectos sean lentos. Otra caracter¨ªstica es que debe entrar en contacto con el hombre, como alimento probablemente.

Ello explicar¨ªa la aparici¨®n de brotes aislados (1967 en Europa, 1975 en Sur¨¢frica

1998 en Congo, 1980 en Kenia o el de este a?o en Angola). En el primer caso se identific¨® que la infecci¨®n hab¨ªa sido transmitida por un tipo de mono africano, el cercopiteco verde (Cercopithecus aethiops), enviado para experimentaci¨®n a varios laboratorios europeos (el de la ciudad alemana de Marburg, pero tambi¨¦n a Francfort y Belgrado).

La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) todav¨ªa no ha conseguido identificar la fuente del actual brote de Angola. Tampoco se ha podido establecer qu¨¦ partes del mundo son end¨¦micas -se barajan regiones centroafricanas desde la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo (antiguo Zaire) hasta Kenia-.

Los investigadores han probado distintos animales y entornos (cuevas, granjas, selvas, estepas), pero no han conseguido documentar una transmisi¨®n.

- Identificaci¨®n. Para confirmar un caso de Marburg puede aislarse el virus o identificar su material gen¨¦tico (en este caso es ARN, en vez de ADN, como en la mayor¨ªa de los seres vivos). Basta una muestra de tejido o fluidos de una persona enferma para detectarlo.

- Contagio. El virus se transmite por las diminutas gotas contenidas en la respiraci¨®n, por objetos que hayan estado en contacto con enfermos, por sangre u otros fluidos humanos. Por eso las v¨ªctimas suelen ser, primero, los familiares que cuidan de los enfermos. Tambi¨¦n es habitual su expansi¨®n entre los sanitarios.

- S¨ªntomas. El Marburg se manifiesta mediante fiebre, tiritonas y dolor de cabeza, como muchas otras infecciones habituales en el ?frica subsahariana (malaria, fiebres tifoideas), lo que dificulta su diagn¨®stico precoz.

Estos s¨ªntomas aparecen despu¨¦s de un periodo de incubaci¨®n de entre cinco y diez d¨ªas. A partir de los cinco d¨ªas del comienzo de la fiebre la situaci¨®n se precipita: aparecen manchas rojizas en la piel (se?al de que los vasos empiezan a romperse). A ello le siguen n¨¢useas, v¨®mitos, dolores de pecho y garganta y de est¨®mago. Al final se produce un fallo multiorg¨¢nico (dejan de funcionar el ri?¨®n, el p¨¢ncreas, el est¨®mago y los ri?ones).

- Mortalidad. La tasa de mortalidad ha variado entre el 25% y el 98% seg¨²n los brotes registrados. El caso de Angola es especialmente virulento. Los ¨²ltimos datos del Ministerio de Sanidad del pa¨ªs que recoge la Organizaci¨®n Mundial de la Salud indican que de 266 enfermos han fallecido 244 (un 91%). El anterior gran brote de la infecci¨®n, ocurrido en la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo entre 1988 y 2000, tuvo una tasa de fallecimientos del 88%, seg¨²n la OMS.

- Tratamiento. La infecci¨®n no tiene vacuna ni tratamiento espec¨ªfico. El ¨²nico remedio posible consiste en aliviar los s¨ªntomas: bajar la fiebre, dar calmantes para el dolor y rehidratar para compensar la p¨¦rdida de l¨ªquidos. Tambi¨¦n puede hacer falta usar alimentaci¨®n asistida. La r¨¢pida evoluci¨®n de la enfermedad es, a su vez, motivo de alarma, lo que dificulta a¨²n m¨¢s su control (la familia abandona a los muertos, oculta los casos).

- Prevenci¨®n. La falta de conocimiento sobre la enfermedad y su origen hace muy dif¨ªcil prevenir que el virus pase de los animales al ser humano. Una vez que se ha detectado y confirmado un caso,la ¨²nica posibilidad es utilizar un aislamiento hospitalario total (mascarillas, guantes, botas de pl¨¢stico, cubiertos desechables, circuito de sucio separado para la ropa de cama y destrucci¨®n del material y de las deposiciones).

- Secuelas. La recuperaci¨®n puede ser larga e ir acompa?ada de inflamaci¨®n testicular, hepatitis u otros da?os internos en m¨¦dula, test¨ªculos o gl¨¢ndulas, entre otros.