Una financiaci¨®n, una pobre reforma
El Pa¨ªs Valenciano sufre un gran d¨¦ficit en su financiaci¨®n. Se trata de una cuesti¨®n reconocida incluso por los ex presidentes de la Generalitat Valenciana en las comparecencias de la Ponencia de Reforma del Estatuto de Autonom¨ªa: all¨ª se afirm¨® que, hist¨®ricamente, los sucesivos gobiernos valencianos han considerado prioritario disponer de competencias, pero dejando en un segundo plano los recursos econ¨®micos para ejercerlas.
Los datos corroboran con claridad esta afirmaci¨®n. Si observamos la d¨¦cada entre 1990 y 1999, en la cual, a nivel competencial, la Comunidad estaba asimilada y ten¨ªa competencias parecidas a las CC AA que hab¨ªan accedido por el art¨ªculo 151 de la Constituci¨®n (Andaluc¨ªa, Canarias, Catalu?a y Galicia) la diferencia de financiaci¨®n entre nuestro Pa¨ªs y estas CC AA "asimiladas al art¨ªculo 151" fue creciendo desde las 13.988 pesetas / c¨¢pita en 1990 hasta las 50.528 pesetas / c¨¢pita en 1999. Y obviaremos la comparaci¨®n de nuestra financiaci¨®n con las Comunidades Forales porque las diferencias son de esc¨¢ndalo en contra nuestra a pesar de que tenemos un nivel competencial similar, si exceptuamos la polic¨ªa auton¨®mica. Si nos quejamos, con raz¨®n, de nuestros d¨¦ficits en educaci¨®n, sanidad, servicios sociales respecto al resto de CC AA, debemos saber que el origen est¨¢, adem¨¢s de en una mala gesti¨®n, en una p¨¦sima financiaci¨®n. Y hasta ahora no se ha dado con la f¨®rmula adecuada para corregirlo.
A finales de la d¨¦cada de los noventa fue concret¨¢ndose la c¨¦lebre propuesta de financiaci¨®n del ex presidente de la Generalitat, el llamado "modelo Zaplana", con el que poco menos que ¨ªbamos a atar los perros con longanizas. Pero al margen de la demagogia y la pirotecnia habitual en el personaje, hay que analizar los n¨²meros oficiales en un momento en que las competencias de educaci¨®n y de sanidad se han generalizado a todas las CC AA de Espa?a. Los n¨²meros son para echarse a temblar y cualquiera puede acceder a ellos solo consultando la p¨¢gina web del ministerio de Administraciones P¨²blicas. Podemos ver que, en el a?o 2004, el ¨²ltimo disponible, las CC AA de r¨¦gimen com¨²n han disfrutado de una financiaci¨®n per capita de 2.784 euros. Las de r¨¦gimen foral, que tienen financiaci¨®n por concierto econ¨®mico, han tenido una financiaci¨®n de 3.605 euros. ?Y el Pa¨ªs Valenciano? Pues una rid¨ªcula financiaci¨®n de 2.324 euros per capita, la ¨²ltima de todas las CC AA (incluidas Ceuta y Melilla) si exceptuamos a las Islas Baleares, que est¨¢n algo peor que nosotros. Si miramos los n¨²meros del a?o anterior, nuestra financiaci¨®n es a¨²n comparativamente peor.
?Qu¨¦ quiere decir esto? Hagamos algunos n¨²meros sencillos. El diferencial negativo por capita de los valencianos respecto al espa?olito medio es de 460 euros en 2004. Si lo comparamos con las CC AA forales asciende a 1.279 euros, m¨¢s de la mitad de lo que percibimos los valencianos. En nuestro Pa¨ªs, seg¨²n el padr¨®n municipal de 2004 vivimos 4.543.304 personas. Una sencilla multiplicaci¨®n nos da un d¨¦ficit global de financiaci¨®n de, aproximadamente, 2.090 millones de euros respecto a cualquier comunidad aut¨®noma espa?ola de promedio. Conviene compararlo con el presupuesto de la Generalidad. En 2005 ascendi¨® a 10.552 millones de euros, lo que convierte nuestro d¨¦ficit en el 19,8% del total del presupuesto valenciano. Si nos atrevemos a compararlo con las CC AA forales, Navarra y el Pa¨ªs Vasco, la diferencia es vergonzosa: Supone m¨¢s de la mitad de todo el presupuesto de la Generalitat.
La conclusi¨®n en estos momentos de reforma estatutaria es evidente: quien no se plantee como m¨¢xima prioridad el tema de la financiaci¨®n en la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa del Pa¨ªs Valenciano est¨¢ olvidando uno de los primeros problemas de nuestro pa¨ªs, por no decir claramente el primero. Tenemos la mayor deuda per capita de toda Espa?a, la situaci¨®n financiera de la Generalitat es tan cr¨ªtica que son continuos los rumores de que tiene que pagar hasta sus n¨®minas con la ayuda de centros financieros de grandes centros comerciales. Los niveles de calidad de los grandes servicios p¨²blicos (camas de hospital por mil habitantes, centros educativos p¨²blicos, residencias de tercera edad etc.) est¨¢n entre los peores de todas las CC AA espa?olas.
Ante esta grave realidad, el Sr. Camps, como presidente del PP valenciano, se niega a que tengamos Agencia Tributaria Valenciana mientras que su compa?ero de filas catal¨¢n, el Sr. Piqu¨¦, lo acepta con normalidad. ?Por qu¨¦ Rajoy discrimina a los valencianos respecto a los catalanes, por qu¨¦ se lo permite al PP catal¨¢n y no lo permite al PP valenciano? ?O es que Camps es tan timorato que no se atreve a plantear lo que hace su hom¨®logo catal¨¢n a pesar de ser el primer perjudicado por ello como m¨¢ximo responsable del Consell? ?No ser¨¢ que el "regionalismo bien entendido" hace a Camps incapaz de afrontar adecuadamente el problema?
Por cierto: los andaluces, que tienen una financiaci¨®n auton¨®mica considerablemente mayor que la valenciana (del orden de unos 600 euros superior a la nuestra), han reivindicado y conseguido que se les reconozca una deuda hist¨®rica por la mala financiaci¨®n de sus competencias. Los catalanes, que est¨¢n algo mejor financiados que nosotros, han iniciado una reivindicaci¨®n similar. ?El PP y el PSPV se han planteado alguna reivindicaci¨®n similar de nuestra deuda hist¨®rica frente al estado? Hasta el momento no hemos o¨ªdo nada al respecto. Mucho nos tememos que su sumisi¨®n frente al gobierno central les impida similar osad¨ªa. Y ya pagaremos la deuda de la Generalitat, de 9.345 millones de euros, entre todos. Sin financiaci¨®n, pobre reforma. "?Ser¨¤ per diners?", que decimos aqu¨ª.
Joan Rib¨® es S¨ªndic del Grupo Parlamentario Esquerra Unida, Verds, Entesa.
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