No a la prisi¨®n

La propuesta de construir una prisi¨®n en la Segarra-Anoia es un hecho desproporcionado y fuera de lugar. Si el Gobierno pensara en el territorio y en el pa¨ªs, en lugar de pensar en los votos, est¨¢ claro que esta prisi¨®n no se construir¨ªa en estas comarcas. Ni el mundo rural tiene que sufrir las consecuencias de un problema generado, en su mayor¨ªa, por el entorno urbano, ni es razonable una prisi¨®n de 750 reclusos al lado de pueblos de menos de 100 habitantes.

Sin embargo, el tripartito quiere ubicar la prisi¨®n en el mundo rural porque el coste en votos que le supondr¨¢ ser¨¢ m¨ªnimo, y eso es lo que le interesa y no el bien y la proyecci¨®n de estas comarcas.

Si en las grandes capitales catalanas y sus cinturones industriales es donde los ciudadanos tienen m¨¢s servicios (cines, teatros, cl¨ªnicas, centros escolares, universidades, bibliotecas, etc¨¦tera), en consecuencia, tendr¨ªan que asumir las prisiones y no enviarlas al mundo rural.

Adem¨¢s, una prisi¨®n pr¨®xima a una zona industrial o similar no perjudica al entorno ni la est¨¦tica del paisaje, pero si se construye una prisi¨®n entre campos y peque?os pueblos donde se intenta potenciar el turismo rural, nos lo estamos cargando todo, y no se ad¨®nde podremos ir cuando se busque un poco de paz y tranquilidad.