Los socialistas europeos se vuelcan en Par¨ªs a favor del 's¨ª' a la Constituci¨®n
Josep Borrell: "No deis una patada al Gobierno franc¨¦s en el trasero de Europa"
En el Circo de Invierno, en Par¨ªs, la flor y nata del socialismo europeo acudi¨® ayer en ayuda del s¨ª al Tratado Constitucional que -a tenor de todos los sondeos- depende de c¨®mo se pronuncien los votantes socialistas franceses en el refer¨¦ndum que se celebrar¨¢ dentro de 11 d¨ªas. El presidente del Parlamento Europeo, el espa?ol Josep Borrell, que abri¨® el mitin, asegur¨® que un s¨ª franc¨¦s crear¨¢ una "ola de entusiasmo" en toda Europa. Antes hab¨ªa acusado de "narcisismo" a quienes piensan votar no. La presentaci¨®n corri¨® a cargo del alcalde de la capital francesa, Bertrand Delano?.
En el Circo de Invierno, en Par¨ªs, la flor y nata del socialismo europeo acudi¨® ayer en ayuda del s¨ª al Tratado Constitucional que -a tenor de todos los sondeos- depende de c¨®mo se pronuncien los votantes socialistas franceses en el refer¨¦ndum que se celebrar¨¢ dentro de 11 d¨ªas. El presidente del Parlamento Europeo, el espa?ol Josep Borrell, que abri¨® el mitin, asegur¨® que un s¨ª franc¨¦s crear¨¢ una "ola de entusiasmo" en toda Europa. Antes hab¨ªa acusado de "narcisismo" a quienes piensan votar no. La presentaci¨®n corri¨® a cargo del alcalde de la capital francesa, Bertrand Delano?.
El alcalde de Par¨ªs aprovech¨® el mitin para recordar lo que muchos franceses desconocen: que en la liberaci¨®n de Par¨ªs, en 1945, tomaron parte "republicanos espa?oles" encuadrados en la divisi¨®n Leclercq.
Junto a Borrell estaban, entre otros, el presidente del Partido Socialista Europeo, el dan¨¦s Poul Nyrup Rasmussen; el holand¨¦s Ruud Koole; el finland¨¦s Paavo Lipponen; el griego George Papandreu; el primer ministro checo Jiri Parubek; el secretario general de la Confederaci¨®n europea de sindicatos, John Monks; el portugu¨¦s Mario Soares, la vicepresidenta de la Comisi¨®n Europea Margot Wallstr?m e, incluso, el ministro de Exteriores alem¨¢n, Joschka Fischer, que no milita en las filas socialistas. Falt¨®, finalmente, el ex presidente del Gobierno espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, que se encontraba enfermo de gripe. En su lugar, su esposa, Carmen Romero, pronunci¨® unas palabras.
"La cuesti¨®n es que no haya un mundo bipolar controlado por Estados Unidos y China", dijo Borrell. Para impedir esa "nueva bipolaridad" y conseguir que la Uni¨®n Europea se convierta en un "actor pol¨ªtico global", seg¨²n Borrell, es necesario disponer del Tratado Constitucional. "No teng¨¢is miedo del fontanero polaco", a?adi¨®, "antes ten¨ªais miedo del alba?il portugu¨¦s".
Borrell reconoci¨® la "vitalidad democr¨¢tica" que subyace en el debate franc¨¦s, pero dijo sentirse "perplejo". "No deis una patada al Gobierno franc¨¦s en el trasero de Europa y de todos los europeos", pidi¨®.
Antes, Delano? hab¨ªa agradecido su presencia al millar de militantes socialistas "fieles a su partido". Y en lo que claramente fue un mensaje hacia quienes desde el PS hacen campa?a por el no, como Laurent Fabius, y de paso est¨¢n desgarrando el partido, una enorme ovaci¨®n salud¨® la entrada en el recinto del primer secretario del Partido Socialista, Fran?ois Hollande, y de su compa?era Segolene Royal, presidenta de la regi¨®n de Poitou Charentes.
Junto a Hollande se encontraban el ex presidente de la Comisi¨®n Europea, Jacques Delors y otras figuran importantes del PS como Jack Lang, Pierre Moscovici o Dominique Strauss-Kahn. Faltaba el ex primer ministro Lionel Jospin, que hoy participar¨¢ en un gran mitin en Nantes.
Aunque no acudi¨® al mitin del Circo de Invierno, la presidenta letona, Vaira Vike-Freiberga, tambi¨¦n se ha sumado a la campa?a del s¨ª. Ayer visit¨® una escuela en Lille y explic¨® a los j¨®venes alumnos la historia de su pa¨ªs, c¨®mo fue invadido por los rusos, luego por los nazis y de nuevo por los sovi¨¦ticos, c¨®mo Europa era el sue?o de la libertad y por qu¨¦ la Uni¨®n Europea es su garant¨ªa.
A diez d¨ªas de la cita con las urnas, el claro repunte del no que han mostrado las ¨²ltimas encuestas, despu¨¦s de que el s¨ª hubiera remontado en los sondeos hasta llegar a situarse en cabeza, ha creado una cierta sensaci¨®n de pesimismo entre los partidarios del Tratado Constitucional. La campa?a se ha endurecido, generando una ristra de ataques personales, incluso entre quienes defienden la misma opci¨®n. Es el caso de la andanada lanzada ayer por Hollande contra el primer ministro Jean Pierre Raffarin, convertido en una especie de gafe para los partidarios del s¨ª. "La suerte de Raffarin est¨¢ echada", dijo el l¨ªder socialista, en un intento de impedir que siga ahuyentando a los votantes de izquierdas. Raffarin, que debi¨® someterse a una operaci¨®n de la ves¨ªcula biliar hace diez d¨ªas, justo cuando el s¨ª remontaba, reapareci¨® el martes por la noche en una entrevista en televisi¨®n agitando la tesis catastrofista. Si se impone el no, dijo, "habr¨¢ dos crisis, una pol¨ªtica y otra econ¨®mica".
Le Pen, por su parte, que mantiene un perfil bastante bajo en esta campa?a, aunque ser¨ªa uno de los mayores beneficiarios de una victoria del no, dedic¨® sus dardos al presidente Jacques Chirac. Raffarin, dijo, "ser¨¢ el chivo expiatorio, se le cazar¨¢ en el desierto y ser¨¢ el responsable de todo". Chirac, a?adi¨®, "nunca ha dudado en sacrificar a sus amigos y sus apoyos cuando ha sido necesario".
La dial¨¦ctica m¨¢s dura, sin embargo, fue la que utiliz¨® el secretario general de la gubernamental UMP, Nicolas Sarkozy, contra el autoproclamado "jefe del no", Laurent Fabius, de quien dijo que frecuenta extra?as compa?¨ªas: desde la comunista Marie-George Buffet o los l¨ªderes trotskistas, hasta el ultraderechista Jean-Marie Le Pen y el soberanista de derechas Philippe de Villiers. Sarkozy, acus¨® a Fabius de "hacernos pagar a todos los franceses la factura" de sus maniobras para hacerse con el poder en el Partido Socialista.
'Guerra civil' en el PS
El futuro del Partido Socialista franc¨¦s cuelga del resultado del refer¨¦ndum sobre la Constituci¨®n Europea. Tras el gran fracaso de la elecci¨®n presidencial de 2002, cuando Lionel Jospin qued¨® fuera de la segunda vuelta a favor del ultraderechista Jean-Marie Le Pen, los ¨¦xitos electorales de los ¨²ltimos a?os, concretamente la gran victoria en las elecciones regionales del a?o pasado, ni han tra¨ªdo la tranquilidad ni han servido para cimentar el liderazgo del primer secretario Fran?ois Hollande.
La cita europea ha servido para que el centenario partido se desgarre, una vez m¨¢s, entre socialdem¨®cratas y estatalistas y tambi¨¦n para que el brillante, ambicioso y arrogante Laurent Fabius, supuesto n¨²mero dos del partido, intente una vez m¨¢s hacerse con el poder, aunque para ello ahora tenga que escorarlo hacia la izquierda, una extra?a opci¨®n para un pol¨ªtico que, si algo ha sido en el seno de la izquierda francesa, es precisamente socialdem¨®crata. Fabius fue quien, como primer ministro, negoci¨® Europa tal como es hoy, aseguran sus compa?eros de partido.
En oto?o Laurent Fabius forz¨® la votaci¨®n interna sobre la postura a tomar frente a la Constituci¨®n Europea. Perdi¨® por un amplio margen, pero no se dio por vencido. Fabius dej¨® que otros, como el antiguo secretario general Henri Emmanuelli calentaran el campo del no mientras ¨¦l se hac¨ªa invisible dando un curso en EE UU, y regresaba a tiempo para proclamarse "jefe del no" y pedir un debate con Jacques Chirac.
Algunos analistas apuntan que la crisis socialista no es m¨¢s que la repetici¨®n de la pugna por la sucesi¨®n de Fran?ois Mitterrand que protagoniz¨® y perdi¨® Fabius frente a Jospin. En cualquier caso, el te¨®rico n¨²mero dos socialista ya ha conseguido pulverizar la credibilidad de Hollande al desafiarle. Ayer ya ense?¨® algunas de sus cartas: se trata de intentar una unificaci¨®n de la izquierda. El problema es que la c¨²pula del partido no quiere ni o¨ªr hablar de la posibilidad de negociar un programa conjunto de la izquierda.
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