Amos Gitai y Win Wenders pierden frescura en sus nuevas pel¨ªculas

El israel¨ª Amos Gitai con Free zone, y el alem¨¢n Win Wenders con Don't come knocking no han estado a la altura de lo que se esperaba de ellos. Gitai ha realizado una pel¨ªcula confusa y precipitada, mientras que Wenders vuelve sobre las huellas est¨¦ticas de Paris, Texas, con la que gan¨® la Palma de Oro hace 20 a?os, pero con una historia, escrita en colaboraci¨®n con Sam Shepard, de menor calado.

Ambos directores han trabajado deprisa. Amos Gitai termin¨® de escribir el gui¨®n de Free zone a principios de enero, comenz¨® a rodar en febrero, y dos meses despu¨¦s la ten¨ªa lista para Cannes. Todo un r¨¦cord de velocidad, de lo que la pel¨ªcula se resiente. Una joven norteamericana (Natalie Portman) llora en el interior de un taxi conducido por una israel¨ª (Hanna Laszlo) que quiere marcharse de Jerusal¨¦n para llegar hasta la zona franca de Jordania y encontrarse all¨ª con un socio de su marido, que les debe dinero: la chica americana, reci¨¦n abandonada por su novio, decide acompa?arla. All¨ª se encuentran con una mujer palestina (Hiam Abbass) por la que se enteran de que el dinero ha desaparecido. Tras algunas peripecias, la americana huye en el punto fronterizo, dejando a las dos mujeres, que discuten acaloradamente y sin entenderse mientras duran los largos t¨ªtulos finales. En la pel¨ªcula se oye una canci¨®n, cuyo resumen dice: "?Hasta cu¨¢ndo durar¨¢ este ciclo infernal? Del opresor y el oprimido, del verdugo y la v¨ªctima, hasta cu¨¢ndo esta locura". Si la intenci¨®n de Gitai era ilustrar este mensaje, quiz¨¢ hubiera bastado con recitar la canci¨®n; su pel¨ªcula no ayuda a entenderla.

Wenders cuenta una historia de sentimientos con un tono narrativo g¨¦lido que se hace ajeno

El aburrido viaje en coche de las mujeres est¨¢ ilustrado con im¨¢genes del exterior, un tanto a la manera, no menos plana, de Abbas Kiarostami, y con recuerdos de algunos momentos de la vida amorosa de la chica americana, especialmente de la visita de la madre de su novio (Carmen Maura), que no se sabe qu¨¦ a?ade a la historia.

Win Wenders es, desde luego, otra cosa. Aunque rodada en s¨®lo 36 d¨ªas, su pel¨ªcula tiene empaque visual, y la estupenda presencia de Sam Shepard y de Jessica Lange, lo que siempre es de agradecer. Sin embargo, a pesar de contar una historia de sentimientos, el tono narrativo es g¨¦lido y se hace ajeno. Un viejo actor abandona el rodaje de un western a lomos de un caballo, da tumbos por diversas poblaciones, visita a su madre (Eva Marie Saint), que se sorprende de que ¨¦l no sepa que hace unos 30 a?os dej¨® embarazada a una novia, m¨¢s o menos lo que le ocurre a Bill Murray en Broken flowers, la pel¨ªcula de Jim Jarmusch, aunque sin su tono de comedia. Wenders no tiene su sentido del humor. El actor de esta historia encuentra f¨¢cilmente al hijo desconocido, que le recibe de u?as, y de paso se encuentra con una hija cuya existencia tambi¨¦n ignoraba. Wenders riza el rizo sin emocionar.

El pasado que vuelve es tema com¨²n a varias pel¨ªculas del festival, desde la japonesa Bashing, a las de Atom Egoyan (Where the truth lies), David Cronenberg (Una historia de violencia), la excelente de Michael Haneke (Cach¨¦)... por hablar s¨®lo de las presentadas a concurso. Algo querr¨¢ significar ese af¨¢n colectivo por clarificar el ayer, loable empe?o que ser¨ªa m¨¢s trascendente si las pel¨ªculas tuviesen mayor enjundia. La de Wenders, que fue aplaudida, parece a ratos una copia de s¨ª mismo, y como toda copia, tiene algo de caricatura.

Otro tema que parece interesar estos d¨ªas a productores y directores es el f¨²tbol. A juzgar por lo visto y anunciado en el mercado de Cannes se avecina una notable goleada de pel¨ªculas. El legendario Pel¨¦ ha estado en el festival promocionando Pel¨¦ forever, y hoy llega Maradona para hacer lo propio con la suya. El brasile?o Bruno Barreto ha presentado Casamiento de Romeo y Julieta, donde las cuitas entre las familias de los enamorados se deben a que prefieren equipos contrarios. Se ha visto igualmente El partido de sus vidas, del norteamericano David Anspaugh, sobre la Copa del Mundo de 1950. Se anuncia el estreno de Gol, del londinense Danny Cannon, con Diego Luna como protagonista, y con la participaci¨®n entre otros, de Beckham, Ra¨²l, Zidane... Sobre este ¨²ltimo se est¨¢ rodando Zidane, un retrato del siglo XXI, mientras contin¨²a la filmaci¨®n en distintos lugares del mundo de Real, cuyo hilo conductor es la pasi¨®n de todos por el Real Madrid. Enseguida va a estrenarse en Espa?a Galatasaray contra el Depor, que se vio en el pasado festival de Berl¨ªn... Habr¨¢ que ir entren¨¢ndose.