Tommy Lee Jones debuta como director con un viaje por la frontera mexicana

La ¨²ltima obra del realizador Hou Hsiao Hsien, Tres ¨¦pocas, dio ayer fin a la competici¨®n oficial. Es la sexta vez que el director taiwan¨¦s compite en el Festival de Cannes. En 1993 obtuvo el premio del jurado por El maestro de marionetas, su pel¨ªcula m¨¢s conocida. Tres ¨¦pocas relata de forma tan bella como cr¨ªptica tres historias de amor situadas en momentos distintos de la historia de Taiwan. Por su parte, el coreano Hong Sangsoo present¨® a concurso Cuento de cine, exhibida casi clandestinamente. La sorpresa de la jornada fue la primera pel¨ªcula dirigida por Tommy Lee Jones, Los tres entierros de Melquiades Estrada. Esta noche se conocer¨¢ el palmar¨¦s del jurado, que preside Emir Kusturica.

Hou Hsiao Hsien, precursor del llamado nuevo cine taiwan¨¦s, viene dando cuenta en su cine de la evoluci¨®n hist¨®rica de su pa¨ªs, de su riqueza econ¨®mica y de su pobreza cultural, en la medida en que se lo permiten las limitaciones impuestas por la censura. Compone sus pel¨ªculas con parsimonia y la sensibilidad de un artista que bucea en un lenguaje propio, no siempre inteligible.

Tres ¨¦pocas cuenta otras tantas historias de amor, condicionada cada una por la moral de su tiempo: 1911, 1966 y 2005, interpretadas por la misma pareja, Chang Chen y la fascinante actriz Shu Qi. Es una pel¨ªcula bella, a ratos morosa, que revela el universo personal de un creador cuyos matices no calan f¨¢cilmente en el p¨²blico occidental. Muchos espectadores fueron desertando de la sala, lo que anim¨® a aplaudir con m¨¢s ¨ªmpetu a cuantos permanecieron hasta el final.

El pase de la pel¨ªcula coreana Cuento de cine parec¨ªa producto de una broma. Se presentaba en sesi¨®n ¨²nica para p¨²blico y cr¨ªtica, y era obvio que no todos iban a poder entrar en la sala; como si el propio festival estuviera interesado en que la pel¨ªcula pasara inadvertida. Se trata de una historia confus¨ªsima sobre un joven suicida que convence a una amiga para que le acompa?e en ese trance, historia que de sopet¨®n salta a otra en la que un muchacho acaba de ver la pel¨ªcula que cuenta ese suicidio y reconoce en la calle a la actriz que lo interpreta. Los espectadores que hab¨ªan logrado una butaca estaban perplejos, aunque en realidad no hab¨ªa motivo para tal cosa.

En este festival es habitual que tengan prioridad las pel¨ªculas coproducidas por Francia o que tienen el apoyo de una gran distribuidora. Cuento de cine est¨¢ coproducida por el potente Marin Karmitz, cineasta que en los a?os setenta dirig¨ªa pel¨ªculas pol¨ªticamente combativas y que con el tiempo se ha transformado en un activo y respetable distribuidor y productor al que dif¨ªcilmente el festival podr¨ªa negarle nada. La mayor parte de las pel¨ªculas presentadas en competici¨®n corresponden a coproducciones con Francia, incluso la notable Los tres entierros de Melquiades Estrada, primera pel¨ªcula dirigida por el actor Tommy Lee Jones, que fue una grata sorpresa.

Se trata de un gui¨®n de Guillermo Arriaga (Amores perros, 21 gramos) que retoma cierto esp¨ªritu del cine de Sam Peckinpah. En una zona fronteriza entre M¨¦xico y EE UU conviven polic¨ªas de frontera y mexicanos m¨¢s o menos legales. Por error, accidente, o simplemente porque se trata de un polic¨ªa racista y violento, el reci¨¦n llegado Barry Pepper mata de un disparo al Melquiades del t¨ªtulo, hombre honesto que, seg¨²n Arriaga, "representa a todos los mexicanos que atraviesan la frontera para asegurarse el pan".

Aun cuando las autoridades gringas quieren echar tierra al asunto, un amigo de Melquiades (Tommy Lee Jones) exige que se haga justicia. Obliga al polic¨ªa asesino a desenterrar el cad¨¢ver y a ayudarle a transportarlo hasta el pueblito en que viv¨ªa el difunto. Al llegar al lugar, ambos hombres descubrir¨¢n que el para¨ªso que Melquiades dec¨ªa haber habitado no existe; ni la familia que dec¨ªa tener. Eran simplemente sus sue?os.

Los tres entierros... es una pel¨ªcula sencilla, sin relieves, y a ratos ingenua, pero precisamente por su falta de pretensiones art¨ªsticas signific¨® un respiro en la recta final del festival. Bonita historia de lealtad que se sigue sin esfuerzo, y que refresc¨® el ambiente. Sin embargo, no figurar¨¢ en el palmar¨¦s. Tampoco deber¨ªa. Con sus enormes altibajos, se han visto en Cannes algunas pel¨ªculas importantes.