Ser padres
Somos padres de una ni?a de tres a?os, y como muchos otros padres de la Comunidad de Madrid, estamos estos d¨ªas inmersos en el proceso para obtener plaza en un colegio p¨²blico para el curso 2005-2006. En las primeras listas publicadas, nuestra hija no ha sido admitida en el colegio de nuestra elecci¨®n. Por tanto, tenemos que esperar al d¨ªa 14 de junio para saber en qu¨¦ colegio obtiene plaza.
Es posible que el colegio asignado est¨¦ bastante alejado de nuestro domicilio, o en el peor de los casos, que nuestra hija se quede sin escolarizar, aunque esto parece dif¨ªcil, ya que la Comunidad de Madrid se ha comprometido a escolarizar a todos los ni?os de tres a?os.
Nuestra experiencia personal nos ha llevado a optar por la ense?anza p¨²blica para la educaci¨®n de nuestra hija, y, parad¨®jicamente, parece que nos fuerzan a la privada, ya que actualmente se vincula el nivel de renta de la familia a la posibilidad de tener plaza en un colegio p¨²blico, por lo que ocurre lo de siempre, las llamadas "rentas medias", no obtenemos plaza y debemos sufragar un colegio privado, si es que encuentras uno con plazas libres a estas alturas.
Adem¨¢s, en nuestro caso particular, vivimos en un barrio de nueva construcci¨®n, la zona de Valderribas en Vic¨¢lvaro, en el que se han construido numerosas viviendas, pero ello no ha ido parejo con la construcci¨®n de servicios sociales. El colegio para el que nos han denegado la plaza es un colegio nuevo, el m¨¢s cercano a nuestro domicilio, en el que existen en principio 50 plazas de educaci¨®n infantil para ni?os de tres a?os, cuando es obvio que el n¨²mero de ni?os con esa edad es muy superior, de hecho, las solicitudes para el mismo han sobrepasado 200.
En resumen, somos una familia de las llamadas rentas medias, pagamos rigurosamente nuestros impuestos, optamos libremente por la ense?anza p¨²blica a la que creemos tener el mismo derecho que las familias de las llamadas rentas bajas y altas.
Sin embargo, nuestra hija no puede estudiar en el colegio m¨¢s cercano a su domicilio, con lo que se ver¨¢ obligada a pasar dos horas diarias en un autob¨²s para ir y volver del colegio, o sus padres tendremos que adaptar nuestros horarios laborales, si es que podemos, para poder llevarla y recogerla y evitarle as¨ª el autob¨²s o bien encontrar un colegio privado cercano con el gasto que esto supone para una "renta media", adem¨¢s de que la ense?anza p¨²blica es nuestra elecci¨®n.
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