Navajas inocentes
Violencia e instituto. Dos palabras que nunca debieran compartir una misma frase, pero que, ¨²ltimamente, se est¨¢n haciendo gemelas en las p¨¢ginas de sucesos de los peri¨®dicos. Y sin que nadie parezca querer separarlas. Hace unos d¨ªas, en L'Hospitalet, tres alumnos del instituto Margarita Xirg¨´, dos de nacionalidad dominicana y uno ecuatoriana, acuchillaron a otros tres estudiantes, dos espa?oles y una guineana. Varios testigos aseguran que los agresores son conocidos miembros de una banda juvenil, pero la polic¨ªa auton¨®mica dice descartar inicialmente esa probabilidad, mientras los profesores del centro se declaran sorprendidos y hablan de los inculpados como "estudiantes mod¨¦licos".
Poco antes, una joven de Elda se suicid¨®, lanz¨¢ndose por un puente, despu¨¦s de haber sufrido agresiones, durante a?os, por parte de tres compa?eras de colegio. Sus padres ya hab¨ªan presentado una denuncia al ver los golpes en el cuerpo de la ni?a, pero el comisario de Elda calific¨® el asunto como "una agresi¨®n entre chiquillas". Otro ni?o de Fuenterrab¨ªa, Jokin, tambi¨¦n se arroj¨® al vac¨ªo hace poco, tras sufrir vejaciones sin fin por parte de sus condisc¨ªpulos, pero ¨¦stos han sido condenados a una lev¨ªsima pena porque, en opini¨®n del juez, "no est¨¢ demostrada una relaci¨®n causa-efecto" en ese caso. Otro joven, Josep Maria Isanta, fue acuchillado en Berga, Barcelona, por una banda multirracial en la que hab¨ªa espa?oles, polacos, ecuatorianos, marroqu¨ªes y dominicanos, y de la que ya est¨¢n en prisi¨®n los dos sospechosos de haber matado al chico con sendas armas blancas, un espa?ol y un ecuatoriano. Los presentes, entre ellos una amiga que estaba con Josep y sufri¨® la secuencia de provocaciones que precedi¨® al suceso, acusan a los Mossos d'Escuadra de haber actuado con negligencia, pues se les avis¨® de que los camorristas les acababan de decir "os vamos a matar" e iban armados. La Generalitat lo desmiente.
En Madrid tambi¨¦n cay¨® apu?alado, en las calles de Villaverde, Manuel Gonz¨¢lez, de 17 a?os. El autor confeso del crimen es un dominicano dos a?os mayor, tambi¨¦n estudiante. En Barcelona, los cuchillos acabaron con el alumno colombiano Ronny Tapias, a quien los miembros de la banda de los ?etas confundieron con un integrante de otra banda rival, la de los Latin Kings. El director de la Polic¨ªa dijo, sin embargo, que las actuaciones de ese tipo de grupos estaban siendo en Espa?a "muy puntuales y limitadas".
Son ejemplos suficientes y, cuando se opera con ellos, dan un resultado preocupante: demasiadas muertes sumadas a demasiadas disculpas. Como si todo el mundo quisiera desembarazarse del problema. As¨ª fue, por ejemplo, cuando unos ultras mataron a las puertas del Vicente Calder¨®n a un seguidor de la Real Sociedad y los directivos del Atl¨¦tico de Madrid repet¨ªan una y otra vez: "Ha sido fuera. El crimen se ha cometido fuera del campo". Y as¨ª vuelve a ser, ahora mismo, cuando algunos j¨®venes caen muertos a las puertas de sus institutos y sus directores se apresuran a declarar justo lo mismo: "Ha sido fuera. Ha sido fuera de nuestras instalaciones".
Un informe de la Comunidad de Madrid dice que en los ¨²ltimos tiempos se detecta un alto ¨ªndice de agresiones en el entorno escolar, que cada vez es m¨¢s frecuente que grupos de matones esperen a sus compa?eros a la salida de los institutos, armados con navajas, para agredirlos o robarles. Un segundo informe dice que el a?o pasado fueron requisadas m¨¢s de 3.000 armas blancas en la regi¨®n. Y un tercero calcula que s¨®lo en Madrid m¨¢s de 1.000 personas forman parte de bandas urbanas. La delegaci¨®n del Gobierno en la capital asegura preparar medidas de choque para atajar esta lacra. Navajas e institutos. Dos palabras antag¨®nicas, igual que violencia y educaci¨®n. Algunos se escandalizan cuando se habla de la necesidad de poner vigilancia en los centros educativos y, como ya se hace en otros pa¨ªses europeos, colocar detectores de metales en sus entradas. Pero es necesario, y tambi¨¦n prohibir la fabricaci¨®n y comercializaci¨®n de armas blancas, que hoy se exponen y venden en cientos de comercios. ?Por qu¨¦? ?Para qu¨¦ puede valer una navaja en 999 de cada 1.000 casos, excepto para cometer un crimen? Las navajas, los que las llevan y los que se las venden nunca son inocentes. Hay que detener esa rueda, y ya. Lo contrario de las soluciones son los muertos.
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