"Los Giardini son un 'ready-made"
El proyecto que Muntadas muestra en el pabell¨®n espa?ol se concreta en un espacio central de 12¡Á12 metros, donde se despliegan fotograf¨ªas, v¨ªdeos y documentos; en las cinco galer¨ªas que rodean el ¨¢mbito principal se presentan otros doce trabajos, la mayor¨ªa desarrollados a lo largo de diez a?os, que tienen que ver con la traducci¨®n. Lo primero que ve el visitante en la fachada del pabell¨®n espa?ol es el r¨®tulo "atenci¨®n, la percepci¨®n requiere compromiso", un leitmotiv que se repite en todas las presentaciones de la serie On translation y que sit¨²a al receptor en destinatario ¨²ltimo de las obras. "Mi trabajo es fl?neur, I Giardini es fl?neur, porque se presenta como un lugar de tr¨¢nsito y un espacio h¨ªbrido. No es una instalaci¨®n, sino un ambiente, un espacio para ser utilizado y en el que cada visitante sacar¨¢ sus conclusiones. Con la frase que hay en la entrada les aviso de que no van a entrar en un lugar celebratorio", afirma.
"Si no tienes un pabell¨®n en la bienal, entonces no eres un pa¨ªs"
PREGUNTA. Resulta extra?o que tras cien a?os de bienal ning¨²n artista haya planteado un trabajo sobre la propia historia del acontecimiento.
RESPUESTA. Mientras estaba preparando el proyecto y reun¨ªa mis notas, aqu¨ª en Venecia, cre¨ªa que me dir¨ªan que esto estaba ya muy explorado. Pero yo no me he inventado nada. Intento explicar que cuando en estos jardines napole¨®nicos no se da ning¨²n acontecimiento, se convierten en una Ghost City, como los estudios de la Universal o Cinecitt¨¤, porque ya no hay pel¨ªcula. La bienal hace de filtro de traducci¨®n y transforma ese territorio en otra cosa. Los jardines del Castello son un ready-made.
P. La cuesti¨®n palpitante en el arte, la representaci¨®n.
R. Es que no existe el poder sin representaci¨®n, si no tienes un pabell¨®n en la bienal, entonces no eres un pa¨ªs. Y como no se pueden construir nuevos pabellones en el entorno de los jardines, se crean los metapabellones, la mayor¨ªa funcionan como consulados o embajadas. Es interesante analizar de qui¨¦n es la propiedad, el terreno, qui¨¦n ha construido, cu¨¢ndo. Es lo mismo que pasa en las ciudades, una situaci¨®n de propiedad, alquiler, sublet, cooperativas. Otro aspecto interesante es observar las fachadas de estos pabellones, las transformaciones que han sufrido a lo largo de los a?os. El alem¨¢n cambi¨® tres veces, lo mismo que el belga y el espa?ol. Y eso tiene que ver con la situaci¨®n pol¨ªtica del momento y c¨®mo esos pa¨ªses quer¨ªan ser representados por determinadas arquitecturas. Y despu¨¦s est¨¢ la organizaci¨®n de esa microciudad, como una especie de juego de estrategia en el que los pabellones ocupan determinadas posiciones. El italiano, el belga, el holand¨¦s y el espa?ol est¨¢n en la misma avenida, mientras que el franc¨¦s, el ingl¨¦s, el alem¨¢n y el canadiense se sit¨²an en lo alto de una colina. Vemos a Estados Unidos al lado de Israel...
P. Usted ha comparado esta bienal con un parque tem¨¢tico.
R. Puede que cuando naci¨® la bienal, en 1895, su estructura, basada en el modelo de las Exposiciones Universales, fuera la ideal, pero hoy es obsoleta. La bienal se origin¨® en una reuni¨®n de artistas, en el caf¨¦ Florian, con el alcalde de Venecia. Entonces decidieron hacer una feria, s¨ª, una feria donde se vend¨ªan obras. Esto dur¨® hasta 1968. O sea que Venecia ten¨ªa m¨¢s que ver con Basilea, una feria cuya finalidad era conectar Italia con el resto del mundo. Venecia, la ciudad como parque tem¨¢tico esencial, es una imagen muy poderosa. Me gusta compararla con el Pueblo Espa?ol, un tipo de subcultura.
P. ?Se cerrar¨¢ con
I Giardini el ciclo On translation?
R. No. Ahora estoy haciendo un trabajo para un programa de televisi¨®n, en Tijuana (On translation fear), y trata del miedo del norte al sur y del sur al norte, de c¨®mo Estados Unidos tiene miedo del sur, del emigrante, del desconocido, y el sur sufre otro miedo, m¨¢s evidente, a la represi¨®n.
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