"Tengo que mejorar mucho mi juego"
Nadal comienza ma?ana su actuaci¨®n en el torneo londinense consciente de que le ser¨¢ casi imposible repetir lo logrado en Par¨ªs
Hubo un tiempo, en el ¨²ltimo cuarto del siglo pasado, en el que un sueco que apenas superaba los 20 a?os, alto, fino, desgarbado, cargaba bajo el brazo media docena de pesadas raquetas de madera, marcos Donnay, cuerdas de tripa Babolat apretadas a la incre¨ªble tensi¨®n de 32 kilos,saltaba de Par¨ªs a Londres, de la tierra roja a la hierba h¨²meda, se colocaba dos pasos detr¨¢s de la ¨²ltima l¨ªnea de cal, en el centro justo, y, despu¨¦s de una peculiar y exagerada mec¨¢nica gestual, empezaba a soltar demoledores y extra?amente colocados golpes liftados. Era imbatible. Lo fue, en tierra y en hierba, ocho a?os. Fue Bjorn Borg.
Esta misma semana, 25 a?os despu¨¦s del tercer y ¨²ltimo doblete del sueco de hielo, un adolescente mallorqu¨ªn de sangre caliente y m¨²sculos de acero, el mismo golpe liftado, la misma exagerada mec¨¢nica gestual, la misma ubicaci¨®n en fondo de pista, el mismo rev¨¦s a dos manos, ha llegado a Londres procedente de un domingo victorioso en Par¨ªs. Demasiado evidente el paralelismo como para no sentarse frente a Rafa Nadal y record¨¢rselo, y preguntarle si en los tiempos que corren, cuando m¨¢s irreconciliables parecen la tierra y la hierba, no ser¨¢ ¨¦l el hombre elegido por el destino para unficar ambas superficies. Y justo 25 a?os despu¨¦s, una fecha redonda. Un aniversario.
"S¨ª, Borg gan¨® cinco Wimbledons seguidos, y tambi¨¦n seis Roland Garros con el mismo juego, pero era otra ¨¦poca", dice Nadal. "Con el juego de Borg, hoy en d¨ªa no ganar¨ªa ning¨²n Wimbledon. Se puede ganar, se ha ganado jugando atr¨¢s, pero la forma en que jugaba ¨¦l..." En Wimbledon han ganado despu¨¦s de Borg jugadores sin volea, como Roddick o Agassi, pero ¨¦l, Borg no tendr¨ªa nada que hacer.
Borg jugaba con raqueta de medera, pesada, de cabeza peque?a, de m¨ªnimo punto dulce, una madera de golf casi. Despu¨¦s de perder ante McEnroe la final del Open de Estados Unidos de 1981, Borg carg¨® a la espalda con su bolsa de raquetas, y sin esperar a la entrega de trofeos, sin cambiarse, vestido de tenista, tom¨® un taxi al aeropuerto. Volvi¨® a las pistas 10 a?os m¨¢s tarde, en 1991. Volvi¨® a los 34 a?os, la misma melena, la misma ropa Fila ajustad¨ªsima, la misma raqueta de madera Donnay. Como si nada hubiera cambiado. Volvi¨® en el Open de Montecarlo. Volvi¨® para que un tal Jordi Arrese le barriera de la pista, le enviara de lado a lado de la pista, penoso, intentando restar bolas imposibles, intentando devolver los misiles que sin piedad le lanzaba con su moderna raqueta de grafito, ligera, grande, punto dulce extenso, mort¨ªfera.
"He visto alg¨²n partido de Borg en v¨ªdeo y creo que su estilo ser¨ªa complicado ahora mismo", dice Nadal. "Ahora se saca mucho m¨¢s fuerte que entonces, y la bola tiene m¨¢s velocidad".
Nadal llega a sacar a 200 por hora, una velocidad con la que Borg no pod¨ªa ni so?ar, pero una velocidad que a¨²n se queda corta comparada con la de los ca?oneros que florecen en junio, cuando las pistas se ti?en de hierba, gente como Roddick, Hewitt, o Federer. ?sta es una de las razones por las que Nadal no es muy optimista en v¨ªsperas de su regreso a Wimbledon, donde debuta ma?ana ante el veterano norteamericano Vincent Spadea, el mismo que le elimin¨® el a?o pasado del torneo de Madrid.
Otra raz¨®n es la cercan¨ªa de su coronaci¨®n el Roland Garros, hace dos semanas, con el comienzo de Wimbledon. "El calendario est¨¢ mal hecho", dice Nadal. "Hay s¨®lo dos semanas entre los dos grandes. Y si llegas a semifinales o a la final de Roland Garros es imposible enlazar; no puedes seguir jugando porque tienes una bajada de tensi¨®n. Y adem¨¢s el f¨ªsico no puede. Roland Garros es un torneo dur¨ªsimo y f¨ªsicamente terminas cansado. Es complicado as¨ª adaptarse a la otra superficie".
Entre 1980 y 2004, entre Borg y Nadal, s¨®lo McEnroe, Lendl, Edberg, Courier y Agassi han sido capaces de alcanzar las finales de Roland Garros y Wimbledon el mismo a?o. Ninguno de ellos gan¨® las dos. Y alguno, como Courier o Edberg, perdi¨® ambas.
"Soy consciente de que es un torneo complicad¨ªsimo, de que es casi imposible que alg¨²n a?o pueda hacer algo importante en Londres", dice Nadal. "Tengo que mejorar mucho mi juego y eso es lo que quiero, mejorar mi servicio, mejorar mi volea, y todos mis golpes adaptarlos un poquito para que cuando llegue pueda jugar de otra manera. Pero me lo voy a tomar con calma. Haber ganado un torneo de grand slam me da calma. Y ahora me toca seguir trabajando d¨ªa tras d¨ªa, con tranquilidad y con ganas de mejorar. Y s¨®lo as¨ª tendr¨¦ posibilidades alg¨²n a?o".
Partidos m¨¢s interesantes de hoy (Digital +): Federer-Mathieu, Hewitt-Rochus, Feliciano-L¨®pez-Pahu, Mart¨ªn-Rusedski, Johansson-Monta?¨¦s, Marrero-Jackson, Verdasco-Robredo.
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