M¨¢s de 430 juzgados persiguen desde hoy los casos de violencia machista

Hoy se da el ¨²ltimo gran paso legal en la lucha contra la violencia que sufren las mujeres a manos de su pareja o ex pareja. La Ley Org¨¢nica de Medidas de Protecci¨®n Integral contra la Violencia de G¨¦nero, aprobada por unanimidad a finales del a?o pasado, entra totalmente en vigor. Comienzan a regir los dos t¨ªtulos pendientes, cuyo objetivo es mejorar sustancialmente la protecci¨®n que ofrece la justicia a las mujeres maltratadas por su pareja o ex pareja, a sus hijos y a las personas especialmente vulnerables agredidas por otra con la que convivan (al margen del sexo de ambas). Para ello se establecen tres herramientas que hoy se estrenan: los juzgados y fiscales especializados y el agravamiento penal para los hombres agresores en varios supuestos, lo que suscit¨® fuerte pol¨¦mica.

Los hombres recibir¨¢n mayor castigo que las mujeres por lesiones, coacciones o amenazas

S¨®lo 17 juzgados de 14 grandes ciudades se dedicar¨¢n a la violencia contra la mujer

En cada audiencia provincial y tribunal superior existe un fiscal especializado en la materia

PENAS M?S GRAVES PARA LOS HOMBRES

Desde hoy, los varones tendr¨¢n mayor castigo que las mujeres por agredir a su pareja en varios supuestos. Este agravamiento tambi¨¦n regir¨¢ en todos los casos para la persona que da?e a otra "especialmente vulnerable" con la que conviva, al margen del sexo de ambos.

- Lesiones. En el C¨®digo Penal vigente, las lesiones a la pareja son delito tanto cuando los comete un hombre como una mujer. Sin embargo, la ley integral establece que si la v¨ªctima es una mujer agredida por su marido o ex compa?ero se agrave la pena, que ser¨¢ de dos a cinco a?os de prisi¨®n para el maltratador. Si la agresora es la mujer, el castigo ser¨¢ de seis meses a tres a?os de prisi¨®n.

- Maltrato ps¨ªquico. El menoscabo ps¨ªquico y el maltrato sin lesi¨®n a la esposa o ex compa?era se castigar¨¢ con una pena de prisi¨®n de seis meses a un a?o o de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 80 d¨ªas. El juez tambi¨¦n podr¨¢ inhabilitar al padre para ejercer la patria potestad. Si la culpable es la mujer, la pena ser¨¢ de tres meses a un a?o de prisi¨®n o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 80 d¨ªas. Si el juez lo decide, tambi¨¦n podr¨¢ perder la patria potestad.

- Amenaza leve. Si la v¨ªctima es su mujer o ex mujer, el hombre ser¨¢ castigado por delito con prisi¨®n de seis meses a un a?o o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 80 d¨ªas. El juez podr¨¢ inhabilitarle para ejercer la patria potestad. Si la mujer amenaza levemente a su pareja masculina, se considerar¨¢ falta y la pena ser¨¢ de localizaci¨®n permanente de cuatro a ocho d¨ªas o de trabajos en beneficio de la comunidad de cinco a 10 d¨ªas.

- Coacciones leves. La pena para el hombre que comenta el delito de coaccionar levemente a su pareja femenina ser¨¢ de seis meses a un a?o de prisi¨®n o trabajos en beneficio de la comunidad. El juez tambi¨¦n podr¨¢ inhabilitarle para el ejercicio de la patria potestad. Si quien coacciona es la mujer, la pena ser¨¢ de localizaci¨®n permanente de cuatro a ocho d¨ªas o de trabajos en beneficio de la comunidad de cinco a diez d¨ªas.

17 JUZGADOS EXCLUSIVOS

Desde hoy existe en todos los partidos judiciales de Espa?a al menos un juzgado especializado en violencia sobre la mujer. Recibir¨¢ todas las denuncias de las v¨ªctimas, instruir¨¢ los casos (en algunos casos tambi¨¦n juzgar¨¢ penalmente cuando el acusado haya prestado su conformidad a la pena pedida por el fiscal), establecer¨¢ medidas de protecci¨®n y decidir¨¢ sobre las aspectos civiles derivados, como el divorcio, la custodia de los hijos o el uso del domicilio familiar. Se encargar¨¢ de todo ello hasta que se extinga la responsabilidad penal del condenado.

"A partir de ahora se acaba con la dispersi¨®n judicial de los casos de violencia de g¨¦nero", afirma la magistrada Montserrat Comas, presidenta del Observatorio contra la Violencia Dom¨¦stica y de G¨¦nero del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

De los 434 juzgados, s¨®lo 17 son de nueva creaci¨®n y se dedicar¨¢n en exclusiva a la violencia contra la mujer (la gran mayor¨ªa, por tanto, mantendr¨¢ adem¨¢s sus tareas habituales, lo que ha motivado quejas). Est¨¢n situados en Madrid (tres), Barcelona (dos), M¨¢laga, Valencia, Sevilla, Murcia, Granada, Las Palmas, Santa Cruz de Tenerife, Palma de Mallorca, Alicante, Vitoria, Bilbao y San Sebasti¨¢n. Los ocupan 14 mujeres y tres hombres. Adem¨¢s, en 104 partidos judiciales que s¨®lo cuentan con un juez, ¨¦ste ejercer¨¢ tambi¨¦n como juez especializado en violencia, am¨¦n de ejercer como titular de primera instancia e instrucci¨®n. En otras 313 demarcaciones que cuentan al menos con dos juzgados, uno de ellos (generalmente el juzgado de creaci¨®n m¨¢s reciente, por orden del CGPJ ante la falta de voluntarios) se especializa en violencia, aunque mantendr¨¢ tambi¨¦n el resto de sus cometidos. "Aunque hay buena predisposici¨®n de los jueces, a muchos les preocupa este destino, entre otras cosas por que van a estar en el punto de mira", afirma la magistrada Comas.

FISCALES ESPECIALES

A partir de hoy, en cada audiencia provincial y tribunal superior de justicia existir¨¢ tambi¨¦n un fiscal especializado en violencia sobre la mujer. Ya se han nombrado 50, de los que 32 son mujeres. Depender¨¢n de un superfiscal contra la violencia sobre la Mujer, a¨²n sin nombrar, que previsiblemente ser¨¢ designado en el Consejo Fiscal convocado para el 13 de julio.

El fiscal de Sala contra la Violencia sobre la Mujer podr¨¢ intervenir directamente en procesos penales de "especial trascendencia", en raz¨®n de n¨²mero de v¨ªctimas, gravedad del hecho o trascendencia p¨²blica o social de la infracci¨®n, informa Julio M. L¨¢zaro. El fiscal de Sala informar¨¢ al fiscal general del Estado de las discrepancias t¨¦cnicas que se susciten entre las diversas fiscal¨ªas en la aplicaci¨®n de las normas de violencia de g¨¦nero.

REHABILITACI?N PARA EVITAR LA C?RCEL

La ley integral prev¨¦ que las penas por violencia dom¨¦stica inferiores a dos a?os de prisi¨®n puedan suspenderse si el condenado cumple varios requisitos. Entre las condiciones para evitar la c¨¢rcel figura someterse a un tratamiento de rehabilitaci¨®n para que no vuelva a maltratar.

Sin embargo, seg¨²n varias fuentes, la Administraci¨®n a¨²n no ha puesto en marcha esta terapia para evitar la prisi¨®n. Faltan varios pasos por dar, tanto en el terreno de las comunidades aut¨®nomas como en el del Gobierno central, a?aden. En cambio, los tratamientos de rehabilitaci¨®n s¨ª se ofrecen en las c¨¢rceles. Seg¨²n la Direcci¨®n General de Instituciones Penitenciarias, 168 presos por violencia dom¨¦stica recluidos en 21 prisiones participan ahora en los programas de rehabilitaci¨®n, que duran un a?o.