Rep¨²blica frente a Ca¨ªdos
El monumento franquista ser¨¢ una plaza, y un centro republicano acoger¨¢ 'pisos-loft'
Barcelona se despide definitivamente de lo que quedaba del monumento de los Ca¨ªdos, que fue levantado en la Diagonal en 1951, y recuperar¨¢ el conocido como edificio de la Rep¨²blica en Poblenou, entre las calles de Badajoz y Pujades. La casualidad hizo que ambas decisiones se tomaran ayer en la comisi¨®n de gobierno del Ayuntamiento barcelon¨¦s. Ambos elementos, el monumento y el edificio de Poblenou, tienen un pasado precisamente marcado por la historia reciente.
El monumento a los Ca¨ªdos se erigi¨® inmediatamente despu¨¦s de acabada la Guerra Civil. La iniciativa de construir un monumento "a la entrada de la ciudad" la tom¨® tambi¨¦n el Ayuntamiento de Barcelona en mayo de 1939, y para ello cre¨® una comisi¨®n mixta, integrada por cuatro tenientes de alcalde y cuatro mandos de Falange Espa?ola Tradicionalista y de las JONS. La ejecuci¨®n de la decisi¨®n se demor¨®. Pasaron los a?os y el conjunto escult¨®rico de Josep Clar¨¤ fue levantado finalmente en 1951.
Desde esa fecha fue lugar de celebraciones franquistas y falangistas. Pero tambi¨¦n fue el s¨ªmbolo elegido para evidenciar todo lo contrario: la protesta contra el r¨¦gimen franquista, como ocurri¨® con la colocaci¨®n de dos artefactos explosivos en 1972 y 1974, seg¨²n recoge el libro Monuments de Barcelona. No pocas manifestaciones universitarias de la ¨²ltima d¨¦cada de la dictadura rociaron de rojo las figuras sufrientes de Clar¨¤. En 2001, la escultura fue destrozada y desde entonces perviv¨ªa la columnata que lo rodeaba. Ahora ese espacio, de unos 5.100 metros cuadrados, se convertir¨¢ en una plaza urbana que conservar¨¢ el arbolado que ten¨ªa -se completar¨¢ con m¨¢s especies- y pretende ser el punto de encuentro del campus norte y sur universitario.
El pasado y el futuro del edificio del Poblenou es m¨¢s singular. Se trata de un inmueble situado en la esquina de las calles de Pujades y Badajoz. Un lugar que, como muchos otros de esa parte de lo que ahora es el distrito de Sant Mart¨ª, primero fue zona de pastos y luego de soleras para las telas de indianas. La primera inscripci¨®n registral del edificio es de 1886, fecha en la que era un almac¨¦n, de acuerdo con un estudio realizado por el arquitecto Antoni Vilanova i Omedas. Entre 1911 y 1920 el edificio se convirti¨® en la sede de la Juventud Democr¨¢tica Radical Instructiva del Poblenou, una agrupaci¨®n que no tuvo m¨¢s all¨¢ de 50 asociados, seg¨²n el historiador Joan B. Culla. Que el edificio tuvo una estrecha ligaz¨®n con la Rep¨²blica tambi¨¦n lo refrenda la gu¨ªa telef¨®nica de 1935, que lo presenta como "Centro Republicano".
Algunos elementos del exterior del edificio dan fe de esa relaci¨®n, especialmente el disimulado busto de la Rep¨²blica que se alzaba en la fachada -y que curiosamente pervivi¨® a lo largo de buena parte del franquismo- y una inscripci¨®n que lo presentaba como Casino Familiar. Parece que ese conjunto fue el ¨²nico de la decena de locales que los radicales republicanos tuvieron en Poblenou que sobrevivi¨®. Entre los a?os 1944 y 1946, relata el estudio del arquitecto Vilanova, el edificio se destin¨® a sala de baile. Corrieron los a?os y el inmueble alberg¨® una f¨¢brica de aparatos de medici¨®n y ya en ¨¦poca reciente fue la sede de la empresa de bol¨ªgrafos Amadeu Arbol¨¦s.
Ahora, lo que fue la sede de una agrupaci¨®n radical republicana se encuentra en el centro del 22@. No se reconvertir¨¢ en una industria de tecnolog¨ªa avanzada, sino en otro elemento urban¨ªstico de estos tiempos: un edificio que albergar¨¢ una decena de viviendas tipo loft y un aparthotel. El conjunto lo promueve el hotelero Jordi Clos.
Es un proyecto que quiere preservar, al menos en parte, la memoria del pasado. Por eso, el edificio se someter¨¢ a una profunda reforma y rehabilitaci¨®n para adecuarlo a las necesidades de las viviendas. Eso s¨ª, conservar¨¢ la fachada del centro republicano que fue.
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