El Madrid ficha un pulm¨®n
El club anuncia la llegada de Diogo, un portento f¨ªsico, y hace oficial la contrataci¨®n de Pablo Garc¨ªa
El Madrid dio por fichado al jugador uruguayo Carlos Diogo en un comunicado difundido ayer de madrugada en la p¨¢gina de Internet del club. El fichaje se cerr¨® por seis millones de euros. A cambio, el jugador quedar¨¢ unido al Madrid por cinco temporadas. Con 21 a?os, el lateral derecho titular de la selecci¨®n charr¨²a se convierte de esta manera en el futbolista uruguayo de proyecci¨®n profesional m¨¢s r¨¢pida de la ¨²ltima d¨¦cada. En seis meses ha pasado del Pe?arol, en el que ganaba 30.000 euros anuales, al River Plate, que le pag¨® 180.000 por medio a?o. En el Madrid su ficha rondar¨¢ el mill¨®n.
Diogo es, ante todo, un pulm¨®n que corre por cinco. Ciertos informes t¨¦cnicos en poder del Madrid atestiguan que es una perla de la polivalencia. Un lateral largo cuya capacidad f¨ªsica lo mismo le da para jugar de volante por la derecha que de medio centro o de interior izquierdo.
"Tiene gran despliegue", dice Aguirre, ex t¨¦cnico del Pe?arol, "pero en la banda izquierda pierde"
El entrenador que lo dirigi¨® cuando ganaba 30.000 euros al a?o, Diego Aguirre, bendice el traspaso, pero no opina exactamente igual. "Sin duda Diogo es un buen jugador de mucho futuro", dice; "pero por la izquierda no le colocar¨ªa. Yo lo he utilizado alguna vez en esa banda y se pierde porque no es su perfil. Pierde la capacidad para llegar al fondo y poner el centro de primera".
"Tiene muy buen despliegue", resume Aguirre; "puede jugar por dentro y por fuera. Como volante central, es ¨²til en la medida en que es r¨¢pido en las distancias largas y llega por sorpresa. Va bien de cabeza y tiene marca y personalidad. El Bernab¨¦u no le quedar¨¢ grande. Lo ¨²nico que le falta es experiencia".
La explotaci¨®n del mercado uruguayo cierra el camino a Palencia, uno de los futbolistas m¨¢s prometedores del Madrid B. Adem¨¢s, es indicio del entierro de la pol¨ªtica de m¨¢rketing que alent¨® los fichajes m¨¢s opulentos del mandato de Florentino P¨¦rez.
Con Diogo, el Madrid anunci¨® oficialmente que tambi¨¦n ficha a Pablo Garc¨ªa, medio centro de Osasuna. Seg¨²n fuentes del club, la doble operaci¨®n asciende a diez millones de euros. Una cifra que se aleja de las cantidades de otros veranos. Un dinero que no permitir¨ªa fichar futbolistas de "proyecci¨®n internacional" -parafraseando al presidente-. Henry, Gerrard, Lampard o Adriano, por citar nombres que suenan a cualquier aficionado japon¨¦s, superan ampliamente los 50 millones.
Diogo se ha convertido en el segundo fichaje para la temporada 2005-06, por detr¨¢s de su compatriota Pablo Garc¨ªa, que tiene pasaporte espa?ol. Ambos llegan de la mano de Paco Casal, hombre cuya posici¨®n en el f¨²tbol uruguayo oscila entre la de agente universal y propietario absoluto del negocio. Un maestro de la persuasi¨®n cada vez que se sienta a negociar con un directivo.
El perfil de ambos jugadores es parecido. Ninguno tiene fama internacional. Las multinacionales los han ignorado. Para vender champ¨² no parecen los tipos m¨¢s indicados, pero son titulares en la selecci¨®n uruguaya. Adem¨¢s, los dos son hijos de futbolistas. El padre del ex volante osasunista fue un centrocampista de brega en las Ligas regionales uruguayas. El padre de Diogo fue V¨ªctor Hugo, poderoso lateral derecho en el Pe?arol que gan¨® la Copa Intercontinental en 1982. Y tanto Carlos como Pablo responden al mismo patr¨®n: gente tranquila, disciplinada sin quererlo y devota del mate.
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