Vacaciones
La ponencia para la Reforma del Estatuto de Autonom¨ªa ha cerrado por vacaciones. Hace calor. El debate debe ser en fr¨ªo. La fijaci¨®n de las competencias de la comunidad sean exclusivas, compartidas o delegadas, deben aguardar a que baje el term¨®metro. Definir la Comunidad Aut¨®noma, como naci¨®n, no. As¨ª lo afirma el presidente de esta Comunidad. No vale este t¨¦rmino para Andaluc¨ªa. Este t¨¦rmino define Espa?a, asienta la monarqu¨ªa constitucional y permite hablar de soberan¨ªa popular ¨²nica. No es revisable. Su revisi¨®n podr¨ªa abrir grietas en el sistema democr¨¢tico. No requiere una puesta al d¨ªa. Menos en dos d¨ªas y por contentar a cuatro iluminados. Hay otras cuestiones que s¨ª la requieren.
La Justicia. Su organizaci¨®n es una de ellas. Las leyes nacen en los parlamentos y auton¨®micos. Hay leyes del Estado. Hay leyes de las Comunidades. Es razonable que el Tribunal Supremo unifique la doctrina del Estado. No tiene porque serlo que los Tribunales Superiores de Justicia de las Comunidades interpreten y apliquen las leyes del Estado y de las CCAA. Los jueces son del Estado. Andaluc¨ªa es parte integrante de Espa?a. Deber¨ªan ser la ¨²ltima instancia. Estas competencias no quiebran la unidad ni implican soberan¨ªa sobre el resto del Estado. S¨®lo interpretan normas del Estado y de las delegadas constitucionalmente. Adem¨¢s, si se quiebra la unidad interpretativa, el TS la unificar¨ªa.
Miedo dan otras cuestiones. La creaci¨®n de los Consejos de Justicia Auton¨®mica, una de ellas. El CGP Judicial -se dice- es conocido como "la oficina de colocaci¨®n". Si se delegan sus funciones puede haber m¨¢s oficinas de colocaci¨®n. Un desprop¨®sito. Relaciones personales y afinidades pol¨ªticas, y no los m¨¦ritos profesionales, podr¨ªan ser los factores determinantes de los nombramientos. Estamos hartos de verlo en Madrid. Se vota por bloques, como en la guerra fr¨ªa. El Consejo y los que se van a crear, al amparo de los art¨ªculos 47 y 48 del EA, no representan al pueblo. La Justicia s¨ª emana del pueblo. El Parlamento lo representa. No s¨¦ a que se espera para que, cuando menos, el presidente del TSJ de Andaluc¨ªa lo nombre el Parlamento andaluz. El Estatuto de Andaluc¨ªa debe reclamar este derecho como uno de los m¨¢s importantes del Pueblo que representa.
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