Un n¨®rdico muy en¨¦rgico

Jorma Ollila tiene una sonrisa bien ensayada para sus apariciones p¨²blicas. El actual presidente y director ejecutivo de Nokia, la empresa l¨ªder de la telefon¨ªa m¨®vil, es, sin duda, unos de los nombres de moda en el universo corporativo europeo. Eso queda demostrado por el hecho de que, a s¨®lo tres d¨ªas de anunciar su programada retirada de la multinacional finlandesa, la Royal Dutch Shell, tercera compa?¨ªa de energ¨ªa del mundo, anunciara que, a partir de junio del pr¨®ximo a?o, Ollila se convertir¨¢ en su consejero no ejecutivo. Su gran capacidad de gesti¨®n parece estar m¨¢s que probada.

Ollila naci¨® hace 55 a?os en Sein?joki, un pueblo de 30.000 habitantes en el noroeste de Finlandia, en el seno de una familia de ingenieros. Con estudios en Ciencias Pol¨ªticas en la Universidad de Helsinki y de Administraci¨®n de Empresas en la London School of Economics, se incorpor¨® en 1978 al Citibank en Londres. En 1985, en un momento crucial para la historia de la telefon¨ªa, Ollila se pasa a Nokia como jefe de operaciones internacionales.

Despu¨¦s de un periodo relativamente corto, Ollila es nombrado jefe de finanzas de Nokia, para convertirse, m¨¢s tarde, en el jefe de la divisi¨®n de telefon¨ªa m¨®vil. Cuando el antiguo director ejecutivo de Nokia Kari Kairamo se suicid¨® en 1988, ¨¦l ya era su sucesor natural. Y Ollila no defraud¨®. En un tiempo r¨¦cord fue capaz de transformar Nokia de grupo industrial finland¨¦s de mediano alcance en la gran empresa que es hoy. En 1998, Nokia supera, por prima vez, a su gran competidor en el segmento de la telefon¨ªa m¨®vil, Motorola. Actualmente la multinacional finlandesa controla el 33% del mercado mundial frente a un 18% de la empresa estadounidense. La capitalizaci¨®n burs¨¢til de Nokia ronda los 60.000 millones de euros y opera en 140 pa¨ªses.

La varita m¨¢gica de Ollila consisti¨® en eliminar actividades duales en la empresa y concentrarse en un segmento, rodearse de un equipo de ejecutivos j¨®venes y que compartan su filosof¨ªa corporativa y dar particular importancia a I+D. En muchas ocasiones ¨¦l ha repetido, en pocas palabras, su filosof¨ªa: "No innovar es perecer".

Ollila es tambi¨¦n miembro del consejo de directores de Ford Motor y de la papelera UPM-Kymmene. Conocida es su f¨¦rrea autodisciplina de trabajo y que, a su vez, exige a sus subalternos. El seguimiento al detalle de la empresa comienza cada d¨ªa a las seis de la ma?ana. Esto exige una ¨®ptima condici¨®n f¨ªsica. El ejecutivo finland¨¦s se cuida practicando tenis, footing y, como corresponde a un aristocr¨¢tico n¨®rdico, algo de caza en los interminables bosques de abedules y de abetos que cubren Finlandia.